Capítulo 11: ¿Gerard? ¡Gerard!

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-Ge-gerard ¿Qué-qué haces aquí?- Balbuceé cuando dejó caer el piercing en mi mano, tenía un poco de sangre.- Es- es tarde...

-Lo sé, Frank.- Me miró a los ojos, me sonrojé demasiado.- Pero después de que te llevaron lo vi tirado y fui a recogerlo.

-¿Por-por qué?- "Basta, Frank Iero, sólo recoge el maldito piercing y aléjate de ahí" Decía mi conciencia pero mi corazón estaba por aplastarla en un momento de locura.

-Es que... me gustas.- Gerard me sonrió y sus labios curvados me mataron. Pero todo eso fue lo que dijo en mi cabeza, lo que en verdad dijo fue: Tenía que hacerlo ¿No?

Me dio esos golpecitos de amigo en el brazo y volvió al hotel dejándome con cara de imbécil parado, mirando el sol poniéndose entre las abetos. Un paisaje hermoso sin duda pero no tanto como los ojos de Gerard cuando sonreía, me llenaba de una alegría sin igual que me hacía sonreír como un imbécil.

Perdí la realidad por un momento, sentí los labios de Gerard sobre los míos dándome mi emocionante primer beso, algo para recordar. Lástima que todo fue una ilusión. Jamia me dio un puñete en la cara que me dejó noqueado sobre el piso.

-¡Au! ¡No me hagas eso!- Dije incorporándome del piso.

-¿Otra vez fantaseando con Gerard, Iero?- Dijo ella burlonamente pero abruptamente cambió su expresión por una más dura.- Me dejaste sola en la cafetería.

-Lo siento fue sin querer.

-¡Todos me miraban como la chica amiga del loco que se había ido!

-¡Hey!- Dijo molesto pero ella rió, había caído en su trampa. Me dio un golpe al igual que Gerard e ingresamos al hotel. Estaba más calentito que afuera, Gerard no estaba por ningún lado así que desistí en buscarlo. Jamia me llevo hasta el spa para tomarnos un masaje relajante, no entré por supuesto y me quedé esperándole afuera como un tonto mientras las demás chicas me veían y se burlaban por lo bajo, ilusas.

Miré el celular, debía haber algo bueno ahí que me permitiera recrearme mientras Jamia se daba una buena sesión de relajación. Sólo había juegos de hace 4 años (ni siquiera la serpiente), empecé a ver las fotos que guardaba en una carpeta y ahí... Oh Dios, todo los malditos años anteriores había sido un Stalker; fotos de Gerard por aquí y por allá mientras estaba en el baño, cuando almorzaba con sus amigos, cuando salía de las prácticas de natación, cuando bajaba del bus, cuando lo encontraba en la escuela. Sonreí a la pantalla sin darme cuenta que alguien se ponía a mi lado.

-¿Y qué vez, enano?- Miró atónito al lado, Gerard intentaba mirar su foto borrosa cuando estaba detrás de uno de los árboles de la escuela. Rayos, Frank, rayos.

-Eh, NADA, NADA IMPORTANTE.- Dije como si las palabras salieran por sí solas de mi boca.- Gerard, deja de meterte en lo que no te importa.

Mala idea...

-¿Así que soy yo el que debe de dejar de meter su culo en todo?- Dijo y me arrinconó contra la pared listo para darme una golpiza, bajé la miraba medio sonrojado medio con miedo no había entendido la pregunta y al ver mi cara dudosa, se fue dándome un empujón. Las chicas que estaban al lado se quedaron con la boca abierta.

"Así es, perras" Dije para mis adentros con una mirada triunfal sobre ellas "Gerard Way me ha hablado."

Después de una hora Jamia salió totalmente renovada, estaba más relajada; benditos masajes de hotel. Fuimos al comedor, esta noche era el buffet pero mi hambre se había ido por las extrañas palabras pronunciadas por Gerard. ¿Qué era eso de que me andaba metiendo en todo? ¿Acaso creía que lo acosaba? ¿Había visto las fotos?

...

¡Puta madre, estaba muerto!

Mi nerviosismo era demasiado notorio, encima me temblaba el plato y el pollo al curry se estropearía si daba un paso en falso, malditos nervios por Gerard Way. Me senté en la mesa mientras Jamia seguía buscando una y mil cosas que picar del buffet. Busqué a Gerard con la mirada pero no apareció por ningún lado hasta que llegó al lado de Lynz, los dos sonrientes. Me destrozó el corazón pero era obvio que la prefería antes que a mí, un simple chico marginado.

-¿Estás bien?- Dijo Jamia sentándose a mi lado, vio el punto justo donde yo miraba.- Oh, ya veo...

-No, está bien, no me importa.- Dije tomando un poco de la soda que me había servido.- Es su vida y no puedo cambiar nada.

-Ay, Frank...- Rodeó los ojos. A veces era insoportable: primero me decía que Gerard era un bueno chico, después que era un odioso psicópata y luego de que por qué no peleo por él. Ay, Jamia.

Comimos en silencio, yo vigilando a Gerard que tragaba toda la comida con sus amigos y Lynz, algunas chicas de por medio. Después de unos minutos salieron del hotel. Irían a pasear por los alrededores en esa hermosa noche invernal. Jamia terminó su plato y me llevó a mi habitación, nos quedamos ahí, mirándonos, sonriendo y haciendo gestos raros con nuestras caras. Terminamos viendo una película, creo que era Rocky pero no estaba tan seguro, el sueño me vencía y poco a poco cerré los ojos para descansar sobre la suave cama.

***

Desperté entre las sábanas, parecía que Jamia se había marchado hace mucho, solo me quedaba. Me abrigué lo mejor que pude ya que no sabía que hora era y menos con el frío helándome los pies, volteé para sentirme mejor cuando me choco con un cuerpo. ¿Jamia? No, ella no era de quedarse dormida a mi lado, no cuando tenía un cuarto. ¿Qui-quién....? Palpé el cuerpo, un torso cubierto por una chaqueta de cuero; raro, el único que tenía chaqueta de cuero era... ¡Gerard!

-¡Aah!-Grité y el chico que estaba al lado saltó de la cama junto conmigo y nos gritamos en la oscuridad.

-¡Frank!-Gritó él y me agarró de los brazos, calmándonos.- Ay, Dios, perdona.

-¡¿QUE-QUÉ HACES EN MI CUARTO?!

-Bert me echó, larga historia. Algún día te contaré.- Sonrió y volvió a echarse en MI CAMA.- ¿No te importa si me quedo esta noche contigo?

-No-no, está bien.- Dije acostándome a su lado, no le di la cara, iba a ser tan raro. ¿Cómo podía siquiera dirigirme la palabra después de lo que me había dicho? "Bipolaridad". Se quedó dormido y yo también aunque no concilié el sueño hasta eso de las 4 de la mañana por miedo a que no fuera más que una simple broma o una alucinación causada por el pollo al curry.

Summertime (Frerard)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora