Capítulo 32

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Recordar todo lo que había sucedido era como una niebla que ni siquiera había notado que se disipaba de la mente de Blinky.  "Oh, Dios mío", dijo, sus ojos se encontraron con los de color verde esmeralda de su compañero de toda la vida.

Por la ampliación de los ojos de Aaarrrgghh, él también se sintió aturdido.

Lo primero que hizo Aaarrrgghh cuando sus miradas se rompieron fue girarse y atrapar a Toby en uno de sus abrazos casi aplastantes que, sin embargo, eran uno de los lugares más seguros para estar en todo el universo.  Blinky había apreciado más de una vez la sensación de seguridad que se encontraba en los brazos de Krubera.  "Wingman a salvo", dijo Aaarrrgghh en voz baja.

"Sí", dijo Toby, presumiblemente abrazándolo.  "Yo también te extrañé, amigo".

Por su parte, Blinky se quedó de pie y respiró.  Se sentía casi como un milagro, estar aquí en este tiempo y espacio, con tantos de sus aliados intactos, y muchos más, pensó, su mirada atrapada en Draal, aún con vida.

"¿Blinky?"  Jim preguntó en voz baja.

"Gracias", le dijo Blinky a su primer hijo en voz baja, "por darnos la opción de recordar. Y por darnos la opción de esperar hasta que estuviéramos listos".  Dobló suavemente al joven en sus brazos.

Jim lo apretó con fuerza, por la fuerza de un humano.  "Es bueno tenerte de vuelta, Blink", dijo, y si su voz estaba llena de lágrimas no derramadas, Blinky no podía culparlo.

"Sí, bueno", dijo Blinky, incómodo por mostrar demasiadas emociones incluso frente a sus aliados más cercanos.  "Entonces, ¿vamos al grano?"

"Sí", dijo Jim, y se volvió hacia su mago.  "¿Doux?"

"Como quieras", dijo Hisirdoux, y lanzó un hechizo desde su brazal que envió casi una docena de pizarras blancas brillantes, garabateadas con escritura, flotando alrededor de la habitación.

"Bien", dijo Blinky, haciendo crujir los nudillos en las cuatro manos, "vamos a 'llegar a esto'".

Douxie y Archie se sirvieron un poco de queso y uvas mientras Blinky miraba las pizarras y murmuraba para sí mismo.  Los gatos reales no podían comer uvas... pero Archie no era un gato real, y siempre había disfrutado salvajemente la forma en que las dulces esferas estallaban entre sus afilados dientes.  Douxie sospechaba personalmente que los antepasados ​​de su familiar habían sido tan salvajes como las historias de Carlomagno el Devorador que Archie le había contado durante siglos.  (Quizás aún más; el hábito de hornear pasteles de Charlie, incluso en los cuentos de Archie, siempre había sido un indicador de al menos algo de cortesía).

"Está bien", dijo Blinky mientras Douxie se sentaba en el suelo.  El comentario del troll interrumpió las conversaciones en voz baja y al menos un juego móvil de Go Go Sushi que había estado sucediendo mientras su maestro estratega se volvía a familiarizar con todos los problemas que tenían por delante su equipo y sus notas sobre cómo abordarlos.  "Mis pensamientos son estos: debemos darle tiempo a Strickler para que tenga la Orden de Jano en sus manos antes de que nos ocupemos de Gunmar. Por ahora, por lo tanto, nuestras principales prioridades deben ser adquirir las Triumbric Stones y, aunque me duele decir esto, despertar a Merlín".  También debemos estar en guardia contra la traición de la reina Usurna, aunque, habiendo sido desterrados de Mercadotrol, no sé cómo podemos lograr ese objetivo".

"Le advertí a Vendel sobre ella", dijo Jim.

"Entonces eso tendrá que ser suficiente. Vendel es astuto y sabio; saber de su futura muerte a manos de ella probablemente será suficiente para guiar sus acciones".

"¡Pregunta!"  La mano de Toby se levantó.  "¿Cómo conseguimos las piedras sin acceso al giro?"

"Un acertijo de lo más desconcertante, por cierto".  La mano de Blinky estaba presionada contra su barbilla.  "Tal vez Claire podría-"

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