#27: Una verdad demasiado cerca

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NARRA CIHANGIR

—¿Qué vas a cocinar? —dije poniéndome al lado de ella con Doruk.

—No lo sé aún, estoy viendo que hay pero creo que vamos a tener que ir al mercado.

—Vamos.

—Iré a cambiarme.

—Prepararé las cosas de Doruk. —dije sin dejarla pasar mirando su pecho.

—Deja de mirarme así y déjame pasar. —ordenó y obedecí.

No pude dejar de mirarla mientras se iva.

—Tu mamá volverá a ser mía, mi esposa, no te preocupes hijo. La volveré loca por mí. —le dije a Doruk y comencé a preparar sus cosas.

NARRA OLCAY

Me puse una pollera parecida a la que usé en mi primera vez con Cihangir, algo suelta color negra y un top rojo.

Quiero esquivarlo, aunque sé que no puedo.

Le envío un mensaje a Akasma para que me dé algún consejo.

—Olcay, no lo esquives. Los dos se aman, déjate llevar. —respondió Akasma.

Nos subimos al auto y Doruk se quedó dormido en su silla.

—¿Te pusiste esa pollera a propósito? —dijo Cihangir mientras manejaba.

—No es la misma. —burlándome.

—Si quieres pon música y súbete encima mío. —dijo Cihangir y me guiña el ojo.

—Estás loco. —dije seria, pero por dentro me moría por hacerlo.

Ví que me miró de reojo y miré por la ventana.

Terminamos de comprar las cosas que nos hacían falta y nos volvimos a casa.

—Iré a acostar a Doruk. —dijo y asiento.

Puse música y comencé a cocinar, al rato llega Cihangir y se pone a cocinar conmigo.

Comenzó a coquetear acercándose a mí.

—¿Qué intentas hacer? —dije enojada.

—Quiero probar la carne. —dijo y sonrió.

—Ya está todo, sólo falta la ensalada. —dije limpiando mis manos.

Me agarró del brazo y me acercó a él.

Esta vez no me le voy a quejar, que haga lo que quiera conmigo.

—¡Qué rico hueles! —dijo olfateando mi cuello.

—Si, a comida. Tengo que ir a bañarme. —dije nerviosa.

—No, no te vayas sola. Si quieres vamos juntos. —dijo apoyando su cara en la mía.

—No.

—Tu boca dice que no, pero tu mente dice que sí. No me esquives más. Te mueres por mí y yo por ti. —dijo agarrando mi rostro.

Comenzó a besarme el cuello y me subió arriba de la mesada.

Me subió un poco el top y yo me abrí de piernas.
Comenzó a besarme el pecho y la panza.
Le desprendí el cinturón y el pantalón, me acarició suavemente el cuerpo y me miró a los ojos con una mirada que hace que me vuelva loca por él.
Me sacó la pollera y la tiró al suelo. Me alzó y me llevó a la habitación.
Nos sacamos la ropa y excitado fue hacía abajo.

—Tengo que hacerlo. —susurró y asiento.

Comenzó a besar mi parte haciéndome gemir.

¡Me encanta!

Bir Şans Daha (Otra Oportunidad) 1&2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora