IX

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Vivir aquí... contigo.

Sunoo lo pensó por un momento, pero ¿qué había que pensar?

-No sé cómo puedo pagarte- el pelirosa se abalanzó encima del alfa, el cual estaba sentado en el sofá.

Perdieron el equilibrio haciendo caer a Ni-ki hacia atrás quedando Sunoo encima.

Cuando se separaron del corto abrazo, las manos de Ni-ki estaban en la estrecha y formada cintura de Kim, sin moverse de ahí ni un poco.

Sus ojos volvieron a chocar, otra vez, Sunoo sintió esa rara sensación que ponía sus mejillas rojas y su estómago extraño.

-¿Quieres traer tus cosas hoy?- pronunció el alfa.

-S-sí... si es posible..- se arregló el pelo un poco, en un signo inconciente de coqueteo.

-Claro que es posible, ¿quieres que te ayude yo o quieres que contrate una agencia de mudanza?- sonrió ante la mirada contraria, aún en esa posición.

-¿Una agencia de mudanza no es mucho dinero? Yo no ten--

-Yo pagaré todo, no te preocupes por eso, si quieres mientras la agencia de mudanza trabaja vamos a algún lugar a almorzar, dime ¿qué se te antoja?

-Yo quiero llevarte a comer- dijo emocionado, quería poder pagarle de alguna manera. -Digo... ¿Quieres?

-Claro que quiero- aceptaría todo lo qje su omega le dé o invite. -Entonces vamos, llamaré a alguna agencia de mudanzas y todo listo- unas ganas enormes de besar su mejilla se apoderaron de él, pero otra vez, no hizo nada.

-Vamos...- se sentó donde estaba, sin darse cuenta que estaba sentado encima de Nishimura, -Te agradezco tanto que... ¡Hip!- saltó el su lugar, le sio un repentino hipo -Ugh... odio cuando ¡Hip!- otro saltito.

-Ahm...- no sabía qué hacer, nunca había liviado una situación como esa, su pequeño omega estaba con hipo sentado encima de él, justo en esa área peligrosa, sabía que no aguantaría mucho tiempo hasta que su secreto se haga más grande y sea revelado.

Tomó con algo de fuerza las caderas del omega levantándolo y sentándolo en el sillón, colocando un cojín rápidamente encima de ese problemita para no ser descubierto.

-D-deberías ir a tomar agua- habló nervioso y con las orejas rojas. -yo iré al baño un momento ¿si? Después iremos a almorzar.

-Sí.. ¡Hip!- y cuando se paró para ir a tomar un poco de agua vio a Ni-ki corriendo hasta el baño, muy veloz.

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-¿Aquí?- era un lugar nada lujoso a comparacion de los lugares que Ni-ki frecuentaba, donde vendían pollo frito al que Sunoo lo había llevado.

-Sip, te aseguro que es delicioso, vamos- entraron y se sentaron en dos sillas de madera, Sunoo ordenó por ambos ya que Ni-ki no conocía muy bien de eso.

Pidió dos porciones de alitas en barbacoa.

-Se ve bien...- miró los platos que ya estaban llegando -huele bien.

-¿Verdad que si? Vamos, come-de colocó los guantes de plástico para no manchar sus manos y empezó a comer, como un gatito bebé comiendo un pedazo de carne, los soniditos que hacía eran adorables.

Pronto el alfa empezó a comer, se soprendió con el delicioso sabor que tenía, con razón a Sunoo le gustaba tanto.

-Woaahh- y acompañado de las papas era aún más delicioso.

Pasaron menos de 20 minutos donde Ni-ki devoró 8 piezas de pollo hasta solo dejar huesos.

-Que rápido- Sunoo se sorprendió a él le faltaba como la mitad y ya casi estaba lleno -¿quieres más?

La expresión del alfa fue suficiente para revelar la respuesta.

-Toma, yo no podré acabar todo- le dio tres piezas quedándose con una y media, contando la que estaba comiendo.

-¿En verdad no quieres más?

-De querer quiero, pero voy a explotar si sigo comiendo- sonrió.

El alfa solo aceptó la comida y acabó de comer junto al omega.

-Tienes... una manchita- se sacó el guante de plástico de la mano y alcanzando el rostro del omega quitó una manchita de la salsa que tenía el pollo -listo.

De a poco, las mejillas del más pequeño se hicieron rojas.

-Gracias...

-¿Vamos a casa?

-Sipi.

A casa...

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-Pensé que serían más cajas- Ni-ki miraba las cosas de Sunoo en la entrada de su departamento.

-Nah, no tenía muchas cosas tampoco, solo ropa, accesorios, maquillaje y cosas de aseo.

-Te ayudaré a llevar las cajas ¿ya elegiste tu habitación?

-Si, a la primera por favor.

-Claro que si- tomó tres de las 5 cajas y las subió junto a Sunoo quien llevaba dos.

-Aquí está bien, yo acomodaré todo en un momento.

-Bueno, yo iré a descansar un poco ¿si?

-Ahm... Ni-ki... mi amigo me llamó, dice que es algo muy imporgante, ¿será que puedo ir un momento?

-¿Porqué me pides permiso? Claro que puedes ir, ahora vives aquí, solo avísame cuando salgas para que no me preocupe.

-Entonces... de un momento saldré con mi amigo, volveré de unas horas.

-Cuídate, si se hace tarde avísame para recogerte- y entró a su habitación para tirarse en la cama.

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-¡¿Cómo que no sabes que estás en primera plana?!- Jungwon hablaba a Sunoo, estaban en casa del omega pelinegro.

-Es que...

-Mira, claramente eres tú almorzando con Nishimura, y lo más raro es que él aceptó ir a un lugar así, o sea, él tenía sus chefs personales, y tú lo llevaste a un lugar con un giro de 180°.

-Quería compensarlo por dejarme vivir en su casa, sé que le gusta el pollo frito y--

-¡¿Ahora vives con él?!- toda la información llegaba como una bomba.

-Sí...

-¿Cómo pasó? O sea, ¿así de la nada?

-No, es que, un tipo... me estaba siguiendo estos días, él se enteró pero no encontramos lugares seguros con mi presupuesto así que me ofreció uno de los cuartos para que me mude con él... y acepté.

-Ya sé cómo va a terminar esto... quiero ser el padrino de sus hijos.

-¿De qué hablas? Él seguro está comprometido con alguien como muchos hijos de famosas empresas.

-Comprometido o no, es tu destinado, yo lo sé, tu lo sabes... porque ya lo sentiste ¿no es así?

-Ahm...

-Lo sabía... ¡Lo sabía! ¡Soy brujo!- levantó ambas manos -ahora quiero una copa de vino.

-¿Me invitas un poco?

-Pero no te emborraches, no puedo mandarte ebrio con Nishimura, seguro me mata por no cuidarte o algo.

-Nah, soy resistente al alcohol.

























Cami~

NEED - SunKi ♡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora