Lena y Kara jamás han sido elegidas por voluntad propia, jamás han sido amadas como se merecen, jamás se han sentido plenas, y en un mundo donde la maldad vuela, su caminos se cruzan, destinos que pueden o no estar afianzados, y una decisión que pue...
Y pues... aquí vamos. Alguna vez leí o escuché que cuando va a suceder algo importante en tu vida, presientes si será para bien o para mal, pues lo único que presiento es que me mandara a volar más veces de las necesarias antes de darme una oportunidad de hablar.
Mientras entraba en Zor-El Danvers Corporation, no podía dejar de jugar con las manos de los nervios, sin ningún problema me dejaron pasar, sin ninguna autorización... mientras yo le negué todo lugar que no estuviera en el contrato, mal comienzo. Mientras avanzaba planeaba como empezar a explicar, iba tan ensimismada que ni cuenta me di que llegaba a su oficina.
¿Está Kara? - dije tratando de ocultar el nerviosismo.
Si señorita Luthor, puede pasar si lo desea - dijo ella.
No señorita, desde que fusionaron los sectores de sus empresas, la señorita Danvers dejo la orden de que tiene acceso ilimitado a todo el edificio cuando lo desee - ¿ella si me dejaba pasear por donde quisiera?.
Gracias señorita - le dije y comencé a caminar, entre sin tocar por miedo a que preguntara quién era y me cerrará la puerta en la cara.
Apenas entró, veo a Kara en su escritorio revisando papeles, ni con el ruido de la puerta levanto la cabeza, y el silencio reino hasta que dijo.
¿Qué ocurre... - no terminó de hablar ya que levantó su mirada y me vio a mi - señorita Luthor... ¿qué se le ofrece?.
Kara yo - fueron las únicas palabras que alcance a decir cuando me interrumpió.
Señorita Danvers o señorita Zor-El para usted señorita Luthor - me dijo de manera tajante, y la entendía, no por ello me molestaba menos.
¿Podemos hablar? - le dije tratando de ser firme.
¿Es relacionado al trabajo? - negué - ¿a las empresas? - negué - ¿algún viaje o problema? - negué nuevamente - entonces no hay nada de que hablar señorita Luthor. - me dijo con un tono que jamás le oí.
Es de nosotras - le dije antes de que me echara.
No hay un nosotras señorita Luthor - fría, cortante, y la misma frase que inició todo. - solo somos socias.
¿Eso es lo que crees? - le dije molesta.
En absoluto - respondió inmediatamente.
¿Por eso me esperaste tanto en la banca ayer? - dije desesperada, necesitaba que me diera chance. La sorpresa dio paso al dolor y luego a la rabia reflejada en su mirada.
El pasado es pasado - dijo.
Necesito hablar contigo Kara - le dije y mencioné su nombre solo para molestarla.
Ya se lo dije, no tenemos nada de que hablar - dijo tomando el teléfono del escritorio - ¿necesita algo más o debo llamar a seguridad para que la saqué?.
Haz lo que quieras - dije frustrada - pero escúchame al menos.
No veo porque - me dijo encogiendose de hombros.
Kara yo - le dije y la vi marcar su teléfono, para luego escuchar.
Kelly, si, revoca todo permiso de la señorita Luthor en la empresa - lo decía mientras me miraba a los ojos - hazle valer solo los sectores que quedaron en el contrato - se quedo en silencio escuchando lo que le decía su secretaria, mientras yo me tragaba el nudo que se me empezó a formar en mi garganta - si algo más, si en 2 minutos la señorita Luthor no sale de mi oficina, envía a seguridad por ella - tuve que desviar la mirada para poder tragarme las lágrimas. - si solo eso Kelly, gracias.
¿Así serán las cosas, no? - le dije triste, ni se inmuto, era como que si mi presencia la indignara, así que decidí decir lo que vine a decir y largarme, porque lo único que tenía claro, es que definitivamente no me quiere aquí - ayer fui al parque - la mire esperando alguna reacción, pero no hubo nada y continúe - decidí ir a explicarte lo que sentía, quería pedirte que fueras paciente conmigo y decirte que aprecié los detalles que tuviste conmigo, te mire durante horas, mientras preparaba un discurso para que me pudieras entender y dejarte claro que quiero estar contigo, demostrarte que si soy suficiente y que puedo esforzarme en ser digna de ti - lo único que hizo fue apretar el lápiz, pero seguía indiferente - para cuando me dio la valentía y fui capaz de apartar los miedos despertados durante estas 2 semanas por mi pasado, fui a buscarte a la banca, y no te encontré - no quería que mi voz sonará rota, pero prácticamente estaba hecha pedazos - te busque por todo el parque durante una hora, fui a tu casa para que no pensarás que no estuve ahí, pero no estabas allí, hasta que pensé que podrías estar con Alex, pero debido a la hora sabía que por sus políticas no me dejarían entrar - seguía mirándola pero jamás me dirigió la mirada - espere a que fuera una hora prudente para venir a buscarte - iba a continuar, cuando entro seguridad a su despacho.
¿Quiere que retiremos a la señorita Luthor, señorita Danvers? - dijo uno de ellos, eran 5, cual criminal, todos estábamos esperando a lo que tenía que decir, pero más me derrumbo cuando escuche.
Proceda - inexpresivo de Kara.
Mientras salía escoltada por seguridad de la oficina de ella, me pellizcaba un poco el brazo para no ponerme a llorar aquí, me sentía humillada, y quizás lo merecía, después de todo, yo la llevé al límite.
¡Hey! - Escuchamos, pero yo ya no volteé, seguramente sería una instrucción de dejarme lo más lejos posible. No quería mirar a nadie, así que solo rogué porque llegará el ascensor. Hasta que oí cerca de mi oído - hey tú.- sentí que me volteaba lentamente desde mi brazo. Y ahí estaba ella, con su estúpida sonrisa de cachorro.
¿Qué q... - sus labios se juntaron con los míos, mientras una de sus manos me tomó de la cabeza presionandome para que no pudiera escapar, con la otra me tenía de la cintura, mientras que nuestros labios encajaban de manera tan perfecta, como si fueramos hechas la una para la otra, me sentía débil y no pude evitar soltar lo que tanto aguante, las lágrimas hicieron que el beso cada vez de fuera intensificando un poco más, sentí como su lengua entraba sin contemplaciones a mi boca, jugueteando con la mía, mientras yo la tomaba de su cintura pegándola más a mi si fuera posible... No fue hasta que escuchamos un carraspeo que nos empezamos a detener.
¿Necesito reagendarle la agenda de hoy señorita Danvers? - dijo Kelly con una sonrisa picarona.
Por supuesto - dijo Kara volviendo a besarme más calmada.
Mientras nos subíamos al ascensor, no pude aguantar el deseo de besarla nuevamente, tratando de controlarme para poder llevarla a casa, hasta que ella nos separó y mirándome a los ojos dijo.
Eres más que suficiente Lena, no dejes que nadie te haga creer lo contrario - no pude evitar dejar caer unas lágrimas mientras Kara me llenaba la cara de besos.
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