Bir Şans Daha (Otra Oportunidad) 1&2

#49: Velorio, venganza, peleas

NARRA VOLKAN

—Señor Volkan, ¿Sintió algo extraño en la señorita Olcay? —me pregunta uno de los policías y niego con la cabeza.

—Estaba feliz. Parecía que se estaba despidiendo de todos. —respondo recordando su hermosa sonrisa antes de despedirse.

—Agente, ¿Puede venir un segundo? —le dijo otro policía y asiento para que se vaya.

Siento que ya no tengo más lágrimas de tanto llorar.

Cihangir está sentado en el suelo, apoyado en la pared de la casa sin pestañear, sus lágrimas no paran de caer.

Akasma parece que va a perder la calma que trata de tener siempre.

Serkay está observando todo, parece no estar en sí y lo entiendo, todos la queríamos.

Emir está insultando como loco en el teléfono.

Mustafa y Erol no dejan de dar vueltas.
Por primera vez veo a Mustafa así de nervioso, preocupado por todo lo que está pasando.

Llega la señora Hazal con Doruk en brazos y Cihangir se le acerca y lo alza.
Se acerca el policía que me estaba haciendo preguntas y todos nos acercamos.

—Lamento decirles ésto pero, ¿Quién está dispuesto a reconocer el cuerpo?

—Yo. —dijo Cihangir.

—İremos todos. —le dijo Erol a Cihangir y él asiente.

—Abuela, cuida de Doruk un rato más. Que nadie se le acerque. —le ordenó Cihangir a la señora Hazal.

—Con mi vida. —dijo abrazándolo fuerte a Doruk.

—Quédate con nuestros hombres. —le dijo Mustafa y ella asiente.

NARRA CİHANGİR

Nos vinimos en autos separados y llegamos para hablar con los forenses.

—Es la señorita Olcay Boz. —dijo el doctor y siento que se me viene el mundo abajo.

Le tuvieron que hacer análisis ya que su cuerpo estaba demasiado calcinado y no se lo podía reconocer.

Llegaron Tolga y Ferit.
Se nota que ambos estuvieron llorando al igual que nosotros, tenían los ojos súper hinchados.
Akasma se pone de pie y se abrazan entre ellos.

—Éramos cuatro, ahora somos tres y éste lugar se siente vacío sin ella. —dijo Ferit mientras lloraba y se abrazaban.

A pesar que Ferit no me cae tan bien, sé que a él también le duele. Eran amigos desde mucho antes que llegue yo a su vida, incluso antes que llegue el idiota de Vural.

NARRA VOLKAN

Estuvimos toda la noche despiertos.
Cihangir no paró de llorar.
Es la primera vez que lo veo así de débil, no quiso comer, no habla.
Todos estamos muy mal, pero ya tenemos que ir al velorio.

Hace un mes enterré a mi madre, y ahora a la mujer de mi vida, el amor de mi vida.

Estamos en el velorio y se largó a llover.
Todos se fueron, Akasma se tuvo que ir ya que estaba Doruk y se iba a enfermar si se mojaba.
Solamente nos quedamos aquí al lado de su tumba, Cihangir, Serkay, Erol, Mustafa, Emir, Tolga y Ferit.

—Prometo que te voy a vengar mi niña hermosa. —le dijo Erol a la lápida con su nombre.

—Dijiste que eras un bicho malo, que nunca te ibas a morir. Eres la persona más perfectamente imperfecta que conocí mi amor. —le dijo Cihangir.