Piropos

13

–¿Listo?

Steve se puso el cinturón de seguridad y volteó a verlo.

–Listo.

Tony prendió el auto y manejo rumbo a la feria de ciencias.

–Peter estará emocionado al verte –dijo Tony–. Él te admira mucho.

–¿A mi?

–Si Steve, a ti –contestó el castaño rodando los ojos–. Creo que lo inspiras a ser mejor persona o algo así.

Steve río.

–¿Qué? –preguntó aún riendo–. ¿Eso qué tiene que ver conmigo?

Tony río también.

–Mucho Capi, tiene mucho que ver.

El rubio puso una cara de mera confusión, que a Tony solo le dio por reir mas.

–En primer lugar, eres la persona más buena que yo haya conocido. –explicó–. En segundo, eres la persona mas justa del mundo mundial; y tercero, siempre buscas el bienestar de los demás, y sin importar que, les eres leal –Tony solo hablaba, sin notar la sonrisa boba y el ligero rubor en Steve–. En mi opinión, eso te hace una muy buena persona y por eso Peter quiere ser como tú.

–Eso no es cierto –contestó el rubio aun algo nervioso–. No soy tan bueno...

–Si lo eres, ¿y sabes por qué? –preguntó el castaño–. Porque le pedí a la vida que me pasaran cosas bonitas y me pasaste tu.

Steve se quedo mudo, agradecía que Tony no pudiera voltear a verlo por estar atento al camino, sino, lo que vería seria a un rubio sonrojado y nervioso al extremo.

–Y-Yo, yo creo que Peter no quiere parecerse a mi –habló tratando de calmarse–. Él quiere parecerse a ti. Leal a su trabajo, inteligente, obstinado y más que nada seguro de si mismo.

Tony al fin volteó a verlo.

En sus ojos se veía una felicidad inmensa, y si Steve prestaba atención, un ligero sonrojo adornaba sus mejillas.

Sus ojos eran tan hipnotizantes, también hermosos...

–Tony –dijo el rubio interrumpiendo el momento–. El volante, vista al frente.

–Oh, si, si.

Y Tony volvió a lo suyo.

Sin embargo, ambos quedaron con una sonrisa boba en el rostro.

Cuando al fin llegaron a su destino, bajaron del auto y se dirigieron a la feria.

En cuanto entraron, miles de proyectos científicos y tecnológicos inundaron su vista.

Steve se puso algo nervioso entre tanto aparato y material, eso hasta que el castaño hablo.

–Esto va a ser fantástico –exclamó Tony con un brillo en los ojos, como niño en dulcería–. ¡Vamos Steve!

Al rubio solo le bastaba ver feliz y sonriente al castaño para que todo sus nervios se esfumaran.

Con solo ver ese brillo en sus ojos, sabía que todo iba a estar bien.

Después de todo, el castaño tenía razón.

Eso iba a ser fantástico.

¿A qué la mirada de Tony no es hermosa? 🥺

El Capipaleta ya esta cayendo... ¡Al fin!

Se despide una Derphs que va a morir por andar desvelándose  ಥ_ಥ