Capítulo 1

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Café. Pacientes. Café. Pacientes. Café. Diagnósticos. Café. Pacientes. Café.

"¡Sugawara-sensei!" — Llamaba una rubia de estatura pequeña.

"¡Oh! Yachi-chan. ¿Cómo vas en tu primer día en el área de enfermería?" — La sonrisa con la que el chico se le dirigía a la rubia podía ser fácilmente la cura contra cualquier enfermedad.

Sugawara Koishi, 27 años. Residente del área de medicina interna del Hospital de Miyagi. Cualquiera que lo conociera sabía lo mucho que se esforzaba en su área de trabajo.

Le gustaba tratar con cualquier tipo de paciente, niño, joven, adulto, adulto mayor; además de que en su área sabía perfectamente sobre cualquier diagnóstico que para otros residentes podían ser desconocidos, por lo que él era bastante confiable al resolver diferentes "misterios" que se presentaban diariamente en el Hospital.

"Muy bien Sugawara-sensei. Gracias por preguntar. Bueno... Iba a revisar a Ukai-san pero..."

"No me digas, ¿volvió a desaparecer?" — Sonreía divertido el joven doctor. — "Sé dónde está. Siempre camina por los pasillos pero llega al mismo destino todos los días. Yo me encargo".

El doctor de cabellos platinados recorrió su camino por los pasillos hasta llegar a unas puertas automáticas que daban a una terraza, donde un hombre adulto, de unos 78 años, delgado, y algo canoso observaba el atardecer.

"Hace frío Ukai-san. ¿Entramos?" — El hombre lo miró y sonrió radiantemente.

"¿Se casaría conmigo?" — Suga se reía de la pregunta del hombre. No era la primera vez que le hacía la propuesta. Pero no podía culparlo. Era un hombre que sufría de alzheimer, llevaba dos meses internado.

"Por supuesto Ukai-san. ¡Yachi!" — Llamó a la enfermera. — "Lleva a mi 'prometido' a su habitación. Adminístrale una dosis de aducanumab. Su nieto vendrá hoy". — Yachi sonrió divertida y acató la orden.

Suga continuaba sus turnos. No había parado durante 48 horas, algo exagerado pero de la cantidad de horas de turnos que hiciera dependía su estadía en el hospital y no tendría que irse de su ciudad, le encantaba Miyagi, además toda su familia estaba allí.

El sonido de su teléfono lo sacó de sus pensamientos. Se trataba de su hermano adoptivo, a quien adoraba con todo su corazón.

"Hola 'mi bebé'. ¿Cómo están?"

"Koishi, no me llames así, soy tu hermano, no tu hijo".

"Ya. Lo siento Shoyo". — Se reía de su pequeño hermano. Podía imaginar que se encontraba haciendo pucheros como un niño pequeño.

"Por favor dime que sí vendrás hoy. Rui y Toshiro quieren ver a su tío favorito y me pidieron que te rogara. No los culpo después de todo cumplen dos años".

"Me halagan. Espero que Natsu-chan no los escuche. Me mataría". — Ambos rieron ante aquel pensamiento. — "Pero Shoyo, no puedo ir. Aún tengo que trabajar".

Sora Mitai [Finalizada] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora