LA OBSESIÓN DE MI JEFE

capítulo 16

LA OBSESIÓN DE MI JEFE
Autor: Laura Navarro

          Capitulo 16

El día lunes llegué como siempre a mi oficina, por más que Alejandro intentaba hablar conmigo, yo sólo hablaba con él por cosas de trabajo... en ocasiones llegaba antes que yo y me dejaba una rosa en mi escritorio..

Esas rosas yo las tiraba en la basura... durante las dos semanas que faltaban para que mi contrato se terminara, yo sólo estaba cerca de él cuado tenía que ayudarlo hacer algunos planos.

Un día antes de que mi contrato terminara yo le llevé los documentos de todos los que renovarían contrato para que él los firmara pero el mío no estaba ahí.

En lugar de mi nuevo contrato estaba mi carta de renuncia..

—¡Jazmín puedes venir a mi oficina ahora mismo!. —Me dijo por el comunicador... ya no me decía señorita Guzmán ahora me hablaba por mi nombre—

—¡Ahora voy señor!

Me levanté de mi silla, tomé mi libreta de apuntes y me fuí a su oficina, ni siquiera toqué cuando me dijo que pasara.

—¿Qué se le ofrece señor?. —Le pregunté acercándome a su escritorio—

—¿Porqué en vez de tener la renovación de tu contrato tengo sobre mi escritorio tu carta de renuncia?. —Me dijo al mismo tiempo que se paró y rodeó su escritorio para pararse frente a mí—

—¡Porqué ya no trabajaré para usted señor!.

Sentí como me agarró y me jaló para dejarme muy pegada a él... intenté alejarme pero él me tenía abrazada de mi cintura.

—¿Porqué estas empeñada en alejarte de mí?... ¿Porqué me lastimas de esta manera?... ¡Qué no te das cuenta que estoy enamorado de ti Jazmín!.

—¡Pero yo no lo amo!... ¿Porqué dice que me ama cuando va ha ver cada fin de semana a esa mujer con la que se acostó a ese Club?.

Me soltó y miré como le dio un golpe al escritorio.

—¡Se que te amo y estoy completamente seguro de mis sentimientos!... ¿Y porqué te molesta que me acostara con otra mujer si tú misma me dijiste que no querías ninguna relación sería conmigo?... Sí, yo me acosté esa noche con esa mujer y también es verdad que voy a verla cada fin de semana... ¿Y sabes porque lo hago?... Porque tu nunca quieres pasar un noche conmigo haciendo el amor... ¡Pero si te acuestas con tu amigo y yo sólo debo de tragarme el coraje y los celos!.

Tragué saliva y sentí un nudo en la garganta al verlo con sus ojos llenos de lágrimas.

—¡Yo sólo vine hoy a trabajar porque era mi último día de mi contrato y no quería irme sin decirle nada!... —Me di la media vuelta— Y si ya no me quiere para otra cosa señor me voy a terminar mi trabajo.

Regresé a mi oficina y me puse a terminar todo el trabajo que tenía, no quería irme sin dejar todo en orden... cuando terminé ya casi era la hora de mi salida y fui a dejarle unos proyectos para que los firmara.

Esta vez tuve que tocar a su puerta porque no me dijo que pasara como siempre lo hacía... ¡No lo escuché decir que pasara!.

Abrí la puerta y él no estaba ahí... dejé los papeles sobre el escritorio y me fui a mi casa... no sabía porque me dolía... se suponía que debería sentirme feliz pero no era así.

Al día siguiente cuando fui a recoger mis cosas y a firmar mi renuncia, él no fue a la oficina, Javier el guardia de seguridad me dijo que no fue al trabajo.

Abandoné ese edificio sin verlo... yo seguía trabajando en el Club los fines de semana pero ese hombre ya no iba a ver bailar a Esmeralda.

Cuando estaba en mi camerino después de bailar miré entre mis cosas la invitación que me había dado  el Príncipe Javier para la fiesta que quería que lo acompañara.