La última de los Black • || Libro 1 • FRED WEASLEY ||

Capítulo 11 ~ La visita de los Black

No me había movido del banco más cercano a la entrada principal de Hogwarts en cuanto envíe la carta con la mirada totalmente perdida y asustada.

No sabía si había pasado una hora, dos, tal vez quince minutos, pero el tiempo comenzó a pasar diferente desde que comencé a barajar la posibilidad.

Los alumnos pasaban por delante mía sin cesar, sabía que aproximadamente sería la hora de la cena y que me podría cruzar con Fred, por eso no levanté mi mirada hasta que noté a alguien tocando mi hombro y la abracé de inmediato.

--Lo siento--me disculpé-- Sé que no nos conocemos lo suficiente como para tomar estas confianzas.

--Tranquila Denébola, me alegra mucho que me hayas escrito pero, ¿qué es eso tan urgente que no puede esperar? ¿Estás bien?--preguntó

--Sí, es que... Es que he olvidado tomar... Yo... En fin, necesito ir a la enfermería y sabía que avisarían a Lupin. He supuesto que como eres adulta y familiar si me acompañabas quizás no le avisaban y mi tío no llegaría a enterarse...

--Enterarse, ¿de qué?--preguntó mientras su pelo cambiaba de color de rosa chillón a un marrón apagado-- Me estás preocupando Denébola

--He olvidado tomar la segunda dosis de una poción anticonceptiva--susurré-- Y esa poción, además, la hizo nuestro primo Draco en lugar de alguien especializado... No me mires así Tonks, por favor--dije dejándome caer de nuevo en el banco, abatida.

--Perdona, es que...me ha pillado por sorpresa que me llames a mí para eso. Pero, pero... ¡Vamos! ¡Por Merlín! No hay tiempo que perder.

Mi prima me arrastró por el castillo hasta llegar a la enfermería, dónde pasó un buen rato intentando que nuestro grado de parentesco fuese suficiente para no llamar a Lupin.

--Sólo quiero saber una cosa--susurró cuando Madame Pomfrey nos dejó a solas para comprobar los resultados de las pruebas-- ¿Es buen chico?

--Sí, lo es--dije con una sonrisa

--Esa sonrisa dice mucho. ¿Cuánto tiempo lleváis saliendo?--preguntó con una sonrisa y recuperando un tono de pelo más vivo

--Eh, realmente...nada.

--¿Cómo que nada?--preguntó sorprendida y yo miré hacia abajo-- Oh, ya veo... Bueno, eso cambiaría las cosas...

--¿Qué cosas?--pregunté asustada

--¿No te has planteado que pasaría si sale positivo, Dené?--preguntó y yo tragué saliva con dificultad negando con la cabeza-- ¿Quién es?

--Le conoces, no diré más...No por ahora--dije mirando hacia otro lado mientras mi prima acariciaba mi pelo.

--Bien, ya los tengo--anunció Madame Pomfrey volviendo con nosotras-- Tranquilas. Es negativo y, además, no hay ninguna contraindicación por la poción tomada.

--Bueno--dijo Tonks dando un suspiro de alivio-- Eso sí que facilita todo.

Nos despedimos de la enfermera y agradecimos de nuevo su ayuda y discreción ante un tema tan delicado.

Salimos al pasillo en silencio, pero me paré en cuanto cruzamos la puerta y me giré hacia ella.

--Gracias por venir--dije de forma sincera agarrando sus manos entre las mías.

--Puedes contar conmigo para todo lo que necesites Dené. Para eso está la familia.

Ambas comenzamos a andar por el pasillo mientras ella me envolvía en un abrazo y la acompañé hasta el vestíbulo, dónde aún llegaba el bullicio del Gran Comedor en el que estaría terminando la cena.