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Al día siguiente de la bellísima charla que Josh tuvo con Joseph, Josh se duchó, y tomó su motocicleta para ir al instituto. Se puso el casco y se fue. El viaje normal que hacía siempre.

Fue al instituto, y no se había topado a Tyler aún. Fue a su casillero y al abrirlo se encontró con una nota.

Sonrió, porque lo primero que pensó fue en Tyler.

"Hola Joshua. :)!!!
Deberías cuidarte, los asesinatos han estado en pausa últimamente, pero nada impide que el siguiente seas tú. Te veo Dun"

Miró a su alrededor pero... todo se veía normal. No había nadie a quien notara sospechoso, aún así se le erizó la piel, y solo quería pensar que era una broma de mal gusto.

El día estuvo tranquilo y relativamente normal, solo que Josh sentía una vibra extraña. Y para nada buena. Todo el día sintió un ambiente pesado como si estuviera en la mira de alguien y no sabía quien.

En clase, miró a todos lados sin encontrar a nadie, e igual en el receso. Miró a todos los que pasaban junto y él y no vio a nadie ni nada raro.

Y eso lo incomodaba aún más. Quiso calmarse pensando que sería su propia cabeza jugando con él.





Después del instituto Tyler fue a ver a Jenna a su trabajo, que era en una cafetería, no con otras intenciones, se habían vuelto amigos, unos bastante buenos. Se podría decir que ella era su única amiga en estos momentos.

Tyler le había comentado toda la historia desde el comienzo así que la rubia estaba enterada.

—¿Te dijo que a las siete?—Respondió la chica sirviendo en un café.

—Sí, nunca sé que planea pero me gusta que lo haga ¿sabes? Es lindo...

—Él parece ser muy atento contigo Tyler, de esos ya no consigues, deberías pues... hablarlo con él.

—No sé que es lo que quiere. Es decir creo que estamos volviendo a lo que teníamos y es genial, pero siento que fue muy fácil...

—¿la querías más complicada? ¿Acaso querías irte a pelear con un dragón? Tyler por Dios no pienses tanto y aprovecha. Ve a alistarte y ver qué te pones. ¿Bien? Mi turno aún no termina.

—Bien. ¿A que hora sales?—Preguntó recogiendo sus cosas.

—A las seis. Pero te avisaré cuando llegue a casa, ¿si? No tienes que preocuparte. Tú ve y diviértete con tu chico y luego si gustas me dices cómo fue todo.

El castaño sonrió y rodó los ojos, saliendo del lugar.

Jenna era una chica buena, bellísima, dulce, y enérgica, la personalidad le parecía algo similar a Robbie, incluso los ojos de la chica eran azules, azules como el cielo en un día de verano sin una sola nube en el cielo.

Fue a su casa y tomó un poco de café, revisó las redes sociales, y después se alistó.

Tyler miró su computadora, y había olvidado por completo que fue testigo de varios asesinatos, el ambiente con eso estaba calmado... y se le hizo raro. Es decir, él obviamente no quería que nadie más muriera, pero que todo terminara de pronto, y que la policía nunca encontrara a un culpable se le hizo raro. Le causaba ansiedad pensar en eso... tanto que le empezaron a temblar las manos.

Dun dejó la motocicleta frente a la casa de Tyler. Miró su celular y faltaba un minuto para las siete. Espero frente a la puerta, y a las diste en punto la tocó.

Tyler abrió con una sonrisa de oreja a oreja.

—Estoy listo.—comentó Tyler.

—Bien. Vamos. —Lo tomó de la mano.

w e b c a m//[joshler/tysh]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora