Un pequeño gran alfa [Y.M] [✓]

15

Jimin dormía tranquilamente en su cama hasta que sintió un toque en su mejilla, al abrir los ojos se dio cuenta de que era Yoongi quien lo miraba, Jimin se sentó en su cama y se hizo aún lado y palmeo la cama para que se acostara a su lado. El omega estaba confundido Yoongi dormía en otra habitación porque se sentía incómodo con alguien más, Yoongi se acostó en sus piernas.

—Gigi. —dijo Jimin mientras le acariciaba el cabello. —¿Qué ocurre?

Yoongi se levantó y besó los labios del omega el cual cerró los ojos para disfrutar del sabor de los labios de su alfa, Jimin se atrevió a subirse sobre el alfa y seguir con el beso un poco más subido de tono. Yoongi se alejó y se ocultó en el cuello del omega, el cual sonrió mientras le daba pequeños besos en su rostro, Jimin había notado un poco extraño a Yoongi, pero no lo iba a presionar para que le dijera.

—Ten...go mie...do. —murmuró el alfa.

—¿De qué amor? —preguntó Jimin.

—De que se bur...len de mí. —hablo.

—Nadie lo hará. —lo abrazo el omega. —a menos que quieran perder su carrera y empleó.

—¿Eso es bueno? —le dijo Yoongi curioso.

—No lo es. —le acarició el cabello. —pero no voy a permitir que te vuelvan a lastimar nunca más.

Yoongi asintió y Jimin se volvió a sentar en su cama para tomar la mano del alfa y cantarle de manera suave, Yoongi iba cerrando los ojos hasta que se durmió, Jimin sonrió y se acostó al lado del alfa. Al amanecer cada uno hizo su rutina, Jimin le ayudaba a su alfa a ponerse la corbata y le daba palabras de aliento.

—Te ves como todo un empresario. —sonrió Jimin. —uno muy sexy.

Yoongi sonrió y ambos se dirigieron a desayunar, Yoongi comía con mucho cuidado, pues no quería manchar su traje. Jimin lo miraba feliz, le alegraba mucho que Yoongi comenzará a independizarse por sí solo, aún recordaba cómo le daba miedo salir de la habitación o se ponía a llorar provocando fuertes ataques.

—Estarás en mi oficina conmigo. —hablo Jimin. —ya ordené que pusieran un escritorio para ti.

—¿Qué haré? —le pregunto mientras se limpia la boca con mucho cuidado.

—Me ayudarás a ordenar unos papeles. —respondió el omega. —es algo sencillo.

—Gracias por dejarme trabajar. —hablo. —y haré lo mejor que pueda.