46

15.1K 2.2K 130
                                    

Al amanecer Yoongi se lavaba los dientes mientras reía al ver al omega bañarse tranquilo, Jimin había sentido un ardor en todos su cuello y se dirigió al espejo donde estaba su alfa el cual huyó rápidamente. Jimin se sorprendió al ver un collar de chupones en todo su cuello los tocó y se giró al escuchar un ruido en la habitación, el alfa se quería esconder en el armario por lo cual había votado toda la ropa.

—Yoonnie. —le dijo Jimin. —¿A qué se debe tu collar de marquitas?

—Alfas feas ver mucho a pollito. —se cruzó de brazos. —pollito ser de gatito Min.

—Así que el gatito Min lo hizo porque está celoso. —lo tomo de las mejillas. —entonces pollito debe de hacer lo mismo.

—¿Pollito dejará mariquitas a gatito? —le pregunto.

—Solo si gatito quiere. —hablo Jimin.

Yoongi lo pensó por un largo momento hasta que asintió, Jimin sonrió y se acercó al cuello de su alfa donde dejó unos cuantos besos de amor y luego hizo su pequeña mariquita de amor, el alfa sonrió al ver la marquita roja que a las pocas personas que conocía y le agradaban un poco se las mostraba feliz y orgulloso también decía que su omega tenía marquitas de amor.

Jimin preparaba una pequeña maleta para entregar a Yoongi a sus detestables padres, él miró la mochila y le puso un micrófono algo ilegal, pero con ello se iba a reunir más pruebas, cuando llegaron al lugar había un policía junto con los padres del alfa. Yoongi miro a Jimin y este le dio un beso en la frente mientras le susurraba cuánto lo amaba, el alfa miró a la «familia» pero no dijo nada.

—Este viernes Yoongi tiene cita con el psicólogo Choi. —hablo Jimin. —por si lo van a llevar aunque lo dudo.

—Lo que Yoongi necesita no es tu asunto. —dijo el alfa. —la opinión pública está con nosotros, no contigo.

—Por esta vez dejaré que se rían todo lo que quieran. —hablo Jimin. —pero recuerde el que ríe de último ríe mejor.

—Ganaremos. —mencionó la omega.

—Es una pena que me quieran como su enemigo. —dijo Jimin. —pero me encargaré de dejarlos en la calle ya hice que ninguna empresa quiera comprar sus acciones.

—Así que fuiste tú. —habló el alfa.

—Soy joven y tengo dinero de sobra. —se encogió de hombros. —recuerden que al alejar a Yoongi de mí, perderán una gran fortuna.

—Sabemos que le diste una tarjeta negra a Yoongi. —lo vieron.

—La cual mientras esté con ustedes estará cancelada. —miro al otro alfa. —no quiero que mi dinero sea gastado por asquerosos gusanos como lo son ustedes.

Un pequeño gran alfa [Y.M] [✓]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora