Connecticut
Connor
-Es tarde.- Me levanto apresurado ya que no falta mucho para que empiece mi primera clase.
Tomo una ducha rápida caliente, envuelvo mi cintura en una toalla y salgo de nuevo observando a la mujer desnuda que se esconde bajo las sábanas blancas de mi habitación.
¿Aún no se ha ido? Niego acercándome a la orilla para descubrirla.
Me sonríe pícara tratando de acomodarse para volver a taparse y es por eso que no dejo que se queden más de la cuenta.
-Es hora, tengo que dar clase y tú lo más seguro es que tengas una clase también.- Paciencia, debo tener paciencia.
-Podríamos saltarnos el día de hoy y quedarnos a seguir divirtiéndonos.
-Estoy supliendo a un profesor, no puedo faltar a mis clases.
-Me gustaría que me dieras alguna clase, sería divertido.- Me sonríe coqueta pero ignoro su insinuación.
-¿Si entiendes que no habrá próxima vez Micaela?.- volteo enarcando una ceja pero ella solo me ve comiéndome con los ojos, ni si quiera me ve a la cara, ve mi torso desnudo.
-Es Mica, ¿Y por qué no? La pasamos bien anoche.
-No se repetirá porque no es correcto que folle con una alumna.- Si, claramente es una excusa para no volver a repetir.
No es que sea un mujeriego pero no pienso ofrecerle nada más que una noche, así que es mejor que lo entienda y no se haga otras ideas. Hay que ser honestos y una persona sabe perfectamente cuando quiere algo más que sexo y cuando lo único que quieres es satisfacerte sexualmente y anoche cuando Micaela me incitó no la vi más que para satisfacer esa necesidad y lo había comprendido supuestamente pero ahora veo que no y no quiero drama por esto.
Micaela hace pucheros y trata de alegar mientras me visto pero al final se resigna y comienza a vestirse. Es incómoda esta parte y por lo general trato de evitarla la mayoría de veces cuando no me interesan más que una vez.
-La pase muy bien Connor, ojalá cambies de parecer y volvamos a repetirlo.- Es lo último que me dice cuando nos separamos y toma su rumbo, se gira a guiñarme el ojo y lo único que puedo hacer es asentir y darle una media sonrisa, no pretendo engañarla y tampoco que se vuelva un problema. Apenas llevo días en esta nueva universidad y ya cometí una gran falta.
Llego a la universidad a tiempo dejando mi auto en el estacionamiento y cuando estoy a punto de bajar una persona sale de su auto al frente de donde yo me estacione. Puedo reconocerla a kilómetros, su figura, su aura sexy y su belleza natural perfectamente combinadas.
Al observarla es muy difícil despegar la vista de su persona, más cuando llega provocando a media universidad con unos vaqueros negros de piel que se le ajustan perfectos, se le marca Perfecto el culo y trae esa sonrisa junto a esa seguridad que la hace ver jodidamente sexy, En realidad con cualquier cosa luce sexy en si ya es hermosa pero tiene algo especial que la hace ver diferente y cada vez que la veo podría arrancarle la ropa un millón de veces.
Cuando la vi entrando en ese club se me hizo imposible apartarla de mi vista y con solo verla la quise follar, pero la forma en que me sedujo moviendo sus caderas y rozándose con mi miembro y para finalizar con ese beso candente me termino por embelesar, pero después de no poderme resistir besándola de nuevo y embriagándome de esos suaves labios desapareció y no la vi más por el lugar. Traté de preguntar por ella pero nadie me dio respuesta, regrese días después pero no la encontré, hablé con el maniático dueño del club pero solo hizo algunas burlas para terminar de darme por mi lado.
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APETENCIA
RomanceAva Collins Baker. Belleza, sensualidad, inteligencia, simpatía, carisma. Todo hecho mujer. No teme en abastecerse de satisfacción y deseo. Control, perversidad, autoestima, ella sabe lo que vale y lo que está dispuesta a ofrecer. Sabe que no po...