Addicted (En Pausa)

XXV

Yunho abrió los ojos lentamente, encontrándose con su habitación levemente iluminada por su lámpara de pie.

Al principio se sintió desorientado, como si ni siquiera recordara su propio nombre, pero a los segundos los recuerdos lo invadieron.

Por alguna razón, se sentía mareado, débil, como si su cuerpo se rehusara a moverse ni un centímetro de su cama. Miró hacia su ventana notando las estrellas brillar en todo su esplendor, dando a entender que la noche ya estaba en todo su auge.

Se había desmayado, eso es lo que recordaba.

Había caído en un sueño profundo en los brazos de Mingi. Todo se había vuelto negro.

Podría haber sido toda la presión que sentía por todos lados, también los nervios por enfrentar a Mingi o una mezcla de todo. Yunho sabía que en algún momento iba a colapsar, nadie puede aguantar tanto y a todo eso había que agregarle su propia cabeza, la cual parecía nunca callarse y siempre tenía algo nuevo que decirle.

Estaba agotado, estresado y no había manera de salir de ese círculo abrumador en el que estaba metido.

La gota que rebalsó todo fue ver a Mingi tan sacado. No supo cómo manejarlo ni cómo salir de esa situación, Mingi lo había acorralado de una manera en la que sólo pudo sentir su cuerpo entrar en una crisis, algo que nunca le había pasado.

Si bien, siempre había sido de pensar mucho, nunca había llegado al punto donde parecía estar entre cuatro paredes, sin poder encontrar la salida.

Mingi intensificó cada sentimiento que tenía dentro, y uno de ellos era la ansiedad. Estaba en un punto donde no podía controlarla, ni siquiera podía recurrir al alcohol como solía hacerlo porque a su novio no le parecía una buena idea.

¿Cómo se supone que podría estar bien si vivía un martirio cada segundo de su vida?

Suspiró sintiendo sus ojos aguados. Llorar es lo único que podía hacer, pero ya estaba cansado. Nada había solucionado de esa forma, solo sentirse más miserable.

Debía salir de todo eso antes de que no pueda aguantarlo mas. Debía ponerle fin.

De repente, escuchó la puerta de su habitación que se abría.

Miró atentamente viendo a Mingi pasar con cuidado, pero cuando lo vio que ya estaba despierto su rostro preocupado pasó a uno aliviado. Yunho pudo ver una pequeña sonrisa en su rostro.

_ Yunho_ Dijo con cierta emoción_ Dios, tenía tanto miedo que no despiertes_

Yunho bajó la mirada sin saber qué decir. No sabía qué es lo que le había pasado, si le había bajado la presión o si era algo mas grave, pero estaba seguro que fue producto de todo el sufrimiento que había pasado en esas semanas.

Era por culpa de esa relación tan tóxica que mantenía con Mingi.

_ Sólo fue un desmayo_ Dijo en voz baja mientras se sentaba en la cama.

_ Déjame ayudarte_ Mingi se ofreció yendo hacia el chico para sostenerlo mientras se sentaba.

_ No es necesario, estoy bien_ Yunho dijo con calma.

Mingi se sentó a su lado mirándolo con tristeza, como si tuviera mucho en su cabeza. Yunho sabía que así era porque si algo tenían en común era tener un desastre en sus mentes.

_ ¿Cómo llegué a mi cama?_ Yunho preguntó todavía un poco desorientado.

_ Yo te traje. No supe bien qué hacer así que fue lo primero que se me ocurrió _ Mingi contestó_ Estaba a punto de llamar una ambulancia. Tal vez necesitas que un médico te atienda_