Las crónicas de una sayajin

Capítulo 37

Las días de prueba habían pasado. Ya todos nos preparábamos para comenzar con la misión. Mañana partiríamos al objetivo.

Akatsuki..

Me intrigaba mucho, como había pensando antes, ellos no podían hacer movimientos en falso sabiendo que konoha y Ryu eran aliados junto a Suna, deberían saber que esos tres tenían poder militar de sobra y aún así atacaron  a gaara. ¿Acaso no le tenían miedo? O tenía el poder suficiente para hacerle frente.... Era muy misterioso.

Habíamos terminado el entrenamiento ya muy tarde. Venía caminando para llegar a mi departamento. Cuando me pare frente a mi edificio y miré la luz prendida de esa ventana, anko estaba en la aldea y no lo sabia.

De un salto llegue al pasillo quedando enfrente de su puerta, alce mi mano dispuesta a tocar la puerta.

¿Y si no quiere verme?, Me giré dispuesta a irme, pero quería arreglar las cosas con ella. Así que me volví a girar para tocar la puerta...

-Ah, eres tú. - escuché y me sorprendí.

-¿Desde cuándo estás ahí? -pregunte avergonzada, sentía mi cara arder.

Ella me miró fijamente y me apresure a decir alguna mentira, pero era mala haciéndolo así que recurrir decirle alguna excusa de Kakashi.

-Yo...yo solo pasaba por aquí. -dije tartamudeando un poco. Su mirada nuevamente se posó en mi achicando sus ojos. -Se me voló una moneda.. y la estoy buscando.

-Kaede. Las monedas no se vuelan. -dijo y mi cara volvió a ponerse roja.

Tonto Kakashi, si tal solo me hubiera enseñado a decir excusas.

-Solo quería hablar contigo..Disculparme principalmente. -murmure agachando mi mirada, sentía vergüenza en ese momento. -Pero si te molesta, podemos hablarlo otro día.

-Quiza debes pasar, ya hace fresco y puedes enfermarte. Aunque no sé si puedes hacerlo. -me dijo y sonreí un poco, pasando y ella cerrando la puerta tras mis espaldas.

Su habitación estaba pulcra y no me sorprendía ella era muy obsesiva con la limpieza y el orden. Tenía dos sofás de color verde oscuro que le acompañaba una alfombra gris con una bonita mesa de noche y en este había algunos libros y clarame te no había ni una mancha de polvo. Ella tenía un pijama de pants blancos y una camisa azul con en logo de konoha.

-¿Y bien? -pregunto obligándome a verle. Ella era ligeramente más alta que yo y alce un poco la vista.

-Hmm, ¿Como haz estado? Pregunté y ella ladeó sus ojos un poco, era claramente la pregunta que no quería escuchar.

-Como siempre. -fue su respuesta corta.

Esto era realmente incómodo. La mire y tenía leves cicatrices en sus brazos, que los tapaba su camisa, tambien tenía algunos vendajes en su brazo derecho y le miré el rostro nuevamente.

-Realmente haz crecido mucho. -fue lo que dijo.

Sabía que debia ser yo la que tenía que comenzar a hablar.

-Anko... Lo lamento, yo sé que no querías que siguiera con el tema de Sasuke, no querías que me pasará nada malo que orochimaru pueda matarme. Y aún así yo sigo con la idea de traerlo de vuelta, el y yo tenemos que descubrir quién es realmente Itachi Uchiha y no cambiare de opinión. -me solté, le dije lo que realmente sentía y que no podía cambiar lo que me había propuesto, debía traerlo de vuelta.

-Lo se. Se que fuiste a entrenar a tu aldea, se que no haz cambiado tu convención. Kakashi me dijo que debía dejar de mantenerte a salvo. Y por eso decide ser voluntaria para seguir a orochimaru, decide verlo por mis propios ojos y entender que tú eres lo suficientemente fuerte para detenerlo. Al seguirle me di cuenta que no debía intentar cambiarte más bien creer en ti. -hablo con mucha sinceridad, no sé si les había pasado antes, pero cuando tienes una amistad sincera con otra persona a veces simplemente se ha la desde el corazón y para mí era una de esas veces.

Tuvimos una charla para ponernos al corriente del tiempo que no nos habíamos visto. Teníamos cosas que contarnos, la noche paso al punto que nos dimos cuenta que en unas horas iba amanecer. Me quedé en su departamento.

Estaba acostada en el sillón, a punto de cerrar mis ojos, quedándome dormida al instante.

(***)

¡ESTO ERA MALO!

NO, NO,NO, ERA HORRIBLEMENTE MALO...

ME VA A MATAR. NO. ME IBA DESCUARTIZAR Y TIRAR MIS RESTROS POR ALGUN RIO.

Iba una hora retrasada, Tenzo iba a matarme, me amarre el pelo como pude y agarre mi banda ninja empezando a salir por la ventana.

Me había desvelado y me quedé dormida, cuando me di cuenta ya tenía un gran retraso, salí lo más rápido que pude a mi departamento para bañarme y ponerme ropa nueva. Claramente no iba ir sin cambiarme los calzones, Naruto haría eso pero yo no soy el.

Emprendí el vuelo, acelerando al máximo para llegar a la entrada de Konoha, ya había olido el peligro mis manos sudaban cuando aterricé, la mirada de enojo de Sakura y Naruto me estaba perforando, sias miradas matarán yo estaría muerta en este instante.

-Sabia que Kakashi era tu maestro, pero no sabía que te habia enseñado la impuntualidad.. -me miro directo a los ojos y solo puede sonreír nerviosa. -Pero como vienes bien descansada de regresada vas a traer los equipajes de todos y sin volar.

Mi cara era un poema.. pero bueno no iba quejarme, debía cuestionarme si realmente Kakashi me había enseñando su impuntualidad.

En cuanto llegue también nos fuimos, íbamos una formación base, yo en el cielo y los demás iba en una formación lineal, Naruto iba a la cabeza ya que podía reaccionar más rápido a cualquier ataque, sai iba en medio por algún ataque de media distancia y por último Sakura y Tenzo que eran la defensa de la línea y también el apoyo de esta. 

Por los cielos me di cuenta que estábamos entrando a territorio enemigo, Tsunade nos había msotrado un mapa de una zona muerta que debíamos cruzar, se le llama así por el hecho de que nadie gobierna o vive ahí pero que podría ser ocupado por ninjas de otogakure. Adueñarnos de esa zona era fundamental, para que no pudieran comunicar con Orochimaru y así el espía pudiera salir sin que nadie se diera cuenta.

Y como la Hokage nos había dicho, había varios ninjas, empecé a decender para avisar.

En cuanto baje, ellos se pararon y me gire para hablar, saque el mapa para empezar a señalar. -La zona muerta está ocupada por ninjas de otogakure, a simple vista ví a diez, pero pueden haber más. -explique marcando los puntos, Tenzo miraba y estaba serio.

-Naruto y sai, conmigo. Nosotros llamaremos la atención del enemigo hacer que vayan al frente. Kaede y Sakura van escabullirse para encerrar al enemigo y corralarlos. Y también para que nadie se comunique con Orochimaru.

Detrás de esa zona estaba la entrada al puente donde el espía nos darían información. No debía haber errores por eso estudiamos el plan.

Tomé a Sakura diciendo que se agarrara fuerte y empeze a volar bajando mi prensencia al mínimo sakura me imitó, bajamos a la parte trasera empezando acorrolar a los ninjas, no era ni necesario usar mi ki, puro taijutsu fue necesario, mientras Sakura abatía a los demás, me fijé que uno empezaba huir y solo me basto moverme rápido para estar enfrente de el y darle un buen puñetazo en la cara.

-Ya saben el plan, apartir de ahora no debe haber fallas. - dijo Tenzo y todos asentimos.

Dije que no iba a ver fallas pero no siempre sale perfecto aunque se estudie un plan.