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Maratón 2/2.

Había pasado todo el fin de semana, y por fin había iniciado la siguiente semana

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Había pasado todo el fin de semana, y por fin había iniciado la siguiente semana. Aún entonces, Bam todavía no se había atrevido a cruzar una palabra con el peliazul. Siempre que lo veía desde lejos, se ponía terriblemente nervioso y huía.

La única vez que estuvo cerca de hablarle, fue cuando entregó su ropa ya limpia a Leesso, para que se la entregara a Khun -porque sí, él mismo había lavado la ropa que Khun usó en el evento, con suerte pudo sacar la mancha de vino de la camisa-. Pero aún así, huyó antes de poder cruzar siquiera una mirada con él.

Al principio, Bam creyó que él era el que había estado evitando al peliazul. Pero luego se dio cuenta de que realmente, era Khun quién lo había estado evitando a él. El lunes, luego del almuerzo, intentó hablar con él. Ni siquiera estaba seguro de qué decirle, sólo iba a explicarle que iba a intentar aclarar sus pensamientos antes de responderle. Pero no pudo hacerlo, porque el ojizarco se la pasó escribiendo algo en su teléfono, durante todo el almuerzo. Y luego de que la hora del almuerzo terminó, se levantó de su asiento, miró a Bam por un fugaz momento y salió del comedor, apresurado.

Así fue por varios días, hasta que llegó de nuevo el fin de semana. Había pasado ya una semana desde que se habían besado, y ahora ni siquiera cruzaban palabra. Todos los del grupo habían notado la tensión incómoda entre ellos, pero nadie se había atrevido a preguntar qué pasaba, ni siquiera Rak, quién los observaba en silencio.

Cuando llegó el domingo, Bam se vio obligado a salir de su dormitorio para encontrarse con Endorssi en la cafetería. Habían quedado en verse, aunque Bam ni siquiera sabía para qué.

Cuando llegó, la vio sentada en uno de los sillones de la esquina. Parecía estar leyendo algo en su teléfono, pero cuando el castaño llegó y se sentó en el sillón frente a ella, Endorssi finalmente apartó su mirada del teléfono y se centró en él.

Ella suspiró, tomando un sorbo del café que había puesto sobre la mesa frente a ellos. Parecía silenciosamente preocupada. Pero pasó un largo rato hasta que finalmente habló.

—Ustedes son unos idiotas, de verdad.— Comentó ella, negando con su cabeza con desaprobación.

—¿Qué?— Preguntó Bam, desconcertado.

—Tú y Khun. Realmente no sé qué pasa entre ustedes, llevan un largo rato comportándose raro y ahora, de repente dejan de hablar totalmente.— La castaña suspiró, cruzándose de brazos.— ¿Se pelearon, no es así? No hacen más que preocuparnos a todos nosotros.

—Nosotros no hemos peleado...

Endorssi lo miró en silencio, como analizando sus palabras.

—Entonces, ¿Qué es lo que pasa?

—No ha pasado nada.— Murmuró él, suspirando.

—Sí, claro. ¿Realmente te atreves a mentirme justamente a mi, que te he visto salir corriendo siempre que ves a Khun desde lejos?

ʸᵒᵘ ᵃʳᵉ ᵐʸ ᵗʳᵘᵉ ˢᵗᵃʳ | ᴷʰᵘⁿ ˣ ᴮᵃᵐDonde viven las historias. Descúbrelo ahora