Capítulo 8

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Después de comer, Zayn llevó a Louis a su casa. El castaño entró a su casa con tranquilidad, sabiendo que su padre no se encontraba. Fue a su habitación y se dejó caer sobre la cama; suspiro cuando miró al techo y llevó sus manos tras su cabeza.

Los recuerdos volvían a su cabeza, era imposible que no llegaran a su cabeza todos esos momentos donde su abuela vivía.

A pesar de que ya había hecho las paces con su padre y muchas de las cosas de su abuela ya no se encontraban en aquella habitación, Louis no soportaba estar en aquella habitación por mucho tiempo, la soledad llegaba a ser muy difícil.

Se puso de pie y, de nuevo, salió de la casa para dirigirse hacía un parque cerca de ahí. Tomó su skate y comenzó andar.

Trataba de distraerse con cualquier cosa que se atravesara en su camino, para sacar los pensamientos tristes de su cabeza. Al llegar al lugar, se encontraba vacío, a lo cual no le tomó importancia. Él no estaba ahí para hacer amigos.

Con su skate en la mano se dirigió hacia una banca y ahí se sentó, o mejor dicho, se recostó para mirar al cielo. No le intereso si alguien que pasaba por ahí le viera recostado en esa banca, o si lo juzgaban. El sonido del suave viento, pasando entre las hojas de los árboles le tranquilizaba y lograba distraerlo.

Sentir el aire golpear con su rostro y entrar por sus fosas nasales era —tal vez— la sensación más satisfactoria que podía sentir en esos momentos. Sólo él, el viento y los árboles.

No prestaba atención a los sonidos que no fueran su respiración y los árboles moviéndose, provocando que no escuchara cómo alguien se acercaba a él.

—Creí que eras un ladrón —escuchó la voz de Winston—. Venía con toda la intención de arrestarte.

—Si, claro —contestó con sarcasmo sin mirarlo—. ¿No será que viniste hasta aquí sólo buscando una forma de joderme como siempre?

—Si, como si fueran tan importante.

—Extraño que lo digas. Para ti, parezco ser muy importante. Aparte del trabajo como intento de policía y espiarme como un maldito stalke sólo para joderme la vida, ¿no tienes una vida personal? Alguna chica que te soporte para estar contigo, o al menos que finja hacerlo, porque eres insoportable —giró a verlo con una sonrisa burlona.

—Si intentas hacerme sentir mal con tus comentarios, no lo lograste.

—No lo hice con ninguna intención, es sólo la verdad —al terminar de hablar, de nuevo miró hacia el cielo.

—¿Y tú qué haces aquí? Es curioso que ni estés en casa de los Styles.

—¡Oye! No porque hayas descubierto mi relación con Harry, significa que podrás hablar de él como si tú y yo fuéramos amigos.

—¡Vaya! Que mal genio tienes, Louis.

—Déjame que paz, Winston. Ahora no estoy de humor.

El hombre suspiro como si quisiera comenzar una conversación delicada.

—Se qué tal vez no lo tomes de la mejor manera, viniendo de mi, además ya pasó algunos días, pero... lamento lo de tu abuela.

Louis se levantó para quedar sentado y lo miró con seriedad.

—¿Esto sigue siendo para molestarme? ¿O te estás burlando?

—Jamás me burlaría de algo como esto, Louis. Lo digo de verdad, lo lamento mucho. Se cuanto la querías. Se que nunca confiaras en mi, pero no soy lo que tú piensas de mi.

—Otra vez con eso —bufó con enfado—. "No soy quién tú crees" siempre lo mismo. Tú podrás decir que eres un ángel bajado del cielo, pero yo no te creo nada.

Graffiti Parte 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora