Tu futuro aún no se ha escrito

Capítulo 38

Un movimiento de su mano hizo volar todas las telarañas cuando Hisirdoux se acercó al féretro de piedra.

"Maestro", dijo, arrodillándose, "es hora de despertar".  Y extendió una mano, apoyándola en la armadura de la parte superior del brazo de Merlín, mientras también extendía su magia, empujando a Merlín, diciéndole que era hora de levantarse.

No pasó nada.

Archie puso los ojos en blanco y saltó sobre el pecho del mago dormido, abofeteándolo con una zarpa negra.  "Sabemos que estás fingiendo, viejo. Despierta".

Ante la indicación del dragón, los hombros de Merlín se desplomaron y soltó un suspiro de exasperación cuando sus ojos se abrieron.  —¿No podrías haberme dejado dormir hasta tarde, Archibald?  el se quejó.

"No", respondió el dragón, saltando mientras Merlín se incorporaba, respiró hondo... y rápidamente comenzó a sacar el polvo de nueve siglos de sus pulmones.

"Toma", dijo Douxie, destapando una botella de agua, "esto te ayudará".

Su maestro tomó la botella sin una palabra de agradecimiento y bebió la mitad antes de hacer una mueca.  "¿Qué diablos es esto?"  preguntó, mirando la etiqueta.  "¿Baba de Tangleberry?"

—Agua destilada —respondió Hisirdoux, levantándose—.  "Preferiría pensar que te gustaría beber algo cuando te despiertes".

"Sí, ¿y por qué me has despertado?"  preguntó Merlín irritado.

—Le he traído su Cazatroles, Maestro —dijo Hisirdoux, gesticulando—.  Toby dio un paso adelante, saludando.

Los ojos de Merlín se entrecerraron.  "¿No eres un poco bajo para ser un Trollhunter? Pensé que serías más alto".

La expresión de Toby cayó un poco.  "Sí, yo también", dijo.

La mirada de Merlín recorrió al resto del grupo, desdeñoso.  Luego se detuvo y volvió con Jim.  "Hisirdoux..." el maestro mago gruñó, advirtiendo.

"¿Si señor?"

"¿Has estado jugando con los viajes en el tiempo?"  Los ojos azules brillaron hacia él, enojados.

"Yo no, no", dijo Douxie.  "Eso es todo de él".  Hizo un gesto a Jim.

"¿Y por qué", le preguntó Merlín a Jim, "pensaste que jugar con una de las fuerzas primarias del universo era una buena idea?"

"Porque esta vez", dijo Jim tranquilamente, sin darle una pulgada al maestro mago, "vamos a hacer las cosas bien. Y nadie va a morir".

"¿Y qué te dio el derecho?"

Los ojos de Jim se entrecerraron.  "Soy el poseedor de la Piedra del Tiempo, el Trollhunter elegido por tu amuleto, asesino de Bular, de Gunmar, de Bellroc, protector de este mundo, y..." miró a Douxie;  Douxie asintió.  "Sucesor del Rey Arturo", dijo Jim, reclamando finalmente el título que había sido suyo por derecho durante mucho tiempo.

Merlín se quedó en silencio por un minuto.  Entonces, "Bollocks", dijo finalmente.

"Bueno, no es como si pudiera convocar a Excalibur aquí para demostrártelo, ¿verdad?"  Douxie razonó.

Merlín también lo miró fijamente y finalmente se puso de pie.  "Necesito mi bastón", dijo, irritado.  Espera mi regreso aquí, Hisirdoux.

"Sí, Maestro", dijo Douxie, mirando con cariño mientras el anciano se alejaba, en dirección a la caverna de cristal.

"Siempre se despertaba malhumorado", reflexionó Archie.

Una vez que Merlín regresó con su bastón, no fue menos crítico.  "No recuerdo que esto esté en mis planes", le dijo a Douxie, mirando el túnel por el que habían entrado.