El pantano resultó ser mucho más grande de lo que había imaginado; llevábamos minutos adentrándonos a él, y aún, no veía otro muelle o alguna estructura sólida en la que desembarcar.El frío se hacía más abrumador con el paso del tiempo, cómo si nos adentráramos a un lugar helado o de nieve; pero no había nada de eso a nuestro a alrededor.
Me abrazo a mí misma, con la mirada caída sin querer hacer contacto visual con lo que fuera aquella criatura que remaba.
Ni una sola palabra, ni un solo sonido había salido de sus labios cuarteados en nuestra trayectoria. Pero de los míos, por el momento, tampoco él escucharía nada.
La barca sigue avanzando y con ella, se van desvaneciendo mis esperanzas y la ilusión de que sería rescatada por el cielo en algún corto momento.
Comienzo a ver cómo la barca va perdiendo velocidad, a la vez, que la criatura va dejando de remar. Mi pecho se aprieta al saber que ya habíamos llegado a mi castigo, a mi tortura; a lo que Hades había planificado hacer con mi alma.
La criatura se voltea, y por primera vez, sus ojos negros se clavan en mi mirada. Ésta, no habla, pero en mi interior, sé claramente lo que desea de mí. Cómo si con solo mirarme, pudiera transmitirme lo que piensa, decirme lo que siente... cómo si pudiera leer mi alma.
Me levanto del asiento la barca, y camino hacia el borde de ésta cómo la criatura me había ordenado. Miro el agua que nos rodea y noto cómo algo se mueve dentro de ella. Me agacho solo un poco para poder apreciar mejor de qué se trata; quedo totalmente fría al ver almas sumergidas bajo las aguas de aquel pantano. Nadando en un constante vaivén sin aparente destino alguno.
Miro sobre mi hombro y los ojos negros de la criatura vuelven a cruzarse con los míos. Siento en mi interior cómo ésta me pide que meta mi mano al agua del pantano y que tome un alma por ella.
Mi ceño se frunce un tanto mientras le observo. El simple hecho de tener que meter mi mano a una masa de agua repleta de almas en pena, me erizaba la piel.
¿Para qué quiere qué saque un alma de ahí?
¿Porqué lo tengo que hacer yo?
Me coloco en cuclillas, obedeciendo a los mandatos de aquella criatura. Observando las almas en pena recorrer el agua grisácea de aquel pantano de un lado para otro.
Extiendo mi mano acercándola a la superficie del agua; mis muñecas tiemblan y no puedo evitar tal involuntario movimiento.
Volteo mi rostro hacia la criatura, cómo preguntándole si estaba segura de que quisiera que hiciera esto; a lo cuál ésta, mueve su cabeza lentamente de arriba a abajo queriéndome decir que sí lo hiciera.
Mis ojos vuelven al pantano de almas; y sin pensarlo demasiado, meto mi brazo dentro este. Una vez mi mano hace contacto con el agua, siento cómo mi piel comienza a quemarse, provocándome un fuerte dolor que hace que un grito salga de mis entrañas y retire la mano de inmediato.
Temblorosa, observo mi mano y veo cómo la piel está arrugada y quemada. Cómo si la hubiera zambullido en un balde de aceite hirviendo, o tal vez, cómo si me hubiera caído ácido puro en ella.
Sollozo mirando cómo la piel de mi mano se quebranta y expone el músculo bajo ella; volteo y observo a aquella criatura quién aún me dice que lo haga.
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Hades ©
FantasyMar es una chica simple, sin mucha gracia y un poco torpe. Su vida no es mejor ni peor que la del promedio de personas, eso sí, un tanto más aburrida que la de sus amigos de la universidad. Mar, es una estudiante de medicina la cuál es forzada a e...