Lost my voice (Joana Bianchi)

Capitulo 67: Le debo la vida...

Conduzco con cuidado, pues no me puedo arriesgar a que me pille la policía, no tengo licencia de conducción aún. Me dirijo exactamente hacia la ubicación que contenía el mensaje que recibí. Laura che, me alegra saber que estás bien. Giro a la derecha y me encuentro exactamente en la ubicación que recibí. Las luces del coche alumbran la calle.

J- Laura...- le veo sentada y recostada a una farola apagada.

Me bajo rápidamente del coche y corro a ella.

J- ¿Laura qué te ha pasado?

Se me acelera el corazón al ver su rostro ensangrentado, sus nudillos llenos de sangre y su mano rodear su abdomen. Ella me mira fijamente y sonríe. Está borracha, ha bebido. Está en muy malas condiciones y me duele mucho verle así.

J- Vamos, te llevaré a un hospital...- intento levantarle.
L- No...- me agarra las manos impidiendo que le levante- estoy bien...
J- ¿Cómo vas a estar bien Laura?- mi voz se alza por la desesperación- miráte...
L- Habés venido...- esboza una sonrisa tierna.
J- Claro que he venido Laura...- le tomo de la mano y siento deseos de llorar- ¿qué ha pasado? ¿habés bebido?

Asiente con la cabeza e intenta sentarse mejor en el suelo, hace una mueca de dolor y se agarra fuerte el abdomen.

L- Pensé que no vendrías...
J- No podía dejarte acá...- oculto mis deseos de llorar- todos te están esperando, están desesperados por verte...
L- ¿Y vos?- le miro apretando los labios- ¿estabas desesperada por verme?
J- Claro...- le acaricio la mejilla con cuidado y ternura.

Ella deja su mano encima de la mía, acaricia mi dorso con la yema de sus dedos mientras me observa con ternura a los ojos, ese brillo que aparece siempre que me mira está ahí. Dios. Miro al suelo sintiéndome muy culpable. Sus ojos, esos ojos que me encantan, yo les he hecho llorar, jamás me lo perdonaré.

J- No me mirés así Lau...
L- ¿Por qué? Se supone que no sentís ya nada por mi ¿no?- su voz se quiebra- fue lo que me dijiste...
J- Sé lo que te dije...- suspiro mordiéndome el labio- recuerdo muy bien lo que te dije, no lo olvidaré jamás...
L- ¿Por qué me dejaste?

Le miro a los ojos. Me dejo caer sentada a su lado. Respiro profundo mirando el cielo. La noche no es del todo oscura, pero mi vida si, mi cabeza sí que lo es y yo debo mantener mi decisión aunque lo que más desee sea abrazarle, pedirle que me perdone y besarle tanto que abarque todos los deseos que tengo de hacerlo y decirle que le amo. No, todo debe seguir igual.

J- No soy buena para vos Lau...
L- Sos lo mejor que me ha pasado en toda mi vida Joabi...- me toma de la mano pero no despega la cabeza de la farola- sos la única persona que me hace despertar con una sonrisa, lo mejor que me ha pasado es haber venido hasta acá y conocerles, tanto a Chesko, como a Elysgo, y mucho más a vos...
J- No soy la misma Joana que conociste ese día...
L- Yo te sigo amando igual...- entrelaza sus dedos con los míos, solloza- no puedo soportar que me digás que ya no me querés...
J- Laura...

Me mira, en sus ojos puedo ver que espera que le diga toda la verdad o que le convenza de que no le quiero, pero eso no lo puedo hacer, no puedo convencerle de una mentira. Yo le amo, y no creo que eso vaya a dejar de ser así por mucho que le aleje de mi. Lo siento de verdad, pero las cosas tienen que ser así. Mi corazón se destroza cada vez más.

J- Te llevaré a casa... es muy tarde ya...

Me levanto del suelo, le extiendo la mano, Las lágrimas se deslizan por sus mejillas llenas de sangre por haberse restregado con la sangre de su labio, su ceja y su nariz. Se seca el rostro con sus manos y agarra las mías. Le ayudo a levantarse percatándome de que le duele el abdomen y que sus muecas de dolor no sean tan intensas. Paso su brazo por mis hombros y en ese momento siento que podría mandar todo a la mierda. Su rostro queda pegado al mío, mi mirada baja inconscientemente a sus labios. Su respiración choca con mi nariz, pero mis ojos no dejan de observar su boca. Cuánto le extraño, cuanto daría por volver a besarle y volver a esos días en que mi vida era mucho más sencilla que ahora. Ojalá pudiese ser la persona que ella merece, ojalá mi vida no estuviese en estos momentos llena de mierdas. Acerca su rostro al mío con intenciones de hacer eso que más deseo, pero si cruzara esa linea, jamás ella sería feliz.

J- Vamos al coche...

Laura cierra los ojos con decepción y tristeza, y yo hago como si ella no despertase nada en mi. Le llevo al coche, le subo en el asiento del copiloto y me voy a mi asiento. Laura recoge sus piernas encima del asiento y carga su cabeza a la ventanilla. Joana se fuerte, lo hacés por su bien.  Acelero y conduzco fingiendo normalidad, cómo si tenerle tan cerca y no besarle fuese algo que pudiese soportar. Estaciono el coche enfrente de su casa. Me bajo del coche y le ayudo a ella a bajarse.

M- ¡Laura!- exclama saliendo.
R- ¿Hija qué te ha pasado?

Los dos corren desesperados hacia Laura. Ella no se mueve de mi lado. Elys y Chesko también salen y a pesar de ver su estado, sonríen porque ya ha aparecido. Sus padres le abrazan fuerte.

R- ¿Qué te ha pasado cielo? ¿qué le habés hecho?- me mira furioso.
L- Ella no me hizo nada... me pelee en un bar...- responde restándole importancia.
M- Gracias a Dios que ya estás acá...- le besa en la frente y le vuelve a abrazar- vamos a dentro a curarte esas heridas...
L- Chicos gracias por venir...- abraza a nuestros amigos separándose de sus padres.
E- Estábamos muy preocupados por vos...
Ch- Casi nos da algo...- le abraza fuerte- gracias a Dios que Joana te encontró...
L- Si...- me mira y esboza una sonrisa- le debo la vida...

Me muero del amor de solo verle sonreírme. Yo sí que le debo la vida, y es que desearía poder tener otra para pasarla a su lado. Pero en esta todo está jodido, en esta solo podría hacerle sufrir y no es lo que quiero, quiero hacerla feliz y cumplir todos esos planes que una vez hicimos, realizar cada una de las ilusiones que tuvimos. No sé en la otra vida, pero en esta eso es completamente imposible.