Capítulo 4

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Maddie

Ya eran los últimos días de verano, en poco empezaban las clases y yo estaba atacada por empezar ya.

Las últimas semanas las pase trabajando por las mañanas en la cafetería junto a Bob y por las tardes Liam y Olivia, que me sacaban de casa para llevarme a la playa y para cenar en la cafetería.

Se podría decir que lo único que hacíamos era bañarnos en la playa, dar paseos, escuchar música mientras veíamos el atardecer e íbamos a la cafetería a cenar y muchas otras veces quedábamos para desayunar, nos daba pena separarnos durante todo el curso por eso aprovechamos a estar juntos.

Ese día habíamos quedado con el grupo de Ethan y Daniel, con Ethan, bueno, no le volví a ver desde la última vez que discutimos en su casa, pero si habíamos hablado por mensajes.

Terminé mi turno en la cafetería y me despedí de Bob para salir donde me esperaba Liam para acompañarme a casa, salí y le vi apoyado en su moto mirándome con una sonrisa, le sonreí y fui corriendo a abrazarle, me dio un beso en la cabeza y me dijo:

-Anda venga sube, que al final vamos a llegar tarde como siempre –me dijo riéndose.

El defecto tan grande que teníamos Liam y yo en común es que siempre llegábamos tarde a todos lados, siempre.

Que quedábamos con el grupo, nosotros éramos los últimos en llegar, que había que coger un bus, teníamos que correr a la parada para poder llegar a tiempo, y ese día no iba a ser menos. Habíamos quedado con todos para ir a dar una vuelta por el pueblo y luego terminar en la playa para hacer una hoguera como hacíamos todos los años para despedir el verano.

Me subí en la moto con él y en cinco minutos llegamos a mi casa, entramos y estaba mi madre a punto de irse a trabajar, levanto la cabeza de los papeles que leía sentada en el comedor y sonrió al vernos y nos dijo:

-No lleguéis muy tarde esta noche que ya mañana empiezan las clases –nos dijo dulce.

Le respondí:

-No mamá, puedes estar tranquila –sonreí.

Seguido de eso subí rápido a mi cuarto a ducharme y ponerme otra ropa que no fuera el uniforme del trabajo mientras Liam hablaba abajo con mi madre, terminé lo más rápido posible y baje de nuevo.

Salimos de allí y nos dirigimos hacia la plaza donde ya estaban todos, lo sabíamos porque Olivia nos había reventado el teléfono a llamadas tanto a Liam como a mí, al contrario, ella era super puntual y odiaba que fuéramos tan pasotas.

Vimos al grupo de lejos ,nos acercamos a ellos, Olivia y yo éramos las únicas chicas de ese grupo, los demás eran Liam, Ethan, Daniel, Marcos y Aleix. Todos nos llevábamos bastante bien.

Olivia ya molesta se acercó y nos dijo:

-Hombreeee si ya pensaba que tenía que llamaros por código morse para que vinierais –anuncio irónica.

Liam y yo nos miramos ,nos reímos y él le dijo:

-No te pongas de mal humor que se te hincha la vena de la frente y estas más horrible de lo normal, además ya sabes cómo somos –se empezó a reír

-Liam a veces me caes tan mal –soltó molesta

-Mierda, no me digas eso que haces que llore –dijo riéndose

-Oli ya, déjale –dije para que no le saltara al cuello

Nos juntamos con todo el grupo y estuvimos dando un paseo por todo el pueblo, cuando por fin llegamos a la playa y nos sentamos en la arena, Ethan se dignó a dirigirme la palabra.

-Hola preciosa –dijo con una sonrisa

-Hola –dije seca

Chasco la lengua y se sentó a mi lado cogiéndome las piernas para ponerlas encima suya y posar su mano en mi muslo

-Perdóname, sabes que a veces puedo ser un puto gilipollas

- ¿Solo a veces? -el apretó los labios y me miro serio

-Vale, pero joder, entiende que no me lo esperaba

-Lo puedo entender, pero no entiendo porque no te alegras de la oportunidad que me dieron

-Me alegro, pero yo te quería conmigo este último curso, no con un montón d... -le interrumpí

- ¿Un montón de tíos que no son tu? No me jodas Ethan – dije cabreada

Sabía que odiaba que se pusiera en modo posesivo y que odiaba que hablara de ese modo, no era un jodido objeto.

-Pues si eres mi novia es normal que me ponga celoso ¿no?

Me reí y le solté:

-Si es normal que te pongas celoso, pero no es normal que te comportes como un cavernícola

Él sabía que a mí no me molestaba que se pusiera celoso, hasta el punto de que eso fuera sano, me miro y me dijo:

-Lo siento nena, de verdad, perdóname, claro que estoy orgulloso de que hayas conseguido llegar hasta allí y claro que confío en ti, te lo demostrare este curso. -seguido de eso me cogió de la cara y me beso.

Le creí, juro que le creí y me pensé a mí misma que de alguna manera eso iba a cambiar a mejor.

No debí ilusionarme tan rápido.

[#1] Algo Entre Nosotros (Dolor y Promesas)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora