Capítulo 1

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Mi día había comenzado con el pie izquierdo, mi estúpido vecino de arriba había tenido una fiesta en pleno domingo en la noche y no se había acabado hasta hace una hora.

Qué irritante puede ser la gente que no tiene obligaciones o no le importa nada de la vida.

Iba en el autobús de camino a la universidad, comiéndome una manzana que encontré en mi mesa esta mañana. Necesitaba hacer mis compras del mes, si no moriría de hambre y no quiero estar saliendo a comer comida corrida todos los días.

Luego de unos minutos, bajé del autobús y caminé hacia mi universidad. Una vez dentro de esta, busqué un bote de basura para tirar lo que no me comí de la manzana y después caminé hacia mi casillero.

Hoy las clases iniciaban con la profesora White, ella era una amable señora de cincuenta años que amaba dar clases, así que al menos sería bueno.
Al llegar a mi casillero pude encontrarme a Zoe en el suyo (que está a dos del mío), también tenía una cara de cansancio como la mía y lo entendía.
Zoe Davies, una chica que conozco desde que me mudé a Seattle; vive en el mismo edificio que yo con sus pequeños hermanos Dean y Joe de seis años, ¿cómo sé el nombre de sus hermanos y su edad? Gavin me lo contó gracias a que la mejor amiga de Zoe es su novia, y un día me lo dijeron.
No había tenido una conversación larga con ella en realidad, sólo hemos tenido uno que otro intercambio de miradas y una vez nos encontramos cuando íbamos entrando al edificio.
He de decir que es una chica bastante seria en realidad y...

¿Por qué diablos estoy pensando y hablando de Zoe?

Sacudí mi cabeza alejando esos pensamientos y me enfoqué en sacar los libros que utilizaría para las clases de hoy.

-¡Hey bro!- llegó Gavin justo en el momento en que estaba cerrando mi casillero.

-¡Hey!- chocamos puños y comenzamos a caminar hacia nuestro salón.

-Tienes una cara de muerte- rió y yo bufé.

-Todo es culpa de mis irritantes vecinos-

-No es la primera vez que te escucho quejarte de ellos-

-Y no será la última vez-

[...]

Era la hora del almuerzo y Audrey (la novia de Gavin) decidió almorzar con nosotros hoy y dejar a su mejor amiga comer sola.
No era su culpa, Zoe siempre se la pasa sola.

-Traes la misma cara de cansancio que Zoe- opinó Audrey y yo bufé.

-Fueron sus vecinos los culpables de que estén así- respondió Gavin por mi y yo asentí.

-¿De nuevo los del piso de arriba?- preguntó mostrando algo de sorpresa en su rostro.

-No es novedad que hagan algo que moleste al edificio- le di una mordida a mi sándwich.

-Por cierto, bebé- se dirigió a Gavin- no puedo quedarme contigo después de clases- hizo un puchero.

-¿Por qué?- Gavin frunció el ceño.

Yo solo estaba comiéndome mi sándwich escuchando su conversación.

-Cuidaré a los hermanos de Zoe esta tarde-

-¿Y no los pueden cuidar sus padres?- preguntó Gavin y ella rodó los ojos.

-El tema es complicado y lo sabes, Gavin- lo miró de forma seria y él bufó.

-No sé qué tan serio es porque no me cuentas qué rayos pasa- parece que esto va acabar en una discusión.

Interesante.

-No es de mi incumbencia y tampoco tuya, ni de nadie más, eso ya te lo había dicho y creo que es difícil para ti entenderlo.- se cruzó de brazos- Nos vemos todos los días después de clases y creo que no pasará nada si no estoy contigo hoy-

-Bien- bufó y siguió comiendo de su almuerzo.

Bien, las cosas no terminaron de buena forma.
Era chistoso porque esos dos discutían al menos una vez por semana, digamos que paso demasiado tiempo con los dos y existen veces (como esta) en que los dos me sacaban de la conversación y me ignoraban por completo, así que me ponía a escuchar sus conversaciones y siempre existía algo que disgustaba al otro y terminaban discutiendo, lo que supongo que pasa con todas las parejas...
Yo no sabía porque nunca había tenido una novia, una vez lo intenté en Littleton, pero esa chica jugó con mis sentimientos y decidí dejar el tema del amor a un lado, además no a existido alguien que me importe al punto de que yo quisiera intentar algo, y más ahorita porque no tengo el tiempo para tener alguna relación.

En fin, la hora del almuerzo había acabado, ese par seguía sin hablarse, pero no durará mucho porque los dos no pueden estar sin el otro. Les doy hasta mañana para que se vuelvan hablar, además su pelea fue bastante absurda.

Los tres nos paramos de la mesa en la que estábamos y Audrey fue con la chica de cabello castaño, caminando y desapareciendo de nuestra vista.

-A veces odio que Audrey sea amiga de Zoe- negó con la cabeza mientras caminábamos por los pasillos de la universidad para poder llegar a nuestro salón.

-¿Por qué lo dices?- fruncí el ceño. Sabía que Zoe traía algo y era una de las partes por las que ellos llegaban a discutir.

-No lo sé- se encogió de hombros- siento que le presta más atención a la vida de ella que a mí, digo, sé que es su amiga y deben de pasar tiempo juntas, pero siento que hay algo...-

-¿Algo?-

-Sí, algo que hace que Audrey quiera estar más con ella apoyándola-

-¿No se supone que de eso se trata una amistad?- pregunté sintiéndome confundido, a veces Gavin puede ser un completo idiota.

-Yo... no digo que no, pero esto es un caso extremo...-

-Creo que no te entiendo y estás haciendo que piense que eres un idiota que quiere que su novia pase solo tiempo con él y no con su amiga.- lo miré de forma seria y él agachó la cabeza- No sabes lo que pasa en su amistad y no sabes lo que pasa con... Zoe como para juzgarla de la forma en que lo haces, deja de ser un idiota, que no te vas a morir por no pasar una tarde con tu novia- y sin decir una palabra más entramos al salón de clases.

Y justo cuando iba a caminar hacia mi lugar, me encontré con esos ojos azules mirándome con curiosidad.

I'm Uncomfortable- Ross LynchDonde viven las historias. Descúbrelo ahora