Capítulo 14

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Connecticut

Ava

La luz entra por mi habitación aclarando todo el espacio y dejando más visible la ausencia de Edan. No dejó un mensaje, una nota, no hay rastro de él, es como si nunca hubiera entrado a mi departamento.

No me extraña que se haya marchado; me extraña el no estar enterada, las veces que se ha quedado aquí me deja algún mensaje, llamada, nota o simplemente está aquí conmigo cuando despierto. Es un poco tonto sentir decepción pero es el sentimiento. 

Pasé días increíbles con él que no me había permitido con ningún otro que no fuera solamente amigo y no me molestaría para nada repetir, tal vez Halsey tiene razón y estoy dejando que mis sentimientos hacia Edan crezcan a la velocidad de la Luz, no sé a donde me pueda llevar esto pero dejaré que siga su rumbo.

Vaya que esas folladas te están cambiando el humor.

Después de mis pensamientos matutinos y de mi burlesca conciencia es hora de levantarse y seguir con mi rutina, de cualquier forma hoy tengo clase con él.

Me apresuro aseándome y colocándome al terminar unos jeans, chaqueta y botas. Hoy el clima está un poco fresco y no tengo ningún partido de voleibol después de clase. 

Llego a la universidad encontrándome con Katy entrando al tiempo que lo hago yo, me acerco a ella rodeándole el cuello con mi brazo mostrando una sonrisa plasmada y ella no pierde el rostro confundido.

-Estás alegre a las... ocho de la mañana. ¿Será que es el fin del mundo?.- Pregunta burlándose de mi.- ¿Ava Collins por fin tuvo un trozo de carne entre sus piernas?.

No evito mi carcajada y luego mostrarle el dedo de en medio.

-Tengo un trozo de carne entre mis piernas siempre que quiero dulce Katy.

-Ya en verdad, ¿Qué te tiene tan contenta? ¿Estás viendo a alguien?, claro que estás viendo a alguien, no has dejado de actuar raro desde hace semanas y en algunas ocasiones muy feliz.- Comienza a despotricar sin parar.- Como tú mejor amiga exijo saberlo.

No le doy tiempo de seguir cuestionando, la tomo rápido del brazo adentrándonos a las dos en un pequeño cuarto de limpieza, enciendo la luz y Katy me mira extrañada.

»¿Es el momento en que te vuelves loca y me atacas con el limpiador de vidrios? Eso no sería de amigas...

-Katy.- Respiro hondo soltando todo de una maldita vez.- Me estoy acostando con Edan. 

»Desde que lo vi me gustó demasiado. Luego me dejaste plantada aquel fin de semana en el club y él estaba ahí muy guapo con su maldita camisa y sonrisa encantadora; conversamos por un rato... es muy inteligente y coqueto, bailamos y terminamos en su pent house; en realidad tiene mucho dinero, creí que era un mafioso, gracioso ¿no?... Hemos tenido citas, él quiere conocerme y yo... yo... no sé qué estoy haciendo, estoy entrando en pánico porque descubrí que estoy teniendo sentimientos más fuertes hacia él y la verdad no sé cómo manejarlo.

Uff... creo que no fue una explicación muy buena por mi parte, pero lo solté por fin y necesito apoyo para controlarme urgentemente.

Katy me mira atónita por todo lo que acabo de confesarle.

-Te estás acostando con el profesor Harris.

-Sí.

-Él quiere conocerte.

-Sí

-Tienes sentimientos...

-Si.

-No es un mafioso.

APETENCIADonde viven las historias. Descúbrelo ahora