I'm Uncomfortable- Ross Lynch

Capítulo 27

Habían pasado las horas y yo me encontraba en el autobús de camino a ver a Logan.

Luego de la charla de la mañana y el habernos encontrado con nuestros "amigos", decidimos pasar de largo e ignorarlos. Sabíamos que tenían un millón de preguntas y reproches para nosotros, pero eso era algo que no nos importaba.

Zoe se fue a su trabajo prometiéndome que en cuanto saliera correría hacia el edificio en donde vivimos, no quería encontrarse con Chris, además de que quería cuidar de sus hermanos.

Bajé del autobús y comencé a caminar hacia el edificio, el espantoso edificio en donde trabajaba.

-Llegaste justo a tiempo, Lynch- habló Logan una vez que me vio entrar a su despacho.

-Dijiste que me querías a tiempo y aquí estoy-

-Admiro eso de ti- rió.

-¿De qué quieres hablar?- me senté frente de él y soltó un suspiro.

-Como verás... no estoy teniendo suficientes ganancias, Lynch- subió sus pies sobre el escritorio y se recargó en el respaldo de su silla- casi no han salido carreras ni peleas y no puedo estar gastando en los demás-

-¿Qué quieres decir?- fruncí el ceño.

-Que a todos les he bajado el sueldo- tenía que estar bromeando- no puedo hacer recorte de personal porque no quiero hacer trabajo extra, pero sí puedo disminuir su paga-

-Eso me incluye, ¿no?-

-Claro que te incluye, hombre.- rió de una manera exagerada- No te importa, ¿verdad?-

Hasta aquí había llegado mi límite, era un maldito egoísta.

-Claro que me importa, por una mierda Logan- me levanté de mi asiento- no había discutido de esto contigo porque no quería problemas, pero yo no puedo aceptar esto-

-Ganas más que los demás-

-Sabes que eso es mentira, solo tú te lo crees. Literalmente vengo aquí a partirme la espalda, a tragarme tus regaños y tus malos tratos haciendo lo que quieres y ayudándote, para que me pagues de esta forma- negué con la cabeza.

-¿Y qué vas a hacer?- bajó sus piernas del escritorio y me miró expectante.

-Renunciar, así de fácil- sonreí de manera irónica- quedarme aquí o no tener trabajo es lo mismo-

-No puedes irte- pude ver el miedo en sus ojos, sabía que no le convenía que me fuera por la forma en como lo tolero y como trabajo con él, sin mí su estúpido negocio se derrumba.

-Claro que puedo. Soporté mucha basura de tu parte, pero que me salgas con esto ya es mucho- caminé hacia la puerta.

-¡Me estoy quedando sin dinero, joder!- gritó y pegó en su escritorio con los puños.

-No es mi problema- no había necesidad de gritar, sabía que lo haría enojar más.

-¡¿No puedes comprenderlo?!- sus ojos estaban inyectados en sangre y la cara la tenía completamente roja del enojo.

-Cuando no tenías este problema y te pedí un poco de dinero extra me mandaste al carajo, así que no tengo porque comprenderte.- abrí la puerta- Ve el lado bueno de mi renuncia, ya tienes mi miserable sueldo en tus manos para ti solito- y sin decir más salí de su oficina cerrando la puerta, escuchando como rompía las cosas.

Se sentía bien hacer esto.

[...]

Ya era de noche y Zoe me había mandado un mensaje diciéndome que ya había llegado al edificio y que en un par de minutos estaría aquí con sus hermanos.

Es la primera vez que viene aquí desde que comenzamos a hablar.

Rocky se encontraba dándose una ducha, dijo que había tenido un día bastante pesado y que se dedicó a buscar información que nos ayudara.

Justo después de que salí del edificio donde trabajaba con Logan, le llamé a Justin contándole los acontecimientos, el cual muy orgulloso me felicitó por enfrentar a Logan y mandarlo a la mierda, pero de igual forma me dijo que tuviera cuidado y que me estaría informando de cualquier cosa que pase entre él y Lera.

El sonido de unos golpes en la puerta me hicieron salir de mis pensamientos, así que me levanté del sillón en donde estaba sentado y caminé hacia la puerta, y al abrirla me encontré con una Zoe cansada y un par de niños jugando entre ellos.

-¡Hola, Ross!- exclamaron los dos con una sonrisa.

-Hola, pequeños- me hice a un lado- pasen- y no tuve que decirlo dos veces porque los dos entraron corriendo- hola de nuevo, pequeña- besé cortamente sus labios y ella sonrió.

-Hola- entró y cerré la puerta a nuestras espaldas- es la primera vez que vengo a tu departamento y debo decir que es muy bonito-

-Gracias- caminamos hacia la sala y al instante Rocky apareció- Zoe él es Rocky mi hermano mayor, Rocky ella es Zoe mi novia-

-Mucho gusto, Zoe- Rocky estrechó su mano con la de Zoe.

-El gusto es mío- sonrió de manera tímida pareciendo adorable.

-¿Él es tu hermano?- preguntó Dean al ver a Rocky.

-Sí- respondí y miré a Rocky- el que acaba de preguntar es Dean y el que está sentado es Joe, son los hermanos de Zoe-

Joe aún se veía bastante débil en realidad, pero debo decir que se ve mucho mejor que ayer.

-Gusto en conocerlos, niños- Rocky sonrió- yo soy Rocky-

-Bien, niños... ¿Les parece si les muestro mi habitación y escogen una película para verla?- tenía que distraerlos con algo, ellos no podían escuchar la conversación que íbamos a tener.

-¡Sí!- exclamaron con emoción.

-Mientras, ustedes dos pueden ir platicando- bajé mi volumen de voz haciendo referencia al plan.

-Claro- respondió Zoe- niños, si necesitan algo no duden en gritarnos y Joe, en dos horas te toca tomar tu medicina.

-Bien- respondió el último mencionado cruzando sus brazos.

Los tres caminamos hacia mi habitación, que no tenía nada importante en realidad, era muy simple, pero eso sí, tenía una pantalla enorme.

-¿Tienes Netflix?- preguntó Dean y yo asentí- ¿Podemos ver la película que sea?-

-Supongo- lo miré dudoso, no sabía qué películas podían ver en realidad o que Zoe les permitía ver.

-Vamos a ver "Cómo entrenar a tu dragón"- sugirió Joe a su hermano y este asistió con alegría.

Tomé el control de mi pantalla y abrí Netflix, para después seleccionar la película que ellos habían elegido.

-Listo, pequeños- dejé el control en mi mesa de noche- como les dijo su hermana, si necesitan algo no duden en gritarnos que vendremos aquí enseguida-

-¿Podemos taparnos con tus cobijas?- preguntó Dean haciendo un pequeño puchero.

-Claro- sonreí y vi cómo ambos se sumergieron en las cobijas de mi cama.

Adorable.

Después de darles una última mirada, dejé entre abierta la puerta y caminé de nuevo a la sala de estar, donde Rocky y Zoe estaban sumergidos en la platica de su dinero y Lera.

-No te preocupes, Zoe- Rocky se recargó en el sillón- ese par se pudrirá en la cárcel-

-Y no te preocupes por la amenaza que tienen planeada- ahora hablé yo- tengo un plan que nos ayudará-