37. Los vestidores ✔

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Cierro la puerta detrás mío lo más silencioso posible, escuchó un silbido, es el silbido de Paul. Me relajo, si es que puedo hacerlo tras escuchar el plan de los estúpidos.

Abro los ojos de sorpresa al ver a Paul desnudo. Ambos nos miramos atónitos por unos segundos... Cuando ambos reaccionamos.

— Paul: Mierda Preciosa. (Se empieza a cubrir con las manos)
— TN: ¿Pero que carajos? (Le tiró una toalla y él se la enrolla en la cintura) Lo siento. (Me río nerviosa, siento mi cara arder y volteo para otro lado)

— Paul: Está bien, no es como si viste algo que nunca vas a ver en el futuro. (Ríe picaro)
— TN: Vete al demonio.
— Paul: Te tengo enfrente. (Lo volteo a ver y lo encuentro mucho más cerca de lo que esperaba)
— TN: ¿Siempre sales desnudo? ¿Sin importar que estén los demás?

— Paul: ¿Siempre sueles equivocarte de vestidos?
— TN: No, solo cuando no quiero que la bruja y el idiota me miren.
— Paul: ¿Te los encontraste?
— TN: No, hable con la monedita de Natalie debajo de las gradas y escuche su plan maestro.

— Paul: ¿Así? ¿Y cuál es?
— TN: Su objetivo es la caja fuerte de mis padres, para eso dicen que me volverán a engatusar.
— Paul: ¿Y lo conseguirán?
— TN: No.
— Paul: Entonces... No le veo lo peligroso.
— TN: Pueden ir tras mis hermanos.
— Paul: Aali está con Cam, Preciosa.
— TN: ¿Qué hay de Shawn?
— Paul: Tu hermano es tan est... Está tan enamorado de Camila que volvería a caer.
— TN: Exacto. Cambiate iremos a hablar con los chicos. (Me volteo)

— Paul: Mueres por tocar lo que viste.
— TN: Pierde el chiste cuando no fui la primera.
— Paul: ¿Y quién fue la primera, según tú?
— TN: Rebecca Soteros.
— Paul: ¿No me digas que estás celosa? Dios, estás celosa.

— TN: Celoso tú con Chris. (Me tomó de la cintura)
— Paul: Sí, estaba celoso de Christopher pero a diferencia tuya, yo lo acepto.
— TN: ¿Decir la verdad ahora es estar celosa?
— Paul: ¿No estás celosa? Muy bien, vamos a Hawaii y asi te presento a Rebecca.
— TN: Hawaii... Playa, piñas coladas, hombres guapos por todos lados ¿Cuando nos vamos?

— Paul: Sabes darle la vuelta al juego.
— TN: Supongo que si... Hubiera deseado darme cuenta de los juegos de Tom antes, nada de esto hubiera pasado.

— Paul: ¿A qué te refieres con nada?
— TN: No hubiera mezclado sentimientos, actúe como una estúpida, baje la guardia y casi permití que destruyera a mi familia. 

Empiezo a recordar momentos según yo felices con él, siento como mis ojos se llenan de lágrimas. Los brazos de Paul me sacan de mi trance.

— Paul: Sé que estás mal y que tal vez no quieres hablar...

— TN: Estaba pensando en... (Miró a Paul)
— Paul: No me digas que es lo que pienso. (Me sale una lágrima) ¿Él te lo pidió? (Asentí) Nadie puede obligarte o insistir en hacer algo que no quieres.
— TN: Yo solo pensé que tal vez era él. (Empiezo a llorar)

Paul en ningún momento me dejo de abrazar, un rato después ya no tenía lágrimas para seguir llorando. 

— Paul: Mi niña deja ya de llorar, por él que no te supo valorar. Tú eres más que ese idiota... Siempre supe que él no era bueno, todos en esta secundaria sabían cómo te controlaba, así que aprovecha que ahora nadie te controla, disfruta tu vida. Mientras tanto yo estaré velando por sacarte eso que te está matando... No para que quieras de mí, entiende que él te estaba maltratando. Sé de primera mano que es difícil olvidar lo que tuvieron pero es mejor, que estar pensando en las cosas que quisieras no haber hecho hermosa... Con el daño que causó y esa fue a ti, mi Preciosa.

Me empieza a sobar el pelo.

— Paul: Sé que te duele, es tu primer corazón roto. (Empiezo a negar con la cabeza) ¿No? ¿De que me perdí? (Levantó la cabeza para ver a Paul)

— TN: Tú fuiste mi primer corazón roto. (Paul me miraba sin entender)

Continuará

Un amor de secundaria - Paul Walker © ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora