Lost my voice (Joana Bianchi)

Capitulo 5: ¿Sos nueva?

Lunes, ya ha acabado el fin de semana. Dios, lo que se tarda para llegar y lo rápido que se va, es como el sueldo, se va volando. Bueno, después de unos días felices, llegan nuevamente los amargados en casa con Peter. Mi madre debió de haber estado loca cuando hizo todo esto. Después de Joaquín nadie podía ser mejor, y desde luego que Peter no lo era.

P- ¿Este fin de semana volvés también?- pregunta estacionando el coche en el parking del instituto.
J- Obvio viejo...- sonrío y le doy un beso en la mejilla- nos vemos el Viernes...- asiente con la cabeza, me giro un poco para mirar a mi hermana sentada en el asiento trasero- adiós Karl...
K- Adiós hermanita...- sonríe.

Me bajo del coche y despido a mi padre y mi hermana con una sonrisa y agitando mi mano. Me giro y entro en el instituto. Capto a mis amigos sentados en un banco mirando algo en el teléfono. Me acerco a ellos por detrás y observo también lo que ven en el móvil. Es un vídeo divertido, ellos ríen.

J- Hola...- dejo mis manos en sus hombros y pegan un respingo.
E- Che...- se lleva la mano al pecho y yo río- pelotuda que sos...
J- Gracias linda...- le guiño un ojo divertida- ¿qué hacían?
Ch- Viendo un vídeo gracioso...- bloquea su teléfono y lo guarda en su chaqueta- ¿qué tal el fin de semana?
J- Bárbaro como siempre...- sonrío- Karla me enseñó más de sus artes marciales...
E- Que bueno...
Ch- Me alegra...- sonríe- ¿te querés sentar? No vaya a ser que me hagás una llave de Kunfu Panda...
J- No no, tranqui...- río- me quedo de pie a ver si crezco un poco más...
Ch- Si porque sos una enana...- dice divertido y le observo levantando una ceja- dale Elys, levántate vos también...
E- Imbécil...- rueda los ojos.

Niego con la cabeza riendo. Me tambaleo hacia los lados para hacer un poco de tiempo en lo que ellos terminan de discutir, otra vez. Mi atención, toda mi atención es llamada por una persona. Nunca le había visto antes por acá, es una mina, rubia y muy linda. Los pibes le miran y ella se encoge de hombros tímida. Debe de ser nueva. Se gira enfrente mío y al verle a los ojos siento como mi corazón se acelera.

E- ¡Joana!

Me saca de mis pensamientos pegando un respingo y me giro a mirarle muy exaltada. Ellos me observan confundidos y divertidos a la vez.

Ch- ¿Qué tanto mirabas che?
J- Nada...- me froto la nuca muy confundida con lo de antes. ¿Qué me ha pasado?
E- ¿Estabas mirando a la mina?
J- ¿Qué?- exclamo muy sorprendida con eso que ha dicho- claro que no...
Ch- ¿Te gustó la mina?
J- ¿Pero qué dicen?- me cruzo de brazos- ¿están locos o...?
E- Viene para acá...- me interrumpe.

Me flaquean las piernas de solo escucharle. Elys me observa divertida y Chesko en cambio mira a mis espaldas, supongo que mirando a la mina. ¿Qué me está pasando? ¿Qué putas hago mirando a una mina?

_Hola...- se detiene alguien a mi lado.
_Hola...- responden mis amigos.

Miro a mi lado y siento como se detiene mi corazón y me vuelven a flaquear las piernas al ver a la chica a mi lado. Me tiemblan las manos.

J- Hola...- sonrío y la mina me devuelve el gesto.
_Mi nombre es Laura...
E- Nosotros somos Chesko...- señala a mi amigo- ella es Joana...- me señala a mi- y yo soy Elys...
Ch- ¿Sos nueva?
L- Si...- asiente con la cabeza- soy nueva y bueno, pues obviamente no conozco a nadie, y ustedes son el grupo más chico y no sé, pensé que tal vez me podrían ayudar, no sé, guiarme y mostrarme todo...
E- Si claro che... te podés quedar con nosotros si querés...
Ch- Es más... podés ser nuestra amiga si querés también...- le sonríe.
L- Gracias chicos...- esboza una sonrisa- ¿y vos no hablás?

Me mira y yo lo intento de verdad, pero las palabras no salen de mi boca y tener su mirada clavada fijamente en mis ojos, me desarman y me lo ponen todo mucho más complicado. ¿Pero qué cojones?

E- Si es que ella es muy tímida...- salva mi mejor amiga la situación ganándose que Laura le mire- pero ella también está de acuerdo, ¿verdad Joa?

Asiento con la cabeza porque las palabras siguen sin salir. Mis amigos me observan divertidos. No, ellos no tienen razón, no me gusta la mina, no me gustan las mujeres, obvio no. Suena el timbre para entrar a clases y Elys y yo entramos primero a nuestra aula. Me siento en la silla de mi mesa con Elys, ella arrastra la silla hacia atrás pero en vez de sentarse, se va a la mesa de enfrente y se sienta con Chesko. Laura se sienta a mi lado.

L- Me puedo sentar acá ¿no?- dice encogida de hombros.

No le respondo, me levanto y me paro de la silla y me inclino hacia delante y agarro las hombros de mis amigos.

J- ¿De verdad han hecho eso par de pelotudos?- les susurro en sus oídos.
E- ¿Ahora si que podés hablar?- responde riendo.
Ch- ¿A qué le temés?- le fulmino con la mirada- no te gusta la mina ¿no?
E- Claro que no Chesko, ¿qué decís?- le dice con sarcasmo.

El profesor de matemáticas, Julio, entra en el aula. Me siento otra vez en mi silla mientras observo a mis amigos reír. Par de cabrones, cuando necesito que discutan, se ponen de acuerdo. Me las van a pagar.

L- Si te incomodo me puedo levantar y sentarme en otra silla...- se encoge de hombros.
J- No, no...- le digo en voz baja para que no me escuche el profesor- quedáte, no me incomodás...
L- ¿De verdad?- esboza una sonrisa.
J- De verdad...- sonrío y nos miramos fijamente a los ojos.

Que linda es Dios. ¿Qué? No, no, no, no. ¿Qué es esto?

L- ¿Y cómo te llamás?
J- Joana Bianchi...- respondo- ¿y vos?
L- Laura Becker... ¿te puedo llamar Joabi?
J- Ehm...- frunzo el ceño divertida- si claro, si querés...
L- Dale...- sonríe- ¿y ellos cómo se llaman?
J- Bueno, estos son Chesko y Elys Gómez...
L- Elysgo entonces...- me guiña un ojo burlona y me hace reír- ¿y Chesko se llama Chesko o es un sobrenombre?
J- Se llama Francisco...
L- Mejor nos quedamos con Chesko...
J- Si ¿no?- arrugo la nariz- suena a menos de ochenta años...
L- Si...- reímos.
_Chicas por favor...- nos llama la atención el profesor Julio.
J- Perdone profe...- me encojo de hombros.

Laura y yo nos miramos aún riendo, sacamos nuestras libretas y buscamos algo para escribir. Nos centramos en la clase, pero eso es aparentemente, porque yo no dejo de mirarle por el rabillo del ojo mientras ella atiende a clases, intercambiamos miradas de vez en cuando, siempre me sonríe. Que linda es y no sé si debería, pero es la verdad y lo que siento, esto no me había pasado jamás con una mina. Dios.