HoSeok es el sirviente real del príncipe TaeHyung, uno muy particular.
«La desgracia de un ser que desprendía inocencia, la humanidad jamás estará lista para enfrentar la pureza»
➤ ʜᴏsᴇᴏᴋ ʙᴏᴛᴛᴏᴍ
⊗PROHIBIDA LA COPIA DE ESTA OBRA. ASÍ MISMO NO AUTOR...
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TaeHyung fue bendecido con habilidades increíbles para muchos, lamentablemente no fueron las suficientes para percatarse de que algo no andaba bien aquel día en que fue con todo un ejército para enfrentarse contra supuestos rebeldes.
Al llegar al lugar destinado, TaeHyung solo pudo observar la total soledad en aquel sitio, no había nada extraño sobre el lugar.
—Lamento esto, príncipe TaeHyung, pero tenemos órdenes del rey SeokJin.
El peligris frunció el entrecejo y miró hacia atrás donde sus caballeros quienes ya se encontraban bajando todos de sus caballos empuñando sus espada, TaeHyung sujetó el caballo con fuerza, escapar no era opción, tenía que regresar con HoSeok y sacarlo del palacio lo antes posible.
—Me juraron lealtad en mi nombramiento.—Dijo TaeHyung, bajando del caballo y manteniendo una expresión sombría en su rostro.
—Lo hicimos.—Habló uno de los caballeros.—Así como también lo hicimos al rey SeokJin.
TaeHyung apretó los dientes, sacando su espada para sujetarla con fuerza y dirigir el filo hacia los caballeros.
—Malditos traidores.—Susurró el príncipe con amargura.
—No vamos a matarlo, príncipe TaeHyung.—El mencionado abrió su boca, incrédulo ante lo dicho por uno de los caballeros.—Pero tenemos que hacer que se vaya, lejos, muy lejos de su hermano, nuestro rey.
TaeHyung bufó.—Nadie puede sacarme de mi reino a menos que sea muerto.
—Será un gusto.—Habló otro de los caballeros, manteniendo una sonrisa sombría y extendiendo su espada.
—Detente ahí, nadie dañará al príncipe TaeHyung.
—¿Y por qué no? Son órdenes del rey.
TaeHyung sintió cólera, su hermano mayor lo quería muerto. Maldito infeliz.
—No dañaremos al príncipe TaeHyung. Es la última palabra.
—¿Y quién te nombró como nuestro nuevo capitán, SeungMin?—Algunos estuvieron de acuerdo.—Nosotros sabemos quién es nuestro rey.
SeungMin hizo una mueca.—No dejaré que maten a mi príncipe.
Y TaeHyung recuerda la manera en que sus caballeros se dividieron entre aquellos que deseaban matarlo y otros que estaban reacios a protegerlo, también tiene presente la manera en la que todos pelearon a muerte, pero no fue suficiente. Tan solo tiene conciencia de haber caído al suelo con la sangre corriendo por su rostro y el intenso dolor que sentía sobre su espalda, miraba hacia aquellos infieles celebrando y alejándose sobre sus caballos, TaeHyung decidió cerrar los ojos cuando sus párpados se sintieron demasiado pesados.