Taehyung y Jimin miraban al peliblanco, ambos de brazos cruzados intentando no juzgar al muchacho, pero sin poder evitarlo, claramente era mayor que su Jungkookie, temían que estuviera aprovechándose del chico.— Entonces, ¿Qué pretendes con nuestro querido Gukie, señor Min Yoongi?
El peliblanco golpeó con fuerza la bola de minigolf y esta salió disparada directo a la pequeña bandera que indicaba el hoyo.
— Sé que como su familia tienen el deber de investigarme e intimidarme, pero —Yoongi se dio la vuelta y los miró de arriba hacia abajo —, no me importa, amo a Jungkook lo suficiente para estar aquí frente a su escrutinio.
— ¿A qué te dedicas?
— Soy pianista
— Mentira, si lo fueras no podrías vivir como vives, y comprarle esas cosas caras a Jungkook, dinos la verdad ¿Estás aquí para jugar con él? ¿Quieres quitar su virginidad o algo así?
El rostro del peliblanco se distorsionó por la ira, y apuntó con el palo de golf a la cabeza de ambos.
— ¿Cómo mierda se les ocurre pensar una brutalidad así? Jungkook es un ser inocente, un buen chico. ¿Por qué piensan que vengo a romperlo o humillarlo?... no es de su incumbencia mi sexualidad con él, pero quiero que quede claro que JAMÁS le haría daño, respeto cada decisión que toma y cuido cada parte de él, si tengo que cuidar su virginidad hasta luego de casarnos, lo voy a hacer
El rubio y el pelirrojo se miraron para luego cruzar miradas con Yoongi. Y los tres explotaron en risas mientras veían el hombro del peliblanco temblar.
— ¿Nos trajiste al minigolf solo para poder hacer esa amenaza de forma disimulada?
— ¿Funcionó?
— Mierda, casi me hago de miedo, hasta que te vi contener la risa... nos caes bien Yoongi
— ¿Solo bien?
Jimin levantó una ceja mientras tomaba el palo de minigolf que el pianista sostenía frente a ellos, solo que algo más abajo que antes.
— No abuses de nuestra cordialidad...
— ¡Legué! ¡Traje helado! —Gritó la voz del pelinegro mientras corría con cuatro cucuruchos con cuatro pequeñas bolas de diferente color cada uno.
— Shooting Star para ti cariño, fresa para Tae, de almendras para Chimmy y chocolate para mi
Dijo mientras entregaba a cada uno lo suyo. Yoongi sonrió, y sin poder evitarlo, tomó a su pequeño entre los brazos y lamió su helado.
— No es justo Suga, tú tienes tu helado ¿Por qué tomas del mío?
Dijo con un pequeño puchero viendo como la mitad de su helado ha desaparecido luego de haber sido lamido. Yoongi dio un pequeño y casto beso sobre estos para intentar sacarle una sonrisa.
— Ya bebé, lo siento. Puedes tener del mío ¿Quieres?
Jungkook le sacó la lengua, y aprovechó para lamer el helado de Yoongi, los cuatro rieron por esto y siguieron caminando para alcanzar las pelotas que habían lanzado.
Mientras caminaban y comían, un graznido violento rompió su linda tarde, una cosa blanca cayó del cielo y de repente el helado que llevaba Yoongi en la mano, desapareció, para ser tragado de un solo bocado por el ave ladrona.
—¡Mi helado! Te has llevado mi helado ladrona
Gritó Yoongi mientras perseguía al ave, Jungkook se sumó en medio de las risas de su novio y los dos corrieron hasta caer por el cansancio. El peliblanco lo abrazó y besó su frente mientras acariciaba su rostro.
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Falling Again
RomanceEl prometido de Jungkook fallece en circunstancias extrañas, Jungkook, se mudará a la casa que se suponía iban a compartir, alejándose de todos, hundiéndose en un espiral depresivo, de drogas y alcohol. Tae y Jimin, preocupados ya, deciden que es ti...