Dante
—¿Entonces durmió contigo? —pregunta Liam, mientras bajaba del auto.
—No, bueno si, bueno no conmigo así dormir conmigo, pero si, técnicamente durmió en mi cama, pero no conmigo así juntos — respondo, tomando mi mochila acercándome a Liam para ponerme a su lado.
—¿Entonces qué carajos Dante?, explícate bien.
—Te explique imbécil, muchas veces, pero tu trastornada mente solo piensa en sexo cuando te digo que una chica durmió en mi habitación.
Liam es mi mejor amigo de la vida, hemos estado juntos en todo desde nuestra etapa emo que por cierto quisiera borrarla de mi mente, hasta ahora.
Debemos agradecerle al universo y al ejercicio por ser tan generosos y darnos un glow up, ambos jugamos en el equipo yo como delantero y capitán y Liam como portero y en caso de no estar yo él es el capitán, así que se imaginaran a las chicas detrás de nosotros, pero aunque no lo crean ninguno de los dos ha estado con una novia oficialmente, de Liam se sabe que solo esta con chicas para la noche y luego no tiene interés, aunque nunca he visto a Liam con una chica solo me habla de sus experiencias con ellas y bueno de mí solo se inventan rumores que ya ni me molesto en negar porque la gente no me cree.
—Vamos Dante, me estás diciendo que estuviste con Alisse Rivas y no hicieron nada, esa chica no se caracteriza por ser tranquila.
—¿La conoces? —digo viéndolo confundido.
—¿Quién no?, es la chica latina e hija del director, su oficina está llena de fotos de ella, ¿sabes cuántos han intentado estar con ella?
—No y tampoco me interesa.
casi se me olvidaba que el señor Simón es director en mi escuela.
—No te pongas celoso príncipe —dice en tono sarcástico. —cuando se enteren que es tu chica nadie se meterá con ella.
—No es mi chica, ¿okey?, su padre y mi padre serán socios, fue un favor, la fiesta estaba buena y terminamos el after en mi casa, ella y yo no somos nada, no la conozco ni ella a mí.
—Perdón florecita la lastime. —Antes que pueda decir algo la campana suena y ambos tenemos que ir a la clase que nos toca, más porque es la última semana y estamos en exámenes finales.
(...)
Había terminado el día en la escuela, ¡vaya inicio de semana!, los exámenes son una mierda, yo había salido de primero por lo que estaba esperando en una banca del pasillo a que Liam terminara su examen, cuando el señor Simón pasa enfrente de mí, parece que nota que el de la banca soy yo por lo que retrocede y se acerca a mí.
—Buenos tardes Serra.
—Bu-buenas tardes director, yo quería disculparme por lo del viernes —digo nervioso.
Y es que como no, su hija se quedó en mi casa y había dicho que la llevaría a la suya.
—¿Porque?, Serra debo agradecerle, mi hija Aitana me conto lo que hizo, de su parte fue muy amable llevar a Aitana a casa y de paso pedirle de cenar y también gracias por cuidar a Alisse en la fiesta —dice un poco serio.
Debo admitir que escuchar eso me relaja un poco, es que sería una mala idea llevarme mal con el director.
—No fue nada señor, yo le dije que las cuidaría. —Siento la mirada de Simón y debo admitir si da un poco de miedo, cuando lo volteo a ver veo que en su rostro se forma una sonrisa.
—Tus padres están haciendo un gran trabajo al educarte, ¡nos vemos pronto Serra!, estoy seguro que te veré más seguido en mi casa—. Antes que pueda decir algo Simón sigue su camino.
A que se refiere con "Te veré más seguido en mi casa" si es por mi padre obvio, ellos dos tendrán asuntos de trabajo juntos y como soy el siguiente en encargarme de los negocios de la familia debo saber sobre sus socios por lo que veré más a Simón, no es como que yo y su hija, digo no es que él sepa que yo y su hija, no es como que quiera que yo y su hija estemos juntos.
Estaba pensando en lo último que Simón dijo, bueno no sé porque lo pienso tanto si solo fue una tonta frase, justo escucho la puerta de al lado abrirse y veo a Liam salir de la clase con cara de orgullo, de seguro le fue bien y bueno tiene que irle bien porque sus padres no le aceptaran estar en escuela de verano de nuevo.
—Supongo que te fue bien —digo parándome de la banca para ponerme al lado de Liam.
—¡Este guapo no ira a la escuela de verano! —responde orgulloso caminando por el pasillo.
—Eso es bueno —digo abriendo la puerta del auto.
Al entrar al auto espero que Liam entre, cuando está dentro arranco y me dirijo a mi casa.
—Iremos a comer a mi casa y luego a el entrenamiento.
—¡Genial porque muero de hambre! —dice Liam.
La escuela quedaba ya un poco lejos de mi casa ya que me había mudado, por lo que Liam pone un poco de música para hacer más corto el camino.
Al llegar ambos bajamos, abro la puerta y Ana quien trabaja en casa me dice que tengo visitas a lo que con Liam nos volteamos a ver ¿Quién podría estar esperándome a esta hora?
—¿Quién es Ana? —pregunto algo confundido.
—¿Es una chica? —dice Liam acercándose a ver y antes que Ana pueda decir algo Liam se acerca emocionado. —Es Alisse, y según tu no tenían nada —dice con un tono algo pícaro acercándose a mí.
—No no tenemos nada, tal vez se le olvido algo —digo alejándome de Liam para ir a recibir a Alisse que estaba en la sala.
No esperaba ver a Alisse en mi casa, quedamos como amigos supongo ya que hasta planes para el verano hicimos, me acerco a ella y debo admitir que el uniforme de su escuela le luce, me quedo viendo como un acosador, ni siquiera la salude, hasta que ella se da cuenta y se levanta del sillón y se acerca a mí.
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Lo que la tormenta nos dejo
Ficção Adolescentela adolescencia no es como en las películas y Alisse junto a sus amigos descubre lo cruel y amarga que puede ser cuando te enamoras del chico equivocado. Alisse lo sabe pero algo inesperado sucede, en el intentó de superar una ruptura, Alisse se en...