NEED - SunKi ♡

I

Kim Sunoo, omega de 21 años pelirosa y con 1.72 de altura, estaba en la habitación de su departamento.

No solía salir a la calle, le daba verguenza, su trabajo lo hacía sentir inferior a los demás.

Su madre enfermó de gravedad cuando tenía 17 años, apenas pudo acabar la secundaria y ni se molestó por pensar en una carrera para estudiar, solo quería cuidarla y al ver el gran pero gran monto de dinero que costaba el tratamiento, de inmediato busco trabajo, cualquier trabajo.

Primero intentó como niñero, pero al parever los niños lo odiaban, luego intentó como mesero, pero recibía acoso diario de muchos clientes, intentó con servicio al cliente, pero su voz no era lo suficientemente fuerte y clara para seguir con el trabajo.

Ya sin esperanzas vio trabajos en linea, todos requerían títulos o experiencia... menos uno, se llamaba "Body shoot", se trataba de subir fotografías cada cierto tiempo de diferentes partes de su cuerpo, o todo el cuerpo con algún traje, lo vio como una gran opción, su madre necesitaba cuidado constante y solo eran fotografías diarias, recibiría al rededor de 50 o 100 dólares por cada fotografía.

Desde ahí empezó a subir de dos a tres fotografías por semana.

Él y su madre tenían un sueño, abrir una cafetería porque a ambos les encantaba cocinar, su madre tenía un recetario lleno de diferentes delicias, pero hasta que se recupere, el recetario quedó guardado... lamentablemente, su madre nunca se recuperó.

Su madre murió antes de que cumpliera 18 años, dos semanas antes exactamente, pero no encontró otro trabajo, estaba tan triste que ya no le daba ganas de levantarse de la cama.

Pero tenía algo porqué seguir, la cafetería qué él y su madre siempre quisieron, algún día la tendría y para eso necesitaba dinero, seguía subiendo fotografías dos a tres veces por semana, ahorraba un 80% y el otro 20% lo utilizaba para comida o pequeños gustos.

Se mudó de casa, a una donde solo podría caber el, una habitación, un baño, una cocina y una sala, se llevó todas sus cosas ahí, hasta ese recetario.

Ahora estaba caminando en el pasillo de los departamentos, tenía que ir a pagar el gas y el agua, no le gustaba salir, mas que todo porque siempre era tan aburrido y monotono.

-Perdón- sin querer empujó a un señor solo por ir caminando rápido por la calle.

-Fíjate por dónde caminas.

-S-sí... lo siento- se dio la vuelta y siguió caminando, siempre fue tan torpe.

Sus ropas que ocultaban con frecuencia su delgada y torneada figura, su cabello algo largo y rizado de un lindo color rosa, sus ojos café claros que ocultaban tantas cosas y sus manos ocultas en los grandes sueteres que siempre llevaba.

No buscaba una pareja, nunca se enamoró, no creía ser lo suficientemente bueno para alguien, el amor daba tanto miedo.

Ya estaba por llegar a donde debía de pagar las cuentas, otra vez no vio por dónde caminaba y llegó a chocar con el brazo de un aparente alfa alto, rubio y con finas ropas, el choque hizo que ambos cayeran al suelo por el desequilibrio.

-¡Lo siento!

-No te preocupes ¿Tú estás bien?- rió un poco, tenía un acento extrangero, seguro era de otro país, pero le ofreció su mano para ayudarlo a pararse.

-Sí, realmente lo lamento- al tocar su mano, era cálida, cómoda y de alguna manera sentía conocerlo aunque nunca en su vida lo había visto.

-No te preocupes, solo fue una caida, ninguna tragedia.

-Sí, lo sé, solo andaba con algo de prisa- no lo miró al rostro, solo se limpió un poco y se dispuso a irse -hasta luego.

-Adiós....

Cami~