Lost my voice (Joana Bianchi)

Capitulo 3: Ya te tocará...

Me siento con mis amigos a comernos nuestros sandwichs mientras hablamos de cualquier tontería. Es lo bueno que tiene tener un grupo de amigos como ellos, se puede hablar de cualquier cosa, da lo mismo lo que sea, si total, Elys y Chesko siempre terminan discutiendo.

E- Che que te estoy diciendo que el padre de Nemo buscando a Nemo tiene mucho más sentido que el pelotudo este buscando pokemones...
Ch- ¿Pero qué decís?- exclama insultado- buscar pokemones tiene más sentido...
E- Chesko centráte que los pokemones no existen...
Ch- Nemo tampoco porque está muerto...
J- Che que fuerte...- le interrumpo divertida- que cruel te quedó eso.
Ch- Es que va a venir esta mina ahora a decirnos que Pokémon es una mierda...
E- Pues sí que lo es...
Ch- Mirá que a un padre se le pierde un hijo en un Centro Comercial y te juro que si le ponen a elegir entre encontrar a su hijo o a un pokemón, te digo yo que el padre llega a la casa con Picachu...
J- Che apoyo los pokemones pero recordáme que nunca te deje tener hijos...- río.
E- Menos mal que no voy a ser yo la madre de tu hijo...- se cruza de brazos- pero bueno, sos muy inmaduro aún...

Dios, ¿cuándo acabará esta tortura? Mirá que discusión más tonta y sin sentido.

Ch- Perdón perdón señora madurez...- se echa hacia atrás en la silla sarcástico- y para tu información, ni loco me caso y tengo hijos yo con vos...
J- Bueno bueno, el futuro es muy incierto ¿eh?- intervengo burlona.
_¡Calláte!- me gritan los dos y lo hago.

Panda de pelotudos. Me suena el móvil, lo saco de mi bolsillo y es un mensaje de mi abuela Flor.

Adiviná quién hizo natilla de chocolate para su nieta :)

Sonrío al leer el mensaje. Me levanto de la mesa y mis amigos me observan confusos.

E- ¿A dónde vas Joa?
J- A casa de mis abuelos Flor y Benja...
Ch- Pero tenemos clases ahora che...
J- Digan que me siento mal y ya está...- les doy un abrazo grupal- a la hora de salida vengo a por ustedes para irnos a casa de mi padre a ver la peli y eso...

Salgo de la cafetería, de la escuela y detengo el primer bus que me deja cerca de casa de mis abuelos. No les veo desde hace unos días. Me da penita con ellos, o sea, casi siempre están solos, mi madre y yo les hacemos compañía de vez en cuando pero desde que comencé el instituto no tengo casi tiempo para ir uno que otro día. Antes cuando era pequeña si que les visitaba, me pasaba días y días con ellos.
Pero bueno, es que todo ha cambiado y cuando aquello no tenía que repartirme para quedarme con mi madre y mi padre.

Toco el timbre de la casa de mis abuelos. Mi abuela abre la puerta al instante.

F- Che, ¿qué hacés acá?- me abraza fuerte sonriendo y le correspondo.
J- Mi abuela me envió un mensaje diciéndome de que había hecho natillas y no me podía resistir...
F- ¿Solo venís por las natillas?- hace pucheros.
J- Claro que no abuela...- sonrío- ¿y el abuelo?
F- En el sofá...- señala y le veo ahí.

Entro en casa y voy al sofá a ver a mi abuelo, está acostado, durmiendo o con los ojos cerrados. Yo como siempre, me acerco a sus pies y deslizo mis uñas por ellos para hacerle cosquillas.

B- Che no...- abre los ojos al instante y me mira divertido con advertencia.
J- Vengo y vos durmiendo... pésimo servicio ¿eh?- hago pucheros.
B- Vení dale...- me extiende los brazos.

No me lo pienso dos veces para acostarme a su lado en el sofá, me abraza fuerte y me llena la frente de besos. Como quiero yo a estos dos viejos.

B- ¿Y la escuela qué?
J- Bien...- alzo los hombros- me he fugado para venir...
B- Que malvada sos...- reímos malvados.

Le amo, le amo con la vida a estos dos de verdad. Son mis abuelos preferidos y como soy su única nieta, no dejan de hacerme ver lo importante que soy para ellos.

B- Flor Flor...- llama a mi abuela cuando sale de la cocina con las natillas para llevarlas a la mesa del salón.
F- Decime cielo...- se detiene a mirarle.
B- ¿A qué no sabés quiénes somos?

Mi abuela me mira a mi, luego a él y alza los hombros sin entender.

B- Somos Los Acosta... dos porque nos apellidamos Acosta pero estamos acostados...
J- Y además somos dos...- digo divertida.
B- También...

Me echo a reír junto con mi abuelo. Es más tonto, es lo más, es el mejor.

F- Que tonto...- ríe- dale vamos a comernos las natillas...

Mi abuela sigue a la mesa y yo y mi abuelo nos quedamos peleándonos para ver quién se levanta primero. Le dejo a él ganar porque bueno, ya ganaré yo en que mi abuela me dejará repetir natilla y a él no, básicamente porque no le gusta tanto como a mi.

F- ¿Y cómo te va en la escuela hija?- pregunta mientras comemos.
J- Bien abue...
B- Se ha escapado para venir...- confiesa.
J- Che...- protesto mirándole mientras él se ríe, le pellizco suavecito en la pierna y pega un respingo.
F- Joa no hagás esas cosas porque luego te regañan...
J- No me pasará nada, además de que luego de cómo están las cosas en casa prefiero salir y venir a veros, vivo de la casa a la escuela y de la escuela a la casa, y así de verdad que no puedo vivir...
F- Está bien, tenés razón...- miro a mi abuelo y le saco la lengua- ¿y cómo está tu madre y todo por casa?
J- Mi madre normal y por casa, pues una mierda abuela, todos los días prácticamente llega borracho y ni dormir deja a uno...- resoplo- te juro que no puedo más, no soporto a Peter y cada vez que le veo no puedo evitar pensar en dónde mierdas tenía la cabeza mi madre cuando se metió con él y dejó a mi padre...
F- Hija tu padre es el mejor hombre con el que Miranda estará jamás...- asiento con la cabeza- pero ella ya no estaba bien con él y ocurrió esto, Peter tampoco me da buena espina pero ¿qué querés? Es su vida.
J- Lo mandó todo a la mierda por un tipo que no vale nada...- suspiro triste- no le importo, si lo hiciese jamás hubiese arruinado nuestra familia...
F- El amor es así cielo...- le miro como si estuviese loca- te hace cometer estas locuras...
J- El amor te vuelve imbécil si te dejás, yo nunca he cometido ninguna locura...
B- Porque aún no te habés enamorado...- le miro y él alza los hombros- dejá que llegue la persona que te remueva el suelo y te digo yo si vos no vas a cometer locuras también...
F- Ya te tocará...
J- Me niego...

Mis abuelos se miran y niegan con la cabeza divertidos. Jamás, jamás dejaré que alguien me haga perder la cabeza. Nadie tendrá jamás ese poder sobre mi, absolutamente nadie.