Arcane ⸺ 𝗼𝗻𝗲 𝘀𝗵𝗼𝘁𝘀.

100K; Jinx.

(Maratón de Shots 2/??)

* Contenido crudo.

━ La idea de infiltrarse en territorio enemigo se te fue implantada desde muy pequeña; desde que tienes la edad para recordar, te dieron entrenamientos para combatir y prácticamente no sentir emoción alguna por otro ser vivo.

Literalmente desde que eras una niña te obligaron a asesinar a cualquier tipo de animal, sea adulto o un bebé, aprendiste a que no te importara.

Te implementaron una "segunda vida" para cuando llegaras con el enemigo, siempre teniendo en tu memoria el porqué odiabas a Piltóver y al Consejo, tus propósitos en el Distrito y que darías tu vida por la llamada Nación de Zaun, pero solo era una fachada.

Según te habías informado, la familia Ferros te había encontrado como una simple bebé en una canasta en las puertas de su inmenso hogar, dónde simplemente vieron una oportunidad en vez de a una niña.

Hubieron miles de formas en las que los conflictos entre Piltóver y Zaun pudieron haber acabado, pero ninguna dió resultado.

El Consejo cuando estaba pactando la paz fue destruído. Meses después Noxus se alió con los de arriba y atacaron a los de abajo, fallando por desconocer el territorio, siendo emboscados y masacrados, la mayoría. Retiraron sus ejércitos y dejaron de lado la guerra si así podía decirse.

Tu familia estaba preparando los últimos detalles para tu falsa nueva imagen, observando a personas de un lado a otro, recordándote cuál sería tu historia y propósito ahí abajo.

⸺ ¿Te sientes lista? ⸺ levantaste la mirada.

⸺ Sí, Camille. ⸺ dijiste de manera seria, caminando hasta el espejo, dándote una mirada rápida.

⸺ ¿Qué nombre le darás a los de abajo? ⸺ preguntó la mujer.

⸺Lysa. ⸺ murmuraste, observando tu apariencia, de verdad parecías una rebelde de Zaun, una camisa negra ajustada, al igual que los jeans junto a una chaqueta verde oscura de mezclilla sobre tus hombros, tus ojos con un delineado negro era algo que según una de tus hermanas no podía faltar. "Horrible, ¿Cómo pueden tener eso todo el día?" No era algo que entendieras, casi nunca te dejaron salir de tu hogar. Como toque final obviamente no podían faltar los tatuajes que no eran falsos, eran cosas que no entendías, tampoco te importaban.

Volteaste hacia la mayor, que asintió y te dió una señal de que la siguieras. Tu tomaste tu bolso e hiciste caso, llegando junto a ella a un barranco que daba a la ciudad subterránea.

⸺ El límite de tu misión es de diez meses. ⸺ comenzó a hablar la de cabello gris ⸺ Entras, te integras, localizas al nuevo dueño del Distrito y acabas con él. ⸺ asentiste, aún mirando los edificios ⸺ Y si logras volver, cosa que creo que harás, estaré orgullosa de tí. Y podrás usar el apellido Ferros. ⸺ Levantaste tu mirada hacia sus celestes ojos que eran como los tuyos, sin sentimientos, únicamente habían color en ellos, pero creías en su palabra.

⸺ Está bien, Camille. ⸺ murmuraste, comenzando a caminar hacia el final. Giraste unos segundos, encontrándote con que ella ya había comenzado a caminar hacia la mansión.

Tu solo suspiraste, dejándote caer hacia uno de los techos de los edificios, saltando hacia los siguientes y así consecutivamente hasta llegar al suelo.

Te quedaste observando el ambiente unos segundos, contemplando peleas y conflictos por todos lados, esperándote eso por parte de todo lo que te dijo tu mentora con lo que te encontrarías ahí.

Recorriste todos los lugares que podías antes de caer en La Última Gota, que parecía que la estaban remodelando como por tercera vez.

Entraste sin muchos problemas, observando la decoración como si te interesara. Encontrando grafitis rosas y azules neón por todas partes: suelo, sillas, mesas e incluso en los vasos y copas.