Morrigan.

25. Después de todo las pesadillas se pueden volver realidad.

Leslie.

Cuando despertó la agente del FBI sentía un gran dolor de cabeza y del brazo. Se sorprendió al ver vendad la herida que le había provocado el gran perro. Estaba segura que ahora estaba en el sótano frio de la casa que se encontraba en la granja de los Zor El.

Cuando sus ojos se aclararon supo que estaba equivocada, estaba dentro de una reja de alguna comisaría. Una mujer pelirroja alta se acercó, sonriente. -¿Así que agente se dedica a molestar a los inocentes habitantes de este pueblo?- preguntó con un rico acento Gothamita.

-No sé qué le dijo Luthor, pero es mentira, ella debe ser encerrada aquí- respondió adolorida, sentía que la herida le estaba punzando, tendría que ir al médico que se la revisara.

La mujer se quitó el sombrero vaquero, sonrió de manera petulante. -Conozco de los de tu tipo, entrometiéndose en casos que no eran suyos. Soy la sheriff Barbara Gordon, soy una vieja amiga de la doctora Danvers- explicó, Leslie suspiro.

Barbará Gordon era la nueva sheriff de Smallville, después de la muerte del Sheriff Winn Schott ella fue propuesta. Viene de familia de policías, su padre James Gordon un detective, ahora como sargento y jefe del departamento de policía de Gotham.

-No entiende, ella es un peligro, junto a su esposa la psicópata- sí no había hecho entrar en razón a los Kent, lo haría con esta mujer, tener a la policía de Smallville le ayudaría, así atraparía a aquellas dos asesinas que ahora Vivian en aquel pueblito.

-Lo lamento agente Willis, pero creó que Kara fue muy dulce en curarle esa fea herida mientras usted estaba inconsciente. Además, la doctora Luthor la trajo aquí, porque usted traspaso propiedad privada y estaba en su derecho de atacarla- se acomodó el cinturón.

-No entiende. Lena Luthor es la asesina Luthesa y seguramente con los conocimientos de la doctora Danvers ahora son imparables- dijo desesperada, haciéndola parecer una loca ante la mujer pelirroja.

-¿Sabe? También recibí una queja de los Kent. Así que tendré que decirle que debe alejarse de ellos y de la familia Luthor/Danvers. Aquí no creemos en sus tonterías y tuve que verme en la necesidad de reportarla- sacó las llaves de la celda donde estaba Leslie.

-Lo qué todos sabemos que usted entro en propiedad privada, donde habitan tres niños, una mujer embarazada con su esposa. Así qué todo lo que dice la hace ver una loca. Vuelvo a verla a unos metros de aquella linda familia y me encargaré de encerrarla aquí de por vida- comentó enojada la mujer. Dejando salir a la agente.

-Debería largarse de nuestro pueblo- amenazó antes de volver a su oficina, Leslie apretó los puños fuertemente, ella encontraría la manera de atrapar aquellas dos mujeres y todos los que creyeron que mentía se tragarían sus palabras.

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--¿Eres estúpida o qué te pasa?- escuchó gritar ante el teléfono a su mejor amiga Gayle, se había enterado de su arresto, Alex había recibido la llamada de queja de la sheriff Gordon.

-No, sólo quería estar cerca, para escuchar bien por los micrófonos que implante en la casa de los Luthor Danvers- se excusó Leslie, ella presentía que en cualquier momento las dos mujeres saldrían por una nueva víctima.

-Eres muy impulsiva. Sí esas dos nos son lo que esperas acabarán con tu maldita carrera, si no lo hace ahora Alex- le regañó nuevamente -Entiende Leslie, Kara tiene siete meses de embarazo, aunque fueran lo que dices no saldrán ahora, porque tiene un embarazo muy avanzado, te recuerdo que para esa época mi esposa fue rezagada a trabajo de escritorio-