Durante la recepción de la boda de una joven pareja, los invitados decidieron borrachos a jugar a las escondidas. Se decidió que el novio sería "eso" y eventualmente fue encontrando a todos, pero no a su nueva novia. Finalmente se puso furioso y decidió que ya no era divertido y lo dejó. Como pasaban las semanas, él aceptó que ella lo había pensado mejor, por lo que se fue a hacer su vida, y eventualmente él hizo lo mismo.
Años más tarde, una señora de limpieza desempolvó un viejo baúl del ático del edificio donde tuvo lugar la recepción, y por curiosidad lo abrió. Dentro del baúl estaba el cuerpo descompuesto de la novia desaparecida, quien aparentemente había quedado atrapada dentro del baúl donde se había escondido. Si murió por asfixia o por hambre es desconocido, pero su rostro estaba congelado en un grito y no hubo grandes rasguños en el interior del baúl, donde ella trató de regresar con el hombre que amaba.