Connecticut
Ava
Mi luna de miel junto a Edan ha sido extremadamente buena, estuvimos recorriendo prácticamente todo Europa solo él y yo. Había ido antes, pero ir en plan pareja ha sido lo mejor, interminables sesiones de excursiones, sexo, caricias y prácticamente vivimos una experiencia inolvidable, Edan se ha encargado de que todo fuera viento en pompa, me complacía en absolutamente todo. Hasta me plantee la idea de nunca volver a Connecticut pero sin duda era tiempo de salir de nuestra burbuja para regresar a la normalidad.
Llevábamos pocos días de vuelta y nos sentíamos destruidos por el jet lag y la diferencia de seis horas. Edan estaba poniéndose al corriente con la empresa y yo tenía que organizar todo para el nuevo curso que comenzaba mañana.
Creería que nuestra rutina cambiaría al estar casados pero técnicamente lo único que ha cambiado es la definición de nosotros y me gusta, Edan no me trata como si fuera una muñeca de porcelana o me retiene, me deja ser libre en lo que quiero hacer y esta ahí apoyándome a cada nada, me conoce y sabe que necesito mi tiempo y espacio por lo que él también le agrada nuestra relación. Claro que disfrutamos el mayor tiempo posible juntos pero cada uno sigue siendo independiente.
Acomodo mi maleta cuando él se queda observándome en el umbral de la habitación.
-Deberías sacar una foto, así la babeas cuando quieras.- Sonrío sin verlo.
-¿Puede ser desnuda?, Así "babear" no sería lo único que haría con ella.
Mis mejillas se sonrojan un poco y no puedo controlar la risa que se me escapa. Se acerca y siento su cuerpo pegarse al mío y sus brazos rodearme mientras besa ligeramente mi cuello dejando un rastro que me estremece.
-Debo dejar todo listo para la universidad.- Suspiro cuando atrapa con su boca el lóbulo de mi oreja.
-Mhmm...
-Edan.
-Ava...
Me separo volteando y besándolo con ganas como si fuera la primera vez que lo beso y eso me recuerda a la primera vez que lo vi y las ganas que tenia de lanzarme a su boca. Me separo y suelta un gruñido tierno frunciendo las cejas.
-Mañana regresamos a la universidad.
-¿Y?.
-Es increíble todo lo que nos ocurrió en un año, sinceramente me esperaba de todo menos esto.
-¿Debería ofenderme? Porque también de lejos me imaginaba de esta forma.- Se encoge de hombros.
-Te creí un asqueroso viejo barrigón.
Suelta una carcajada grave.
-¿Ah si?, ¿Y que más paso por tu loca cabeza cuando hablamos?.- Sonríe curioso.
-Que eras un idiota.- Se ríe aún más de mi.- ¡No te rías! Fuiste un idiota prepotente.
Niega y me recorre la cara con los ojos.
-Eso fue porque apareciste sin decir nada y sin moverte, no diste la mejor impresión.- Lo empujo ofendida.- Calma, que no duró mucho esa impresión cuando abriste esa boquita deliciosa.
-¿Y qué pensaste?.
-Que ibas a ser mi mujer.
-Mentiroso.- Ni él se lo cree, pero le levanto una ceja y sonrío traviesa mordiéndome el labio inferior.- Yo quería follarte.
Mi confesión lo deja sin habla y quiere mantener su postura seria pero no lo logra cuando sonríe soltando la risa.
-Bueno ya que nos estamos sincerando...-Acaricia mi muslo desnudo.- Imaginé estas piernas rodeando mi cintura mientras te empotraba contra el escritorio.
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APETENCIA
RomanceAva Collins Baker. Belleza, sensualidad, inteligencia, simpatía, carisma. Todo hecho mujer. No teme en abastecerse de satisfacción y deseo. Control, perversidad, autoestima, ella sabe lo que vale y lo que está dispuesta a ofrecer. Sabe que no po...