Hyung Won bajó las escaleras de casa de Ho Seok tan rápido que estuvo a punto de tropezarse y acabar por caer rodando un par de veces. No quería pensar en qué había visto, ni en lo que significaba lo que había visto. Salió al jardín, respiró hondo y sacudió la cabeza, antes de dirigirse a la calle.
Abrió la puerta, y al hacerlo se encontró con las miradas de su hermano, su primo, Min Ji y Joo Heon.
Con lo rápido que había vuelto a salir, siquiera habían terminado de coger las bolsas para ir a la casa rural. Les sorprendió lo rápido que salió, aunque no más que la cara de pánico que tenía.
-¿Estás bien? -preguntó Min Ji. De fondo, se escuchó una puerta abrirse y volverse a cerrar.
Él abrió la boca para contestar, pero antes de poder hacerlo, Yeo Joo le sujetó del brazo y le arrastró dentro de nuevo, cerrándoles a los cuatro la puerta en los morros.
Cuantos más segundos pasaban, menos entendían qué era lo que sucedía. Hyun Woo tenía la mente en blanco, Min Ji y Joo Heon se miraban buscando una explicación, pero Chang Kyun se puso en el peor escenario posible, y lo que imaginó no le gustó nada.
Se acercó a la puerta con la intención de picar, de saltar tal vez, incapaz de lidiar con esa incertidumbre, pero entonces escuchó una voz que le desmintió sus temores, y eso le detuvo.
-Habéis llegado rápido -dijo Ho Seok, y los cuatro se giraron a mirarle. Caminaba hacia ellos cargando una bolsa de naranjas en una mano y una mochila en la otra, ajeno a lo que acababa de pasar-. ¿Y Wonie?
-Ha entrado a tu casa, ha salido corriendo dos segundos después, y luego tu amiga le ha vuelto a arrastrar dentro -le explicó Min Ji. La sonrisa que tenía Ho Seok en la cara se le borró de golpe.
Se acercó corriendo y corriendo se metió en el jardín, volviendo a dejarles a ellos atónitos fuera, igual que había hecho Yeo Joo.
-¿Y tu compra? -preguntó Hyun Woo.
-¡Déjala en el coche, luego salgo! -le contestó él. Después desapareció dentro de su casa.
Entonces fue cuando empezó el caos. Por suerte su madre y su hermana no estaban, porque si no las cosas se hubieran vuelto todavía menos divertidas.
-En serio, ¿podemos pretender que no ha pasado nada? Te juro que no diré decir nada - escuchó que decía Hyung Won. Parecía nervioso.
-¡Cállate de una maldita vez y déjame pensar! -contestó la segunda persona que había en el salón de su casa.
Cruzó el recibidor para dirigirse hacia ellos, y se encontró a Hyung Won como una estatua a la entrada, jugueteando con sus manos que le temblaban mientras su atención se dirigía al manojo de nervios que tenía delante y que daba vueltas de un lado para otro sin saber muy bien qué se hacía en una situación como esa.
Había entrado en pánico cuando había escuchado a Hyung Won bajar las escaleras a toda prisa, y solo había alcanzado a ponerse la peluca lo mejor que había podido, a cubrirse el torso con la primera chaqueta de Ho Seok que había encontrado, y con la capucha puesta salir corriendo detrás de él. Ahora no sabía qué hacer, pero lo que sí sabía era que no podía dejar a Hyung Won irse después de lo que había visto.
-¿Puede explicarme alguien qué está pasando? -preguntó Ho Seok, muy despacio. Los otros dos en seguida se giraron a mirarle. Casi parecían sorprendidos de verle allí, aunque esa fuese su casa y no la de ellos.
-Hyung, hyung... -dijo Hyung Won, acercándose a él para luego cogerle de las manos. Estaba temblando más de lo que Ho Seok había pensado al verle desde la puerta-. Por favor, dile que no tiene que preocuparse de nada. Tú confías en mí, ¿verdad? Y me pediste que confiara en ella porque tú lo hacías, ¿verdad? Pues díselo. Dile que nunca, jamás, sería tan mala persona como para decirle algo así a nadie.
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301 miles to find you » Hyungwonho. MONSTA X
RomanceHyung Won pensó que aquel sería el peor verano de su vida. En un pueblo en medio de la nada con muchos bichos, mucho sol y cero cobertura, solo esperaba dos semanas terriblemente aburridas. Pero allí conoció a Ho Seok, y su vida dio un vuelco. Mien...