HoSeok es el sirviente real del príncipe TaeHyung, uno muy particular.
«La desgracia de un ser que desprendía inocencia, la humanidad jamás estará lista para enfrentar la pureza»
➤ ʜᴏsᴇᴏᴋ ʙᴏᴛᴛᴏᴍ
⊗PROHIBIDA LA COPIA DE ESTA OBRA. ASÍ MISMO NO AUTOR...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Pasado
A SeokJin le gustaba jugar con su hermano menor, TaeHyung era muy joven para jugar con las espadas de madera pero parecía divertirse intentándolo, siempre detrás de su hyung y diciendo siempre que lo admiraba demasiado.
Con una sonrisa, SeokJin llevaba a su pequeño hermanito de la mano por el jardín principal del palacio, él cuidaba mucho de TaeHyung, su madre antes de subir al cielo le encomendó la tarea de proteger a su hermano a toda costa. Hoy día, con TaeHyung de seis años y él de doce, les gustaba caminar juntos para mirar las flores y el estanque cristalino del palacio.
—TaeHyungnie, no toques eso.—Regañó SeokJin cuando su hermano intentó tocar el capullo de una mariposa.
TaeHyung arrugó su entrecejo y miró hacia arriba donde su hermano.—¿Por qué?
—No debes molestarla o no querrá salir de ahí.
Esta vez el rostro del pequeño TaeHyung se puso confuso.—¿Quién?
—La mariposa.
TaeHyung abrió su boca en grande y sus cejas también se alzaron con sorpresa, dio un paso atrás y comenzó a jalar la mano de su hermano.
—Hay que irnos entonces.
SeokJin sonrió y asintió mientras caminaba para alejarse del árbol donde encontrar el capullo. Los sirvientes observaban con dulzura hacia los hermanos quienes parecían divertirse estando juntos, el príncipe SeokJin siempre cuidaba muy bien de sus dos hermanos menores a pesar de que casi siempre tenía el tiempo ocupado por su aprendizaje al ser el heredero a la corona.
—Quiero ver a Namie.—Había dicho TaeHyung una vez que entraron al palacio.
Las mejillas de SeokJin se pusieron rojizas y giró su cabeza.—¿Pa-para qué?
TaeHyung comenzó a dar saltitos sin soltar la mano de su hermano.—¡Quiero que me lea un cuento!
SeokJin sonrió enternecido.—Está bien pero tendremos que esperar un poco más, recuerda que NamJoonie está en sus clases de piano en estos momentos.
—¡Eeeeh! el piano es aburrido.
SeokJin prefirió no responder.—¿Quieres ir a la cocina? podemos pedir galletas para merendar.
—Oh, príncipe SeokJin, vayan a su habitación y enseguida llevaré lo que desean.—Habló el sirviente tras ellos quien se encargaba de cuidar y complacer a los príncipes.
SeokJin negó con su cabeza y sonrió.—A TaeTae le gusta ir a la cocina, la señorita Jung siempre le da algo especial.
TaeHyung asintió y saltó en su lugar.—¡Vamos, vamos!
