𝐕𝐢 ( III ) + 18

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se agradece si me siguen.

━ Habían pasado unos días de la visita repentina de Vi, nada había cambiado y tu clientela seguía como siempre

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━ Habían pasado unos días de la visita repentina de Vi, nada había cambiado y tu clientela seguía como siempre.

La habitación que ocupabas en el prostíbulo era la misma que ocupabas para dormir y vivir, así que dejaste un letrero fuera de las cortinas que especificaba de forma amenazante que no estabas en horario de trabajo.

Afirmaste bien la toalla alrededor de tu pecho que cubría hasta los muslos y saliste del baño, desordenando el mojado cabello típico después de una ducha. Te pusiste de cuclillas para sacar la ropa interior del cajón y tu piel se erizó al oír el sonido de la cortina moverse.

Tomaste rápidamente una daga escondida al fondo del mueble y la lanzaste en dirección de dónde provenía el sonido. Te espantaste al ver que era la pelirrosa y que gracias a que no era una tonta y tenía reflejos, esquivó la cuchilla al tiempo justo. ⸺ Cielos, yo también te extrañé, preciosa ⸺ soltó, irónica.

⸺ Vi.. ¿Qué.. qué haces aquí? ¿N-no leíste el cartel afuera? ⸺ sujetaste mucho más la toalla y en unos segundos la pelirrosa te acorralaba contra el mueble, disminuyendo el espacio entre ambas.

⸺ Dijiste que querías tu paga, Cupcake.. ⸺ se inclinó sobre tí por la diferencia de altura, quedando su rostro a escasos centímetros del tuyo, teniendo esa sonrisa juguetona pero superior en sus labios, no sabías si dirigir tus ojos a su boca o a sus ojos, así que los desviabas de un lugar a otro constantemente sin saber que hacer. ⸺ ¿La quieres?

Confundida, sentiste un escalofrío al sentir sus intensos ojos sobre tí ⸺ ¿Qué..?

⸺ ¿Quieres tu paga? ⸺ otro escalofrío recorrió tu cuerpo, no lo entendías, ¿Qué clase de poder tenía sobre tí esta chica en específico?

⸺ Yo... Puedes quedártela ⸺ desviaste tu mirada al piso, como si fuese la cosa más interesante del mundo.

⸺ Cariño, mírame ⸺ tragaste saliva al sentir como su fría mano te levantaba la barbilla, haciendo que la observaras.  Lanzó una bolsa a un lugar cualquiera de la habitación y por el sonido que hizo al chocar, suponías que eran las monedas. ⸺ Que le den al dinero, entonces.

Antes de que pudieras reaccionar, sentiste sus labios contra los tuyos. Por unos segundos, te costó reaccionar hasta que lo hiciste y te aventaste hacia ella, haciendo que cayera sobre la cama y te encontraras encima, queriendo profundizar el beso. Colocaste tus manos en su nuca, sintiendo como sus manos subían de tu cintura, a tu cadera hasta llegar al nudo de la toalla y desatarlo, tomó la tela y la lanzó, en ese momento no te importaba dónde cayó, tampoco estar al descubierto frente a ella.

Comenzó a explorarte con la yema de sus dedos, contorneaba tus pechos, tu cintura, tu cadera hasta llegar a esa zona y acariciar, provocando que dieras un respingo sobre ella. Soltó una pequeña sonrisa y mordió tu labio inferior, seguido de eso, te posicionó bajo ella y soltó tu labio, dándote una última sonrisa antes de comenzar a bajar por tu cuello, haciendo un recorrido de besos mientras de tu boca escapaban jadeos que no podías retener.

⸺ ¿Por qué.. sigues vestida? No es jus--  las palabras se atascaron en tu garganta al sentir como comenzaba a lamer y morder tu clítoris a su gusto. Tú espalda se arqueó cuando metió un dedo en tu entrada, luego otro y otro hasta tener tres dígitos dentro tuyo hasta que empezó a moverlos, haciendo un vaivén intenso que entraba y salía, sin poder dejarte pensar con claridad.

Estuvo así unos segundos hasta que sintió como tus piernas temblaban y se detuvo, poniéndose de pie nuevamente mientras aún tenía sus ojos conectados con los tuyos. Comenzó por quitarse los zapatos, su chaqueta, pantalones y camisa, quedando solamente en ropa interior.

Si antes estabas húmeda ahora lo estabas el doble, ¿Esos eran abdominales? Vaya que sí lo eran. Te sentaste en la cama y la ayudaste a remover el sostén, seguido de eso, volvió a quedar sobre ti mientras comenzabas a acariciar su espalda hasta llegar a su trasero, el cual apretaste sin dudar, llevándote una nalgada por parte de la pelirrosa, haciendo que soltaras una risa entre sus labios que buscaban los tuyos hasta que le diste libre acceso a tu boca, comenzando a besarte de forma dulce pero salvaje.

Terminó por quitarse la última prenda y se acomodó, colocando una pierna sobre la tuya, sintiendo el roce de tu parte íntima con la suya, arrebatando un jadeo de satisfacción de sus labios.

La incitaste a que siguiera entre susurros cada que te daba tiempo para respirar mientras prácticamente te comía la boca.

Cuando comenzó a moverse, se separó del beso, enderezando su espalda y sentiste una corriente de excitación que terminó invadiéndote por completo. Su ritmo empezó a acelerar, sintiendo que estaba a punto de llegar a su clímax.

Enterraste tus uñas en su espalda cuando sentiste que ya no podías aguantarlo más, rindiéndote ante ella. Bastó un par de movimientos más de su parte para que te alcanzara, soltando un gemido ronco que contenía tu nombre y se dejó caer suavemente sobre tí.

Empezaste a acariciar su cabello rosa mientras Vi intentaba mantener controlada su respiración, trazando líneas invisibles con su dedo en tu abdomen, algo que encontraste de lo más tierno en esa situación. ⸺ Eres ardiente, Cupcake.

Soltaste una risa y le diste un pequeño golpe en el hombro, provocando una sonrisa en su rostro.

Arcane ⸺ 𝗼𝗻𝗲 𝘀𝗵𝗼𝘁𝘀.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora