Taeyong había luchado por conseguir una buena vida, con un trabajo estable, un departamento, hacer lo que quería sin aturdirse entre sus propios cuestionamientos o al menos lo trataba.
También tuvo una vida adolescente movida y a su tiempo había aprendido a vivirla, pero ahora que era adulto, toda esa rutina de ir a fiestas fueron dejadas atrás para establecerse mejor, comenzó a trabajar y pensar qué hacer después. ¿Qué más podía hacer en su vida? ¿Algo nuevo que agregar?
No tenía un propósito en sí, tal vez estaba yendo con la corriente, su vida era algo solitaria a pesar de estar rodeado de personas.
De pocas personas, un mejor amigo con quien contar en las buenas y en las malas.
Tal vez tendría que prestar atención a su alrededor para no llenarse de sorpresas...
Es incorrecto lo que está haciendo en este momento, cuando se dio cuenta de que había metido la pata, se acobardó, se sentía avergonzado de sí mismo por meterse solito en ese lío no sabiendo cómo retroceder el tiempo o al menos cómo justificar sus palabras para no seguir cayendo en el hoyo.
Taeyong no quería lastimar a la persona que se ha quedado a su lado por tantos años, pero ahora no sabe cómo arreglárselas.
Considerando sus propios sentimientos, le gusta alguien más. Un profesor donde él trabaja, no es que esté enamorado, ese compañero de trabajo le atrae lo suficiente como para pensar en pedirle una cita. Y aunque le parezca atractivo, el profesor es un buen amigo y Taeyong se ha dado cuenta de que oportunidades en ese caso; no hay.
Pero eso es nada comparado con este preciso momento sintiéndose entre la espada y la pared.
—¿Taeyong? —llamó el castaño frente a él sacándolo de sus pensamientos—. ¿Hablas en serio? —cuestionó ilusionado casi saltando de su asiento, sus ojos teniendo un brillo especial y su pequeña sonrisa nerviosa podía ser encantadora a ojos de cualquiera, incluso para Taeyong.
Taeyong sintió que un nudo se formaba en su garganta y desvió la mirada un momento sintiéndose tan avergonzado y culpable. ¿Cómo es que podría hacerle algo así a su mejor amigo?
Taeyong pensó que darse una oportunidad estaba bien, que tal vez una relación estable era lo que buscaba ¿verdad? Pero... Se supone que la relación debe ser de dos y no debe llevarla solo uno.
Y se dejó llevar...
«¿¡Qué es lo que haces, Lee Taeyong!?» una vocecita en su cabeza advirtió a gritos y miró a su mejor amigo de frente tratando de controlar sus expresiones porque no quería delatar el desastre de pensamientos que es por dentro.
Entonces se sumergió en lo que había ocurrido minutos atrás antes de llegar a lo que ahora había hecho.
Se encontraba en su casa, Taeyong pensó en invitar a Yuta para pasar un rato viendo películas, o podrían entretenerse jugando con las consolas, pero en cuánto Nakamoto Yuta cruzó la puerta de su hogar, notó que este estaba actuando un poco extraño: nervioso y algo esquivo con él. Por lo que tomando la situación en sus manos, Taeyong lo invitó a sentarse a su lado en el sofá ofreciéndole después algo de beber, un jugo que antes había preparado y con paciencia esperó a que su amigo se abriera ante él, porque con ese extraño comportamiento, tenía a Taeyong preocupado.
—Taeyong, yo sé que hemos pasado años juntos... desde la universidad y te he considerado mi mejor amigo por tantos momentos juntos... y en serio que me lo pensé muy bien antes de venir aquí porque le di vueltas al asunto y... —se detuvo porque temía decir las palabras equivocadas, miró a Taeyong y sus ojos brillaron al verlo.
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Love Me Now ⋮ TaeYu
FanfictionNakamoto Yuta se ha confesado a su mejor amigo, Taeyong. Las palabras sinceras del japonés habían pisado tan fuerte el corazón del coreano que llegó a sentirse extraño. Taeyong sabía que si rechazaba a Yuta, éste tendría que alejarse para superar e...