La forma en que llovía hacía que no se oyera nada más.
La temperatura había bajado varios grados desde que empezó a llover por la mañana, y Hyung Won había sustituido sus pantalones cortos y sus camisetas de tirantes por unos largos y una chaqueta.
Ho Seok le había llamado exagerado, pero a Hyung Won le daba igual.
El verano estaba llegando a su fin, eso era un hecho. Tal vez después de esas lluvia volviera el calor, ya había pasado antes, pero eso no cambiaba la fecha en la que estaban, y que el calor, aunque volviera, no iba a alargarse mucho más.
Hyung Won se había levantado de la cama para fumar en el balcón (el primer cigarro del día era una costumbre difícil de quitarse), y al volver a la habitación Ho Seok seguía tumbado en la cama, de espaldas a la puerta, aunque Hyung Won sabía que estaba despierto, como lo había estado cuando la abandonó diez o veinte minutos antes. A diferencia de Hyung Won, estaba completamente desnudo. De hecho, tanto había abrazado la sábana por delante, que por detrás se asomaba prácticamente toda su piel, incluyendo ese tatuaje con esa flor en uno de sus glúteos.
Cerró la puerta, y se acercó hasta la cama.
La señora Lee ya se había ido a trabajar, y el sueño de Yu Na era terriblemente profundo y aún era temprano, así que era como si estuvieran solos. Tampoco importaba demasiado si Yu Na se despertaba. Al fin y al cabo, Hyung Won estaba seguro de que ella sabía de lo suyo con Ho Seok, aunque no hubiera dicho nada. Lo suponía primero por cómo Yu Na le miraba y hablaba de él a veces, y segundo porque posiblemente Ji Min se hubiera ido de la lengua, porque igual que Ho Seok con Ki Hyun y Ki Hyun con Ji Min, a Ji Min le costaba callarse cuando se trataba de Yu Na.
Esas dos iban a acabar siendo tan íntimas como Ki Hyun y Ho Seok, cuando esa brecha de edad de tres años entre las dos dejase de ser tan importante como lo era cuando Ji Min ya era una adolescente y Yu Na aún era una niña.
Se acercó despacio hasta la cama, y se tumbó detrás de Ho Seok, pegando su pecho completamente a esa espalda tan enorme que Ho Seok tenía.
Coló sus brazos bajo los de él, y deslizó sus manos hasta colocarlas en el interior de sus muslos, casi rozando sus ingles. Luego le empujó hacia atrás, para pegar sus cuerpos todavía más.
Ho Seok soltó un pequeño gruñido contra la almohada, como si estuviera a gusto, y giró la cabeza con los ojos entrecerrados, para darle un beso en los labios a Hyung Won, cuya cabeza asomaba por encima de su hombro izquierdo.
La ventana estaba abierta de par en par, y una brisa agradable se colaba por la ventana en medio del sonido de las gotas golpeando contra el suelo y el tejado. Era agradable.
Hyung Won apretó más sus cuerpos y le mordió el labio a Ho Seok en medio del beso.
Ho Seok sonrió
-Hazlo -susurró contra la boca de Hyung Won.
Estiró las manos hasta el borde del colchón, junto a la pared, y rescató de allí dos cosas que ofrecerle a Hyung Won: un preservativo y un bote de lubricante.
Hyung Won le mordió en el cuello, de forma suave, y después sacó las manos de entre sus muslos. Solo un segundo, para llenarse los dedos de lubricante. Luego su mano se deslizó más adentro entre sus piernas.
Le preparó con los dedos, despacio, y luego se bajó los pantalones lo justo y necesario. Se puso el preservativo y entró dentro de él.
Ho Seok se aferró a sus brazos, que le rodeaban el pecho y la cintura desde detrás, y Hyung Won se movió despacio, mirando a Ho Seok poner esas caras tan bonitas que ponía cuando se sentía bien, escuchándole jadear por debajo del ruido de la lluvia y del de sus propios jadeos.
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301 miles to find you » Hyungwonho. MONSTA X
RomanceHyung Won pensó que aquel sería el peor verano de su vida. En un pueblo en medio de la nada con muchos bichos, mucho sol y cero cobertura, solo esperaba dos semanas terriblemente aburridas. Pero allí conoció a Ho Seok, y su vida dio un vuelco. Mien...