Sobrevivir o Morir

Capitulo 11: No somos los únicos

Quién lo diría, el fin del mundo jamás creí que aquel sería el último día normal que tendría en mi vida, ahora defiendo a un grupo de personas y al mismo tiempo trato de encontrar una cura para salvar lo que queda de la humanidad.

—¡Juliette! —Era Mack, probablemente estaría molestando tan temprano —Enserio, ¿Acaso dormiste un poco?

Me quedé dormida en el laboratorio
—Eso importa, creo que tengo avances.

—Eso espero ¿Por qué tenemos un problema?

—¿Qué sucede? —Cuando Mack usaba la palabra “Problemas” es por qué enserio había problemas.

—Tendrás que verlo por ti misma, los chicos se dieron cuenta está mañana y me avisaron enseguida

Salimos del laboratorio y de la casa, mi confusión era más que clara y quería saber lo que vieron. En una de las torres con vista a la ciudad.

—Destructora por aquí —Ese era Chris, tenía los binoculares que hayamos en la base.

—¿Qué sucede?

—No es la mejor vista pero es algo —Me señaló un edificio, en la parte de arriba se podía ver qué algo se quemaba.

—¿Qué carajos...?

—Si nos das tu permiso iremos a investigar, nos acercaremos por la cuarta avenida, hay unos apartamentos que estaba  en remodelación —Chris me indicaba dónde estaba cada lugar

—Esta bien, alista a un equipo y acércate pero no demasiado, no sabemos quiénes son o que es lo que quieren, sean cautelosos.

—Mack, quiero que vayas también, yo me quedaré, si resultan ser una amenaza alguien debe estar aquí para protegerlos.

Noah se me acercó por un lado
—Dejame ir también, te mantendré informada, mi hermano y Sophie se quedarán a ayudarte.

Suspire y apreté los dientes pero no podía negarme —De acuerdo, vayan y Noah —Lo tome de la mano —Ten mucho cuidado.

El resto se fue enseguida, pretendían irse por sus cosas cuando en realidad nos estaban dando espacio.

—Juliette tranquila, estaremos bien.

—Lo se, es solo que —Jamás había dicho tal cosa —Me preocupo por ti, no quiero perderte también.

—No lo harás, te lo prometo —Podía sentir sus manos sobre mis mejillas.

Y un beso. Magia tal vez.

Noah se fue después de ese momento, si hay algo bueno que debo resaltar del fin del mundo, es que termine junto a mi amor de secundaria o algo por el estilo.

—Ahhh el amor juvenil —Mack se paró a mi lado mientras abría una bolsa de frituras —En el fin del mundo eso no cambia.

Podía escuchar como crujían las frituras —Mack no es momento de juegos —Baje de la torre y volví a la casa.

—¿Cómo te va con Noah? —Sophie preparaba más flechas para su arco

Y yo estaba por romper algo si seguían haciendo esa pregunta
—Oye no somos celebridades para que pregunten sobre nuestra vida personal.

Sophie parecía disfrutarlo —Por si no te has dado cuenta Juliette somos de los pocos adolescentes que quedan en este lugar.

—Se lo que quieres decir pero no es asunto de nadie saber con quién me voy a la cama —Eso era sarcasmo pero Sophie se lo tomó algo literal.

—Wow con que ya sucedió —Sophie se aguantaba la risa y yo solo baje al laboratorio.

—¡Ay carajo! Sophie ven a ver esto de inmediato —Era increíble, la espere junto a la puerta

—¿Qué sucede? —Ella creyó que era algo más peligroso pero cuando vio lo mismo que yo no supo que decir.

Me acerque lentamente a Max, su piel comenzaba a verse como nueva, su cabello pelirrojo, era como si el virus se estuviera desapareciendo.

—Mierda Juliette, lo estás logrando, te ayudaré, dime qué necesitas.

—Mi padre guardaba algunas muestras del trabajo, creo que las más recientes están en ese estante.

Sophie revisaba los Miles de frascos y cajas que estaban en refrigeración
—La última que hay aquí es de dos días antes de que comenzará todo.

—¿Aún llevas la cuenta? —Eso me sorprendía, hasta este punto yo había perdido la cuenta de los días que pasaban.

Mientras tanto, Mack y Noah partían a pie con un pequeño grupo, además de Chris, Adrian y Nick se ofrecieron para acompañarlos. Les llevo unas tres horas llegar a la ciudad, los apartamentos que Chris había indicado estaban despejados, unos cuantos devoradores en la entrada pero nada complicado.

Se instalaron en el techo, podían ver a los edificios más altos pero debían ser discretos para no ser detectados.

—Con que te gusta Juliette —Mack se acerco a Noah, ambos miraban con los binoculares, bueno, Mack los cambio por un fusil de francotirador.

—Tienes estilo Mack —Eso se escuchaba a un coqueteo de Chris

Y eso solo aumentaba la confianza de Mack.

—Siempre me gusto Juliette —Noah finalmente se confesó.

Parece que todos se confesaban con Mack o ella tenía un toque especial para lograr una confesión, antes de que todo ocurriera, Mack había decidido ser agente del FBI, había comenzado siendo aprendiz pero todo cambia y nada es para siempre.
—Lo sabía, era obvio pero no estaba segura —Y Mack si, ya lo sabía pero no quería hacer falsas ilusiones en Juliette, confiaba en sus sentidos pero no del todo.

—Definitivamente hubieras Sido la mejor agente del FBI.

Mack recorría la zona a través de aquella mira del fusil. Se detuvo en las ventanas del edificio dónde vieron movimiento —Creo que tengo algo.

—¿Dónde? —Chris seguía sin ver nada

—Los tengo —Noah también lo pudo ver ¿Soldados y doctores?

Mack seguía recorriendo el edificio hasta que pudo ver un símbolo en las paredes, un símbolo que había visto antes en la casa de Juliette
—Ay Mierda.

—¿Qué sucede? —Noah no sabía por qué Mack se estaba alterando tanto.

Escucharon ruido proveniente de los callejones. Mack se giró de inmediato y era como una bomba de malas noticias, un pequeño grupo quería acercarse al edificio lleno de soldados
—Esa perra sigue viva

Noah también la reconoció al instante
—Carajo, siguen vivos.

—¿Los conocen? —Pero claro, Chris no tenía idea de quiénes eran.

—¿Deberíamos de advertirles? —Mack sabía que era lo correcto pero también se preguntaba ¿Ellos hubieran hecho lo mismo?

—Esperen, veamos que intentan hacer —Chris a pesar de no saber quiénes eran, quería esperar y ver sus movimientos —Miren, intentan entrar por atrás.

¿Quien lo diría? La chica popular de la escuela, Keyla estaba viva junto a un grupo de sobrevivientes.