Love Me Now ⋮ TaeYu

Capítulo 14.

En el momento en que logró enfocar su visión, se dio cuenta de que había sido un sueño. Uno sobre esos recuerdos que atesora y al mismo tiempo sigue doliendo.

La voz de Taemin en su sueño fue como un arrullo y a la vez un golpe a su realidad.

«Te acompañaré Taeyong-ah. No lo dudes, estaré a tu lado»

Si solo hubiera podido haber hecho algo...

Se enderezó en la silla luego de darse cuenta de que se había quedado dormido recostado en la mesa sobre las evaluaciones que había estado calificando de sus alumnos.

Taeyong tuvo que volver a revisar las anotaciones porque dudaba de sí mismo en esos momentos. Después se puso a la lavar los platos de su cena, aún faltaba mucho para tener que ir a la cama, se sentía un poco cansado. Esta semana hubo ferias en la escuela y él estuvo mucho mas activo que el resto de los meses, preocupado por sus estudiantes a cargo.

Su teléfono sonó con una notificación de mensaje, cuando revisó no sabía si el mensaje era oportuno o no.

Profesor Lee
¿Vamos por unos tragos?

Era Chittaphon. Taeyong resopló un poco divertido por esto, su compañero de trabajo ha estado regañandolo por invitarle e insistirle en tomar unos tragos pero ahí está, es él quien se lo pide después de haberse negado.

¿Para qué?

Porque necesito compañía
y el profesor Lee
es el mejor!!!

Taeyong rodó los ojos y siguió tecleando.

Ven a mi casa.
Trae los tragos y yo preparo
algo para acompañar

Eres el mejor 👏👏👏
Jaehyun y su novio
también van 😌

¿Ya andan de novios?
¿Por qué soy el último en saberlo?

Porque yo hice el trabajo😌

Taeyong se rió antes de responderle:

Los espero 😘

Era bueno un poco de compañía porque últimamente la casa era muy silenciosa.

Pero este tiempo también ha hecho que pueda pensar en otros asuntos y en muchas posibilidades.

Extraña a Yuta, es una verdad que duele.

Aunque al principio pudo haber actuado por puro impulso buscando asegurar la compañía del japonés a su lado, la situación entre ellos fue empeorando y podría haber optado por otras posibilidades para su relación para así no haber llegado hasta donde están ahora. Pero sabe que Yuta estará bien. Yuta es fuerte.

Yuta ha llegado a tocar su corazón, ese que se había cerrado luego de aquel incidente hace ocho años. Sin embargo, a pesar de que el sentimiento es mutuo, Taeyong no puede entablar una relación.

Ha tomado su decisión y tiene asuntos por atender aún.

❈

Era un domingo por la mañana que Taeyong estaba tratando de asegurarse de que nadie siguiera sus pasos. Conducía rumbo a una cita, había acordado encontrarse con un viejo amigo el cuál ya estaba esperando su llegada, Lee Minho estaba estacionado y recostado en la puerta de la camioneta.

Hacía mucho frío, ambos llevaban abrigos largos y hasta guantes de algodón para mantener las manos calientes y no morir de frío. Porque apenas Taeyong salió de su auto, se estremeció a causa del viento frío. 

Taeyong sonrió incrédulo. El encuentro es en una vieja gasolinera.

—Pensé que no vendrías, estabas atrasado TY Track. —burló Minho metiendo las manos en los bolsillos de su abrigo.

Taeyong rodó los ojos ante el apodo mencionado que le fue dado por Taemin y que luego toda la escuela lo estuvo usando para referirse a él.

—Tienes pinta de ser un malhechor en vez de un policía, un Lee tiene que tener buena presencia ¿Por qué vistes ropas desgastadas y tienes una camioneta que parece que va a caer en cualquier momento? —Taeyong dijo sin dejar de mirarlo, es verdad, su amigo lleva puestos unos pantalones desgastados y una camiseta descolorida. No era su intención tratar de ofenderlo pero Taeyong tenía una imagen muy diferente de su amigo.

Lee Minho rió a carcajadas.

—Estaba de encubierto, como sea ¿Por qué dijiste que querías verme? —abordó Minho subiendo a la vieja camioneta esperando a que Taeyong entre— Vamos a dar una vuelta, será mas fácil.

Cuando Taeyong se colocó el cinturón de seguridad, Minho fue capaz de conducir.

—Te dije que no quería meterme en los asuntos de Johnny.

—Lo dejaste bien claro hace dos años —dijo Minho— Por favor, sé directo, ¿qué te hizo llamarme?

Taeyong respiró profundamente dándose cuenta de que a pesar de que la camioneta por fuera se veía vieja, contenía un aroma a frutas por dentro que de alguna forma le hizo sentir menos peso y más alivio.

—No quiero perder a la única persona que ha estado para mí durante todos estos largos años.

Minho puso su mano sobre el hombro de su viejo amigo. Podrían haberse distanciado a lo largo de los años por un o otro motivo pero sabían por lo que habían pasado. Minho sabía que habían heridas de las que no fueron capaz de tratar.

—Perdóname Taeyong, por no estar ahí para ti cuando necesitabas ayuda. Yo nunca debí marcharme.

—No lleves ese peso contigo, no deberías porque nunca fue tu intención —respondió Taeyong después de un suspiro—. Taemin murió y fue duro, no imagino cómo te sentiste cuando te enteraste, lo amaste. Perdimos mucho y seguimos perdiendo. Yo también te pido perdón, Minho.

—Lo sigo amando pero tenía que irme... —Minho detuvo el coche porque sentía que ya no podía conducir sintiendo todas esas emociones que había estado guardando.

—Lo sé Minho-hyung, lo sé, no tenías cómo saberlo. Y si no te fueras ido tal vez hubieras tenido el mismo destino que Taemin. Aunque no sabemos qué hubiese cambiado, pasaron muchas cosas después y creo que como persona, cometimos errores pero todavía estamos aprendiendo y viendo que no vuelvan a repetirse.

Minho se volteó ligeramente para encarar a Taeyong quien le sostuvo la mirada.

—Eres un buen chico Taeyong. No lleves esa peso contigo, has luchado demasiado, deja que otras personas te ayuden.

Los ojos de Minho eran tan honestos y parecían extender sus manos acariciando ligeramente las heridas de Taeyong, así lo sentía él. Ante esas palabras, Taeyong no pudo evitar que sus ojos se llenaran de lágrimas.

Sabía que estaba conteniendo sus sentimientos pero no sabía que aún dolía tanto, no sabía que iba a romper en lágrimas y que sollozaría con el alma rota. El simple abrazo de Minho le ayudó a poder desahogarse.

—Dejemos ese pasado, Taeyong. Creo que tenemos que hablar de muchas cosas. Pero gracias por buscarme.