𝐓𝐫𝐞𝐢𝐧𝐭𝐚 𝐲 𝐮𝐧𝐨

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Entró a su casa estando completamente tranquilo, la curiosidad comenzó a invadirlo al notar que nadie se encontraba esperándolo en la sala como de costumbre. 

— Oh, ha llegado. — Dijo la mujer al notar que el joven dueño de la casa había llegado. — El Joven Jeon lo está esperando en su oficina. 

— "Te dije que te arrepentirías".  —Leyó cuando el mensaje llegó a su celular haciendo que una cara de confusión se presentara en él. — Debe ser ese maldito loco... 

Subió las escaleras en dirección a la oficina de su esposo esperando encontrarlo dentro como la mujer había dicho, la curiosidad volvió a embargarlo cuando notó una botella de Whisky en el escritorio y su esposo dando la espalda a la puerta sentado sobre su silla. 

— He llegado. — Dijo adentrándose cada vez más a la habitación.

El otro hombre se dio la vuelta aún en su silla y lo miró de una manera tan fría que un escalofrío recorrió su cuerpo inmediatamente. 

— ¿Q-qué sucede? ¿Por qué me esperabas como un villano de película? — Preguntó en forma de broma esperando que la tensión que sentía bajara un poco. 

JungKook se levantó de la silla sosteniendo algo además de su vaso de Whisky, el más pequeño lo miró atentamente esperando por una respuesta. 

— Dime... ¿Tu realmente estás intentando tener sentimientos por mi? — Preguntó con un semblante de total seriedad. 

— Dime qué es lo que está pasando. — Pidió sintiéndose nervioso al no saber lo que estaba sucediendo. — ¿Estás enojado porque salí? 

— ¿Me respetas, siquiera? — Cuestionó comenzando a alzar la voz mientras que sus ojos comenzaban a producir lagrimas.

— ¡¿Qué es lo que te pasa?! — Exclamó sintiéndose cada vez más enojado por la desconfianza de su esposo.

— ¡¿Qué mierda es esto?! — Exclamó a la vez que arrojaba lo que sostenía en las manos hacia s esposo. 

La mirada de Park fue de la cara de su marido al suelo observando cuidadosamente las fotos que le había lanzado, se sintió desfallecer cuando tuvo en cuenta lo que las fotos contenían. 

— E-esto no es lo que parece... — Dijo inmediatamente después de ver lo que estaba plasmado en aquel papel. — ¡¿Quién mierda te dio eso?! 

— ¿Realmente te importa quién me dio esas malditas fotos? ¡¿Planeabas jugar conmigo como lo hizo él?! — Gritó antes de lanzar el vaso de vidrio hacia una de las paredes de la habitación haciendo que el contrario saltara en su lugar. — ¡¿Qué mierda es lo que quieres de mi?! 

— ¡Deja de ser un maldito idiota y escúchame! ¡Mierda! — Gritó sintiendose cada vaz más desesperado debido la falsa "evidencia". 

— ¡¿Qué es lo que tienes que decirme?! ¡¿Que no hiciste nada y que todo esto es un estúpido malentendido?! — Preguntó dejando salir sus lagrimas finalmente. — ¡Las malditas pruebas están ahí, JiMin! 

— ¡Escúchame! — Gritó desesperado por la atención de su pareja. — ¡Él simplemente estaba jugando, no se quitó de encima cuando le dije que tu eras a la única persona que necesitaba!

— ¡¿Y ahora esperas que crea tu puto cuento?! ¡Deja de tratar de verme la cara de idiota! — Exclamó de regreso simplemente dejando sus lagrimas recorrer sus mejillas. — ¡No soy tu puto payaso! 

— ¡No me estoy burlando de ti! ¡No te estoy mintiendo! — Insistió comenzando a acercarse a su contrario. — ¡Por favor, créeme!

La mano que había sujetado el brazo de su esposo rápidamente fue quitada bruscamente por el más alto.

— No creí que fueras tan asqueroso como aquel tipo... Te mostré todo de mi... — Susurró antes de caminar hacia la salida de la habitación aún con las lagrimas saliendo de sus ojos. 

Sus delgadas piernas pronto perdieron la fuerza y él cayó al suelo antes de que sus lagrimas comenzaran a salir de sus ojos haciéndolo sollozar tan solo unos segundos después. Sus ojos recorrieron de sus rodillas flexionadas sobre el suelo hasta la foto que se encontraba frente a él. 

— No hay forma de que te haya engañado... — Susurró para sí mismo sintiendo cada vez más su corazón doler. — También me enamoré de ti sin quererlo, tu eres la persona que esperaba... 

Aunque trataba, las fuerzas no regresaban a él para poder pararse del frio suelo y en cambio las lagrimas nublaban cada vez más su vista. Al paso de los minutos sus fuerzas comenzaban a aparecer y sus lagrimas disminuían notablemente. Al haber podido estar de pie lo hizo y tomó una de las fotos que se encontraban sobre el suelo haciéndolo sentir enfurecido de inmediato.  

— Sabía que harías alguna de tus jugarretas para destrozarnos a ambos pero no voy a dejar que lo separes de mi ahora que tengo claros mis sentimientos hacia él. — Susurró a la vez observaba cuidadosamente aquella fotografía que habían tomado de él con el otro chico mientras lo tocaba.

Sus pasos comenzaron a dirigirse hasta la salida de la habitación al mismo tiempo que su mano hurgaba en la bolsa de su pantalón en busca de su celular. 

— ¿Dondé está JungKook? — Preguntó cuando bajó las escaleras y se topó con la señora.

— Bajó enojado mientras lloraba pero no quiso decirme qué era lo que pasaba ni a dónde iba. — Dijo esperando por una respuesta del más joven.

— Sí vuelve cuidalo mucho, no dejes que se encierre en la habitación y abrazalo. — Pidió antes de salir con prisa de la gran casa.

Prendió su celular a la vez que entraba a su propio auto, al estar en el asiento lo prendió y marcó el número de su mejor amigo a la vez que prendía el lujoso auto.

— Tae. — Dijo cuando la llamada fue tomada por la otra línea. — Necesito que comiences a mover cosas en el club, voy a tu casa.

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Esta nota será muy breve debido a que estoy trabajando 🤧

Agarrense porque eso no es lo único que va a pasar, estoy pensando muchas cosas😗
Voya tratar de hacerlxs sufrir jiji

Cuídense mucho mucho

Lxsamomucho 💕✨





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