APETENCIA

Extra 3

Connecticut

Cassie

-No puedes decir eso a una chica a menos que quieras morir virgen y soltero.

Dean me veía con fastidio mientras pasábamos por el jardín de la entrada para llegar a casa, ambos autos de papá y mamá estaban estacionados fuera.

-Tú como sabes que nunca he tenido novia.- Lo volteo a ver furiosa mientras sonreía de lado haciéndose marcar su hoyuelo.

-Eres asqueroso.

-Tu eras la que estaba preocupada por mis relaciones.- Me da un leve empujón.- Lo aprecio mucho princesa pero no hace falta.

-¿Y por qué no me lo dijiste?.

-No tengo porque decirte todo...- Se encoge de hombros y mi boca se abre de par en par.

-¡Yo te he contado todo de mi!.

-Y es espeluznante.

-¡Dean!.

-Vale es mentira eso de la novia, pero debiste ver tu cara.

Lo fulmino con la mirada cuando abro la puerta principal, dejamos nuestras maletas en el recibidor y entramos en casa discutiendo hasta que encontramos una imagen que nos dejará traumados por muchos años.

Mamá encima del regazo de papá colgada de su cuello mientras se besaban riendo como adolescentes. Era increíble como a pesar de los años no dejaban de actuar como si estuvieran viviendo el inicio de una relación.

Al principio cuando era pequeña era tierno cuando los veía juntos hasta que fui mayor y entendí que muchas veces esos toqueteos, miraditas eran con otra intención y sentía escalofrío de solo pensar en mis padres haciendo eso...

-¡Tienen una habitación!.- Grito y hago una mueca.

-Y pensaban que yo era el puberto.- Dean sonríe.

-¡Mis bebés!.- Mamá salta del regazo de papá y nos abraza con fuerza a ambos.- Los echamos de menos.

-Ajá.- Papá se enfada por haber interrumpido el momento pero aún así se acerca.

-¿Cómo les fue con Isa?.

Cada cierto tiempo pasamos un fin de semana en Nueva York junto a la hermana de mamá, tío Erick, Drew y la pequeña Ally.

Le contamos por encima cómo nos fue en lo que Dean busca algo que comer y papá se acerca a mi a envolverme en sus brazos y besar mi coronilla.

-¿Como estás princesa?.

-Bien papi.

-¿Por qué regresaron tan pronto?.- Sonríe burlón y yo niego con la cabeza.

-Son peores que Dean y yo juntos.

Mis padres siempre nos han consentido en cuestión de darnos amor y pasar tiempo con nosotros, nos dan lo mejor y sabemos que siempre que los necesitamos de alguna u otra forma están ahí para nosotros. Nos encanta aunque a veces son bastante empalagosos.

Subo a mi habitación dejando mis cosas y de reojo veo a Kalen tumbado en su habitación así que me apresuro a lanzar todo y correr a recostarme a su lado.

-Princesa.- me estruja la mejilla bajando el móvil.

-Por qué estás aquí enclaustrado.- Río.

Kalen pasa mucho tiempo en casa y ha crecido con nosotros como un hermano mayor y un hijo más para mis padres.

-No creí que fuera muy sensato abandonar la parte de arriba cuando esos dos adolescentes estaban abajo solos comiéndose el uno al otro.

-Hiciste bien, yo tuve que encontrarme con una desagradable escena.