🧖🏻‍♀️Capítulo 5🤷‍♂️

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—¿Qué rayos hiciste como para que toda tu familia nos mire así? —James me susurró.

Sí, las catorce personas en la mesa nos miraban... Dios, ni siquiera sabía como describir esa mirada, ¿vergüenza ajena, tal vez?

—¿Por qué piensas que yo hice algo? —lo miré y él se encogió de hombros.

De nuevo iba a hacer esa cara de asombro, pero...

—¡Familia! —mamá se puso de pie—. Miren quién decidió aparecer —sonrió mientras se acercaba a nosotros—. Charlize y su novio James.

¿Vieron eso? El gesto de Stefan al mirar a James, cómo con... ¿Odio? No, no, no, imaginaciones mías, por supuesto.

—¡Un gusto! —James les sonrió—. Charlize me ha hablado de todos ustedes.

Silencio... ¿qué pasaba con mi familia?

—Disculpa a esta familia, James —la abuela Rose le sonrió y se puso de pie—. Es un placer conocerte —se acercó a él y besó sus mejillas—. Soy...

—Rose —la interrumpió James—. La persona favorita de Charlize —le sonrió.

—¡Así es! Que chico tan atento.

Sí, así era él.

—Cariño, no sabes cuanto gusto me da volver a verte —me abrazó.

—Y a mí, abuela, te extrañé —le sonreí.

En verdad la extrañé, ella era la única persona sensata en esta familia.

Sin soltar la mano de James —que creanlo, me mantenía fuerte y no pregunten por qué—, avanzamos con uno a uno de mis familiares para presentarlo "formalmente". Ezra y Silas —hermanos de papá— con sus respectivas esposas, Sasha y Mafalda. Mis primos, Elian y Dion, ambos hijos de Ezra y Sasha, —unos tarados y pubertos, pero me agradaban mucho—. Después, Tara, Alex y Bruno, ellos tres eran mis amigos, bueno, eran amigos míos y de Stefan, pero después de todo lo sucedido, eligieron su lado —Stefan, por supuesto—.

Por último dejé a los traidores, no tenía ningún ánimo de siquiera mirarlos a la cara, pero supuse que se hubiese visto muy obvio si los ignorábamos, así que ahí estábamos, en un incómodo momento.

—Así que los prometidos, eh —el tonto de James les sonrió—. Mis felicitaciones por su próxima boda.

—Gracias —Léa le sonrió con timidez—. Gracias por estar aquí en un momento tan importante para nosotros.

¿Escucharon eso? Fueron mis huesos rechinando como si de una tiza deslizándose por la pizarra se tratara.

—De verdad, muchas gracias, Charlize —me miró con sinceridad.

«Púdrete»

Mi hermana no era tan parecida a mí, a pesar de que ambas teníamos el cabello rubio de mamá y el color de ojos de papá —verdes—, no había tanta similitud entre nosotras . Y hablando en cuestión personalidad, era muy, muy diferente.

—¿Desayunamos? —di una sonrisa forzada—. Muero de hambre.

—Sí por favor, necesito energía —James sonrió.

Ahí venía una...

—Tu excitante hermana, apenas si me deja dormir —susurró lanzándole un guiño.

... estupidez.

—Mhmm, vaya —expresó Stefan, queriendo ahogarse con su propia saliva.

—No..., le hagan caso a James, se pone muy impertinente cuando tiene hambre —me excusé.

Un latido más Donde viven las historias. Descúbrelo ahora