Piropos

12

–Mira Capi –Tony pensaba en que excusa dar, sin lastimar aún más al rubio–. Te dije eso porque... Umm, porque ya sabes, no quería... contagiarte, si eso, contagiarte.

Steve levantó una ceja.

–¡En serio!, me preocupaba que tú también pudieras  contraer un resfriado –contestó rápidamente.

–Pero si tu dijiste que me querías lejos...

–¡Así es Capi!, te quería lejos para no enfermarte.

–Entonces... ¿No me odias?

–¿Qué?, ¡claro que no! –exclamó el castaño verdaderamente incrédulo–. Entre nosotros hay más química que en toda la tabla periódica. Y por eso mismo no debemos alejarnos –terminó diciendo con un guiño.

De pronto, algo hizo que el castaño se quedara atónito.

“¿Steve se ruborizó?”, se preguntó mentalmente al ver al rubio, “Debo estar soñando”

El castaño sacudió ligeramente la cabeza e ignoró la reacción del hombre frente a él.

–Esta bien Tony –respondió Steve más calmado y dirigiéndole la sonrisa más hermosa que Tony hubiera visto.

Un silencio se instauró en el lugar, uno raro, ni cómodo pero tampoco incómodo. Raro.

–Bueno Capi –dijo Tony para terminar con el silencio–, también te buscaba porque... quería saber si quieres venir a una feria de ciencias conmigo –dijo algo nervioso–. Peter va a presentar un proyecto en ella y me invitó, pero... no quiero ir solo –lo último, Tony lo dijo en un susurró, uno que afortunadamente Steve alcanzó a oir.

–Me encantaría acompañarte Tony –respondió de nuevo con una sonrisa.

–De acuerdo, bien, genial –contestó Tony desbordando de emoción–. Entonces nos vemos mañana.

–Si, mañana –contestó el rubio con la misma emoción.

Tony no podía sentirse más feliz, ¡Steve había aceptado!

Además, el que su pequeño malentendido se hubiera arreglado rápido y no hubiera pasado a mayores (como la anterior vez), lo hacía sentir aliviado.

Ambos iban mejorando.

Lento, pero lo hacían.

Y sin darse cuenta, ya estaban creando algo único entre ellos...

Y luego Steve es el despistado 🙄

Al menos ya no pelearon, eso es una mejoría, ¿no? ˏ₍•ɞ•₎ˎ

Derphs fuera.