Capítulo 10

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Al día siguiente en el recreo Paul fue a hablar con Louis.
Yo me quedé con Ali y las demás viendo que pasaba. Ellas se habían convertido, no se como, en mis amigas.
Terminaron de hablar y Paul vino a buscarme, me sacó del grupo un momento ye llevó a una de las esquinas del patio.

-He hablado con él, le he dicho que solo quieres ser su amiga y que si no te deja en paz te perderá para siempre.

- Muchas gracias, de verdad que te debo una- le dije cogiéndole las manos-
Le di un abrazo y me fui de nuevo con mis amigas.

Al terminar el día me fui a casa junto a Paula, como siempre. Por el camino me preguntó:

- Alma, ¿tienes algo que hacer esta tarde?

- Creo que unos cuantos ejercicios de Matemáticas, ¿por qué?

-¿Puedo ayudarte?

- Sé hacerlos sola, pero si quieres puedes venirte a mi casa esta tarde que no esta mi tía.

- Vale, a las cinco estoy allí.

Entró en su casa y yo en la mía.

Llegadas las cinco ya estaba llamando al timbre. Fui a abrirle y entró.
Le dije que se acomodara en el sofá y traje batidos para los dos.

- ¿Ya has echo los ejercicios?- me preguntó él-

- Si, eran demasiado fáciles.

Los dos soltamos una breve carcajada que duro dos segundos.

-¿Alma puedes poner música?- preguntó-

- Por supuesto, ¿que pongo?

- Pues... algo de blues o jazz, ¿no?

- Si, perfecto.

Saqué un antiguo disco de vinilo de Donna Hightower y lo puse en el tocadiscos.

Stormy WeatherDonde viven las historias. Descúbrelo ahora