Capítulo 7.

271 24 0
                                    

Yuta tiene su departamento en el que comparte piso con su amigo Taeil, pero últimamente no está quedándose con él. Yuta pasa sus noches con Taeyong, como sus trabajos les deja poco tiempo para pasar juntos, eligió pasar sus noches en la casa de su novio.

Es cierto que han dado un paso más y Yuta todavía se siente en las nubes, Taeyong siempre prepara sus clases noche a noche después de cenar, Yuta en ese tiempo se encarga de ver alguna serie de televisión, a veces comienza en jugar con su teléfono, o charla con Taeyong quien siempre está escuchando o comentando algo.

Hay algo que incomoda a Yuta y que aun no se lo ha dicho a Taeyong.

Y es que el teléfono de Taeyong suena por las madrugadas, no es frecuente, Yuta se ha dado cuenta de eso desde que comenzó a dormir en la habitación de Taeyong, es decir, cuando empezaron su relación. Solían dormir juntos pero esos acontecimientos no pasaban.

Yuta tiene el sueño ligero. ¿Desde cuándo están esas llamadas? También se pregunta si ha sucedido antes de su relación, estos días también notó que Taeyong deja el teléfono en silencio para evitar que Yuta se despierte.

Yuta en un principio no dijo nada al respecto, pensó que podría tratarse de personas que no hacen nada más que fastidiar la vida de otros. Tenía mucha curiosidad y quería preguntar si tal vez las llamadas eran de algún alumno que quería jugarle alguna mala broma, suele suceder.

Una noche, Yuta se despertó porque estaba teniendo mucho frío, se dio cuenta de que había pateado su cobija mientras dormía. Entonces también nota algo, a su lado el espacio está vacío, miró hacia la puerta de la habitación, estaba abierta y podía ver con claridad por la luz de la sala que alumbra el pasillo. Fue cuando se levantó tratando de despejar el sueño de sus ojos.

Llegó a la sala encontrando a Taeyong sentado en el suelo, con los brazos en el sofá y su cabeza descansando en ellos. Yuta no entendía la razón por la que su novio se habría levantado de la cama para luego quedarse dormido allí.

No fue hasta que vio el teléfono de Taeyong sobre el sofá, casi hundiéndose en los filos del mismo, que decidió despertarlo y finalmente preguntar. Está preocupado.

—No importa, ya pasó. —fue la respuesta de Taeyong.

A la mañana siguiente, Yuta volvió a preguntar por las llamadas, Taeyong respondió que no es importante pero cuando lo dijo con un tono exasperado, parece querer evitar a Yuta. Yuta deduce que no es como él lo dice. Sin embargo, por las mañanas y durante todo el día, Taeyong es el mismo tipo dulce que ha conocido.

Trató de no pensar en ello. Sin embargo, el resto de la semana, Taeyong habló menos y decía estar cansado para irse temprano a la cama y no cruzar más palabras con Yuta. Si Yuta no puede despejar sus dudas, la inseguridad no hará mas que incrementar y tiene miedo de dejarse llevar por suposiciones.

No le estaba dando ninguna oportunidad de poder hablar.

Su novio estaba dándole la espalda, eso no le agrada, ¿A quién le agradaría?

Yuta quiere comprender la situación pero cómo lo haría si Taeyong lo está evitando. Yuta, con su mano temblorosa tocó suavemente el hombro de su novio, pudo sentirlo despierto cuando el mayor se tensó ante su toque.

—Taeyong... —llamó en un susurro, con un tono esperanzado, sin embargo, no hubo respuesta por un largo rato.

Movió en suaves círculos su dedo con la intención de dar algún masaje. Entonces, la mano de Taeyong sostuvo la suya y detuvo cualquier movimiento, incluso, acercamiento.

—Yuta, tengo sueño, por favor.

Era una petición que sonaba a regaño. Taeyong parecía molesto.

No te hice nada. Yuta quiso decirle sintiendo su pecho calentarse de ira.

Decidió tomar una bocanada de aire antes de soltar estas palabras que lleva tiempo pensando en si decirlas o no:

—¿Tienes algo que hacer mañana? Podemos quedar después del trabajo.

Y contuvo la respiración, como el mayor no podía verlo, no sólo porque Taeyong está de espaldas a él, sino por la oscuridad de la habitación, Yuta juntó sus manos rogando para que su novio dijera algo positivo ante su pregunta. Por favor, dí que sí.

Escuchó a Taeyong suspirar. Cansado, exasperado.

—No lo creo. Mañana hay trabajo, Yuta, duerme, al menos yo tengo sueño.

Y toda ilusión se desvaneció.

Yuta se dió por vencido en ese momento.

No podrían pasar más tiempo juntos.

Tal vez sea su exageración, ¿Por qué están retrocediendo y no avanzando en su relación como esperó?

Taeyong conoce mucho de Yuta, entonces, ¿Por qué ahora tienen tanta falta de comunicación?

Yuta se ha vuelto más inseguro y eso no debería ser así. Se supone que Taeyong es un hombre increíble.

Love Me Now ⋮ TaeYuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora