Over The Moon [Tsukishima Kei]

CAPÍTULO 7

—Kyoko realmente ese chico me esta dando miedo.

Llevaban una hora haciendo el dichoso trabajo cuando Junko le susurró.

—¿Qué chico? —preguntó Kyoko observando a los lados sin ver nada preocupante.

—El que te dije antes, realmente estoy pensando que nos van a secuestrar, tiene una camiseta azul y gorra negra...

Se giró para ver a donde su amiga le apuntaba con la mirada y abrió los ojos sorprendida ante aquel chico pelinegro que les miraba tetricamente desde una esquina de la cafetería a pesar de que tenía a una chica justo delante de él.

Se volteó hacía su amiga y ella abrió sus ojos como respuesta como diciendo "te dije"

Kyoko le tranquilizó con la mirada y se levantó de su asiento caminando en dirección al susodicho. Vió al chico tensarse a lo lejos.

—¡¿Qué haces?! —le gritó la rubia pero Kyoko solo le hizo una seña.

Llegó hasta la mesa en la otra esquina del lugar. Y mientras su amiga recogia las cosas importantes se atrevió a hablar.

—¿Kageyama? —soltó sin rechistar y el pelinegro levantó la mano incómodamente para saludar.

—Hola Kenjirou —respondió el pelinegro con una sonrisa bastante forzada, como eran tipicas de él y la chica frente a ella llevó su mano a su rostro decepcionada— Ella es mi hermana, Miwa, Miwa ella es Kenjirou una compañera de la preparatoria.

—Un gusto —dijo la castaña haciendo una reverencia hacía la mayor, era realmente bella ella le saludo de vuelta y se giró hacía Tobio— la próxima vez puedes acercarte a hablar, no muerdo.

Le sonrió amablemente y Junko quien acababa de llegar a su lado hace unos segundos se escandalizó.

—¿¡Lo conoces?! ¡Y yo que estaba muriendo de miedo!

—Lo... lamento... parecían ocupadas —murmuró el pelinegro avergonzado y Kyoko negó.

—No te preocupes, siempre hay tiempo para hablar con mis chicos del Karasuno —le sonrío ampliamente y este asintió con las mejillas ligeramente rosas.

No imaginaba encontrarse a su amigo por esos lugares y la verdad tenía muchas preguntas que hacerle. Pero ninguna de ellas era el porqué les observaba de manera tétrica desde una esquina, sabia que el era malo con las palabras al igual que ella cuando se acababan de conocer.

Gracias a sus diversos trabajos y a la carrera que estudiaba había mejorado sus habilidades para hablar, pero aún tenía el recuerdo de su infancia bastante vivido y salía a luz de vez en cuando.

Estaba divagando una vez más como siempre...

Alejó esos pensamientos de su cabeza y ayudo a Junko con las cosas que se estaban cayendo de sus manos.

—Ella es Junko mi amiga de la universidad —le señaló a la rubia pero ella no correspondío al saludo, conociéndola aún estaba incomoda con su amigo— Y el es Kageyama Tobio, alguna vez te hablé de él. Juega en la selección de volei...

—Creo recordarlo —suspiró la rubia.

—Y yo soy Miwa —saludó la azabache, era tan parecida a Kageyama que le hacía sentir escalofríos— ¿Y que estan estudiando?

—Oh, yo estoy penúltimo año se psicología —explicó la castaña— y Junko está en último.

—¡Wa que interesante! ¡Tengo un salón de belleza por si quieren pasar algún día! Cualquier amiga de Tobio es bienvenida.